Tirando a bulto

'La controvertida financiaci¨®n de los cursos de idiomas'. As¨ª se le¨ªa en un titular del peri¨®dico del domingo, 4 de noviembre. No crea que dec¨ªa '....de algunos cursos de idiomas'. No, no. A primera vista de todos. Condenar a justos por pecadores, difamando, generalizando, tirando al bulto, no es ni una buena pr¨¢ctica profesional, si me lo permite, ni es lance que deje (buena) fama. Lo ¨²nico que deja es un amargor profundo en la conciencia de quienes, como los profesionales de las Academias de idiomas, llevamos d¨¦cadas ejercitando una labor esforzada, para acabar leyendo c¨®mo, al parecer, somos los m¨¢s desalmados del sector de la formaci¨®n no reglada, que tenemos los expedientes sancionadores y las reclamaciones apilados por docenas.

?Sab¨ªan que en la Comunidad hay m¨¢s de 200 centros diferentes que ense?an idiomas (quiz¨¢ la mayor¨ªa s¨®lo ingl¨¦s)? ?Sab¨ªan que las reclamaciones a las que se refiere la periodista en sus indocumentados art¨ªculos apuntan s¨®lo a menos de una docena de nombres comerciales? ?Sab¨ªan que, en todo caso, los centros objeto de reclamaci¨®n o sanci¨®n tienen nombre y direcci¨®n?. Menos mal, como dice la periodista, que 'es dif¨ªcil generalizar'. Ser¨¢ por eso que a la columna la han denominado DEBATE.

En esta Comunidad coexistimos un importante n¨²mero de academias que venimos realizando nuestra actividad desde hace m¨¢s de 25 a?os, compitiendo en un mercado dif¨ªcil, por ser escaso e intangible el producto, y en el que nos toca hacer un poco de todo. De todo, excepto enga?ar a nuestro cliente, nuestro medio de supervivencia. Parece ser que eso lo hacen, presuntamente, algunos centros, con complejas condiciones de pago y financiaci¨®n, que valen, no obstante, para ciertos clientes y no valen, en cambio, para otros. Y parece ser, tambi¨¦n, que alguno de esos centros no tiene la intenci¨®n de estar aqu¨ª dentro de 25 a?os. Pero nosotros, la enorme mayor¨ªa de las academias de idiomas, no tenemos la intenci¨®n de provocar la huida ni de abusar de nuestros clientes. Rotundamente no.

No discrepo con el peri¨®dico por el art¨ªculo en s¨ª mismo, sino por el m¨¦todo de investigaci¨®n y su enfoque. Siempre que leemos art¨ªculos de este tipo con esas afirmaciones sesgadas y superficiales, verdades a medias, m¨¢s de relleno period¨ªstico que para hacer llegar al lector una informaci¨®n ¨²til, contrastada, con contenidos para ayudarle a hacer una elecci¨®n acertada, nos enfrentamos a la misma duda: De verdad, ?le interesamos a alguien?