Schr?der ofrece ayuda humanitaria para lograr el apoyo al env¨ªo de tropas

En un intento de aplacar los ¨¢nimos de Los Verdes, entre cuyas filas existe un fuerte escepticismo sobre el uso de medios militares para combatir al terrorismo, el Gobierno del canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, aprob¨® ayer una partida de 256 millones de marcos (21.800 millones de pesetas) en ayuda humanitaria para Afganist¨¢n y matiz¨® su propuesta de aportar un m¨¢ximo de 3.900 soldados a la Operaci¨®n Libertad Duradera.

El proyecto gubernamental ser¨¢ votado el viernes junto a una moci¨®n de confianza solicitada por el mismo Schr?der, decidido a jugarse de esta manera el futuro de la coalici¨®n gubernamental. El anuncio de las ayudas fue efectuado ayer por el ministro verde de Exteriores, Joschka Fischer, y la ministra de Ayuda al Desarrollo, la socialdem¨®crata Heidemarie Wieczorek-Zeul. En una argumentaci¨®n evidentemente dirigida a los ocho parlamentarios ecologistas contrarios al env¨ªo de soldados alemanes, Fischer subray¨® que s¨®lo el avance militar de la Alianza del Norte permitir¨¢ ahora atender a los millones de necesitados en Afganist¨¢n.

Fischer, un l¨ªder casi imprescindible para Los Verdes y el pol¨ªtico m¨¢s popular del pa¨ªs, se neg¨® a 'especular' sobre el resultado de la moci¨®n de confianza el viernes, pero destac¨® que la 'gran fluidez' de la situaci¨®n en Afganist¨¢n podr¨ªa influir en el debate alem¨¢n, que, en el fondo, gira sobre un env¨ªo de tropas que quiz¨¢ ya no sea necesario dentro de unas semanas.

En otro intento de vencer las resistencias internas, el Consejo de Ministros se comprometi¨® ayer a mantener siempre al tanto al Parlamento sobre las actividades de las fuerzas alemanas y presentar en un plazo de seis meses un extenso informe sobre sus operaciones militares, que tan s¨®lo ser¨ªan autorizadas durante un a?o.

Asimismo, se especifica que los soldados alemanes s¨®lo actuar¨¢n en contra de la organizaci¨®n Al Qaeda y no se embarcar¨¢n en aventuras militares en otros pa¨ªses. Todas estas precisiones hab¨ªan sido solicitadas por la direcci¨®n de Los Verdes y contaban tambi¨¦n con el apoyo de la izquierda del Partido Socialdem¨®crata (SPD), entre cuyas filas tambi¨¦n hay muchos que se resisten al nuevo protagonismo militar alem¨¢n.

El desenlace de la votaci¨®n del viernes, sin embargo, dista mucho de ser claro. Cuatro de los ocho parlamentarios verdes contrarios al env¨ªo de tropas reiteraron ayer su rechazo pese a que ello podr¨ªa suponer la ruptura de la coalici¨®n rojiverde. Esta misma actitud se extiende por amplia parte de las bases ecologistas, que dentro de dos semanas solicitar¨¢n que sus dirigentes les rindan cuentas en el congreso nacional de Los Verdes.

De asistir todos los parlamentarios a la sesi¨®n del viernes, el Gobierno s¨®lo podr¨¢ recibir siete votos en contra desde sus propias filas. En caso de que se pierda la votaci¨®n, probablemente se convocar¨¢n nuevas elecciones. Ello pondr¨ªa en serios aprietos a la Uni¨®n Cristiana Democr¨¢tica (CDU), que ayer -en contra de lo que evidencian sus continuas rencillas internas- asegur¨® que en cuesti¨®n de 24 horas podr¨ªa nombrar su candidato a la canciller¨ªa.