Saviola acaba con el Valladolid
Nada como los goles para pasar p¨¢gina. El Bar?a se sacudi¨® anoche en el Camp Nou, en una jornada que ni pintada, todos los nervios y la depresi¨®n acumulada tras la eliminaci¨®n de la Copa en Figueres. Todo les sali¨® bordado. Tras conocer los tropiezos de todos sus rivales, los azulgrana recogieron el testigo y replicaron con la mayor goleada del a?o para situarse a un punto del l¨ªder, el Deportivo. El Bar?a, acusado ¨²ltimamente de falta de punter¨ªa, exprimi¨® su olfato con cuatro goles en los que Saviola tuvo un protagonismo may¨²sculo: meti¨® el primero, dio el pase del segundo a Puyol -que recibi¨® un justo premio a su incre¨ªble progresi¨®n-, fue objeto del penalti del tercero -transformado por Kluivert- y logr¨® al final el cuarto. No merec¨ªa un final as¨ª el Valladolid, que puso tanto f¨²tbol como miop¨ªa ante puerta.
El marcador enga?a porque el Bar?a no hizo, ni de lejos, un partidazo. Pero le funcion¨® lo necesario en las dos porter¨ªas: la eficacia en la delantera y la extraordinaria solvencia de Bonano, que desesper¨® a los vallisoletanos. El partido, que reun¨ªa la alargada sombra de Figueres, el mal tiempo y una grada semivac¨ªa, invitaba al pesimismo, pero el Bar?a tuvo la fortuna, en dos minutos de lucidez pasado el primer cuarto, de responder a los malos augurios. Bajo la estela de los tropiezos de sus rivales, que contribuyeron a apaciguar el Camp Nou, los azulgrana exprimieron su olfato y dejaron el encuentro encarrilado en un santiam¨¦n.
El Bar?a, dirigido ayer por Gerard, que sustitu¨ªa a Xavi, que estaba con la selecci¨®n sub-21, salt¨® al campo a velocidad de tortuga con movimientos m¨¢s que previsibles mientras el Valladolid, agazapado atr¨¢s con el goleador Tote como ¨²nico hombre en punta, esperaba el contragolpe. Pero el gui¨®n lo rompi¨® pronto Kluivert, que tanto ataca como defiende o abre el campo hasta el bander¨ªn. Fue as¨ª como, desde la medular, vio a Overmars en la punta izquierda, que volvi¨® por sus fueros: par¨® el bal¨®n, regate¨® a un defensa, pens¨® y dio un pase perfecto a Saviola para que batiera a Ricardo con una pelota que se le col¨® entre las piernas.El gol le vino de perlas al pibito, en el ojo del hurac¨¢n desde que fue visto poco antes del partido de Figueres comprando en Andorra. Su acierto le redimi¨® especialmente ante el banquillo sin saber todav¨ªa que iba a cuajar su partido m¨¢s completo desde que est¨¢ en el Bar?a. Todav¨ªa estaba celebrando el gol cuando intervino despu¨¦s en el segundo: Puyol se fue por la banda derecha, combin¨® con Saviola y se lanz¨® hacia la porter¨ªa del Valladolid para marcar su primer gol como jugador, al menos en el primer equipo, del Bar?a. La cosa no qued¨® ah¨ª porque Saviola, a pase otra vez de Overmars, estuvo muy cerca del tercero.El Bar?a, con poco control sobre el juego -Gerard es mediapunta y no est¨¢ habituado a jugar de mediocentro- vivi¨® de ese par de zarpazos y el Valladolid no tuvo m¨¢s remedio que espabilar. El equipo de Pep Mor¨¦ no hab¨ªa hecho demasiado y empez¨® a merodear a Bonano con un cabezazo de Riquete y un remate de Luis Garc¨ªa. Eso no fue nada comparado con lo que vendr¨ªa tras el descanso. Eusebio, que recibi¨® su puntual y cari?osa ovaci¨®n en el Camp Nou por su pasado azulgrana, salt¨® al c¨¦sped y dirigi¨® a su equipo con convicci¨®n. Fernando Sales, por la izquierda, hizo lo que quiso con Coco y encaden¨® un sinf¨ªn de ocasiones de gol. Pero all¨ª se top¨® con Bonano, que aguanta como nadie los uno contra uno y lo par¨® todo. Por dos veces Fernando Sales se plant¨® ante ¨¦l y las dos veces el portero le fren¨®. Tampoco fall¨® ante Tena.
El Valladolid le acab¨® robando el bal¨®n al Bar?a, que acab¨® agotado (Gabri, De Boer y Kluivert hab¨ªan jugado el s¨¢bado con sus respectivas selecciones), y pudo meterse en el partido. Pero le falt¨® acierto en lo m¨¢s importante: fall¨® ante el gol y sobre todo ante Bonano. Justo entonces, los azulgrana acabaron sentenciando: Overmars se fue otra vez por su banda para que Saviola encarara a Ricardo. No pudo rematar porque Jes¨²s le derrib¨® en el ¨¢rea y Kluivert marc¨® el penalti. El gol fue una bendici¨®n del cielo para el Bar?a, que recibi¨® un impagable bal¨®n de ox¨ªgeno que acab¨® con cualquier ilusi¨®n del Valladolid. Bonano, adem¨¢s, volvi¨® a lucirse con un despeje de un chut de Eusebio. Saviola cerr¨® despu¨¦s su extraordinaria noche con un segundo gol a pase de Rochemback (le hab¨ªan anulado otro poco antes). Parec¨ªa que estaba escrito: el Bar?a puso los goles y el Valladolid el f¨²btol. Ni siquiera pudo lograr el gol del honor: el ¨¢rbitro se?al¨® en el ¨²ltimo minuto un penalti de Puyol a ?scar y Tote meti¨® un trallazo que se estrell¨® en la base del poste.
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