De epopeya a pesadilla
A partir de las biograf¨ªas cruzadas de dos revolucionarios chinos y dos j¨®venes traductoras rusas que se enamoraron en el Mosc¨² de principios de los a?os treinta, Patrick Lescot, sin¨®logo y corresponsal de France Presse en Pek¨ªn durante varios a?os, ofrece un testimonio veraz y documentado sobre las relaciones entre el comunismo sovi¨¦tico y el chino a lo largo de setenta a?os. No estamos ante la habitual hagiograf¨ªa o biograf¨ªa del dirigente pol¨ªtico de m¨¢xima influencia (no se pierdan sin embargo la breve pero afinada biograf¨ªa de Mao de Jonathan Spence, editada en Mondadori), el protagonismo se cede en esta ocasi¨®n a l¨ªderes o activistas purgados y a ciudadanas an¨®nimas apenas mencionados en los libros de historia que vivieron en carne propia el paso de la epopeya revolucionaria a la pesadilla totalitaria.
EL IMPERIO ROJO. MOSC?-PEK?N, 1919-1989
Patrick Lescot Traducci¨®n de Roser Berdagu¨¦ Circe. Barcelona, 2001 515 p¨¢ginas. 4.200 pesetas
UTOP?A Y G?NERO. LAS MUJERES CHINAS EN EL SIGLO XX
Amelia Saiz L¨®pez Bellaterra. Barcelona, 2001 271 p¨¢ginas. 2.500 pesetas
El relato se construye a partir del testimonio oral de tres de los cuatro protagonistas y a partir del trabajo de archivo en el KGB y el Komintern -la Internacional Comunista-, a lo que se le suma el uso de una amplia bibliograf¨ªa memorial¨ªstica e historiogr¨¢fica. De los cuatro protagonistas, el ¨²nico con una cierta relevancia hist¨®rica es Li Lisan. Como Zhou Enlai o Deng Xiaoping, Li Lisan entr¨® en contacto con el marxismo en Francia. Fue uno de los fundadores del partido comunista chino y se convirti¨® en su l¨ªder a finales de los a?os veinte. En aquel momento, Mao era un activista de segunda fila que propugnaba la guerrillera y la revuelta campesina. Ello le vali¨® la condena de Li Lisan, que siguiendo las directrices de Mosc¨² era partidario de una estrategia obrerista y urbana. Mao nunca se lo perdon¨®. Sin embargo, muy pronto tambi¨¦n Li Lisan ser¨ªa apartado de la direcci¨®n por desobedecer las directrices del Komintern. El otro l¨ªder revolucionario biografiado en el libro es Zhang Bao, un estudiante chino en Estados Unidos que a finales de los a?os veinte se afili¨® al partido comunista americano. Buscado por el FBI, fue enviado secretamente en 1932 a Mosc¨² para completar su adoctrinamiento.
Fue en un Mosc¨² subyugado
por el liderazgo de Stalin donde estos dos j¨®venes comunistas chinos se enamoraron de dos j¨®venes traductoras del Komintern. La observaci¨®n de los avatares por los que pasan estos dos matrimonios mixtos sino-sovi¨¦ticos se convierte en un itinerario altamente revelador. Tras unos pocos a?os de idilio no tardar¨ªa en aparecer el rostro siniestro del terror de Estado.
Li Lisan y Zhang Bao fueron detenidos en 1938 por las fuerzas del NKVD. El relato minucioso de los interrogatorios, las torturas y los absurdos procedimientos judiciales conducen muy pronto al Gulag. Los dos a?os de Li Lisan en las c¨¢rceles de Mosc¨² se quedan en nada al lado de los 18 a?os pasados por Zhang Bao en los campos de trabajo del norte de Rusia y de Siberia. Li Lisan consigui¨® la rehabilitaci¨®n y en 1949 lleg¨® a formar parte del primer Gobierno de Mao como ministro de trabajo. Pero en menos de dos a?os cay¨® en desgracia. La ruptura entre la URSS y China en 1960 traer¨ªa nuevos problemas a estas dos parejas sino-sovi¨¦ticas. Con la Revoluci¨®n Cultural de 1966, el terror sistem¨¢tico del Gulag de Stalin encontr¨® un digno sucesor en el terror desbocado de los guardias rojos y del Laogai, la red de campos de reeducaci¨®n de Mao. A Li Lisan le 'suicidaron', su mujer fue encarcelada durante ocho a?os y Zhang Bao pasar¨ªa siete a?os en el Laogai.
El libro se lee con la pasi¨®n de una novela absorbente, pero al tiempo mantiene el rigor de la biograf¨ªa ce?ida a los datos y los hechos concretos, evitando manique¨ªsmos y condenas enf¨¢ticas, dejando que los hechos se califiquen solos. Como documento hist¨®rico arroja nueva luz sobre la primera d¨¦cada de los comunistas chinos, sobre la extinci¨®n del Komintern y el paso de la doctrina internacionalista a la del 'socialismo en un solo pa¨ªs' y sobre el Gulag y el Laogai. Quiz¨¢ lo mejor del libro es la abundancia de detalles y percepciones de una gran vivacidad, as¨ª como el tratamiento de la galer¨ªa de secundarios de lujo, desde la mujer de Togliatti, el retrato matizado del incombustible Zhou Enlai o el siniestro torturador Yejov.
En Utop¨ªa y g¨¦nero. Las mujeres chinas en el siglo XX, Amelia Saiz ofrece un completo panorama de los cambios que se han producido en las relaciones de g¨¦nero en la sociedad china. El punto de partida es la caracterizaci¨®n de los arquetipos de mujer de la sociedad tradicional marcada por la doctrina confuciana. A inicios del siglo XX, la situaci¨®n de la mujer china era de una absoluta discriminaci¨®n: el concubinato o la pr¨¢ctica del vendaje de los pies sintetizan una situaci¨®n de postraci¨®n absoluta en una sociedad patriarcal sin paliativos. La ca¨ªda del r¨¦gimen imperial en 1911 abri¨® nuevas perspectivas. El libro analiza los primeros movimientos y las primeras reformas que, especialmente a partir de los a?os treinta, surgieron tanto en el campo del Gobierno republicano del Kuomingtang como de las zonas rurales controladas por los comunistas.
La subida al poder de Mao en 1949 abre un periodo definido por significativas reformas y transformaciones de la situaci¨®n de la mujer, pero tambi¨¦n por dificultades de implementaci¨®n y divergencias notables entre los hechos y el discurso oficial. Inspir¨¢ndose en las doctrinas de Engels, los dirigentes chinos confiaban que el acceso de la mujer al proceso de producci¨®n cambiar¨ªa por necesidad su posici¨®n. Sin embargo, la discriminaci¨®n econ¨®mica ha subsistido y el protagonismo pol¨ªtico de la mujer en China es ¨ªnfimo. El otro ¨¢mbito de actuaci¨®n fue el matrimonial. En este campo, la proclamaci¨®n de la libertad de elecci¨®n de pareja no ha conseguido borrar del ¨¢mbito rural la pr¨¢ctica del matrimonio arreglado. La pervivencia de viejas pautas culturales se revela tambi¨¦n en las resistencias a la pol¨ªtica del hijo ¨²nico iniciada en 1979, con frecuencia transgredida por la voluntad de tener un hijo var¨®n.
Amelia Saiz ofrece un matizado estado de la cuesti¨®n incorporando las principales tesis y discusiones presentes en la bibliograf¨ªa m¨¢s reciente. El libro en este sentido transita la historia de la China del siglo XX desde una ¨®ptica que hace visibles a las mujeres y, al mismo tiempo, permite obtener una actualizaci¨®n de los debates te¨®ricos y de las diversas perspectivas que se suscitan en su estudio. En el ¨²ltimo cap¨ªtulo del libro se aportan los resultados de una investigaci¨®n realizada sobre el colectivo de las j¨®venes universitarias de los a?os noventa. El libro viene a complementar estudios anteriores sobre la cuesti¨®n publicados en Espa?a como los de Taciana Fisac, Mujeres en China (AECI, 1995) y El otro sexo del drag¨®n: mujeres, literatura y sociedad en China (Narcea, 1997), en el que analiza los cambios de representaci¨®n de la mujer en la literatura china desde la ficci¨®n cl¨¢sica hasta la narrativa contempor¨¢nea.
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