Bush ofrece una recompensa de 280 millones a quien ayude a resolver los ataques con ¨¢ntrax

Las investigaciones sobre los atentados del 11 de septiembre y el correo con ¨¢ntrax (carbunco) progresan lentamente. Una segunda carta dirigida a otro senador aportar¨¢ datos nuevos al misterio. Pero, por si acaso, la Administraci¨®n estadounidense ofreci¨® una recompensa de 1,5 millones de d¨®lares (283,5 millones de pesetas) a quien aporte informaci¨®n que conduzca hasta los autores de los env¨ªos. El director del FBI, Robert Mueller, anunci¨® adem¨¢s que se ha identificado al vig¨¦simo piloto suicida. Pero no se sabe d¨®nde est¨¢n ni ¨¦l ni los otros c¨®mplices que 'casi con toda seguridad' siguen en EE UU.

La ¨²ltima carta enviada a un senador denota una intencionalidad pol¨ªtica que hasta ahora no estaba clara: los dos pol¨ªticos pertenecen al ala m¨¢s liberal del partido dem¨®crata. El senador Patrick Leahy quiso restarle ayer importancia a ese hecho. ?Cree usted que le han elegido como blanco por su sello pol¨ªtico?, le pregunt¨® una periodista. 'No quiero especular, eso se lo dejo al FBI. A m¨ª lo que me preocupa es la gente inocente que ha muerto y que parece que estamos buscando una aguja en un pajar. Pero la encontraremos'.

La carta dirigida a Leahy estaba fechada el mismo d¨ªa que la que recibi¨® el presidente del Senado, Tom Daschle, el pasado 9 de octubre en Trenton, Nueva Jersey. A diferencia de ¨¦sta, la segunda carta nunca se ha llegado a abrir. El FBI la encontr¨® inspeccionando miles de piezas de correo almacenadas 'en cuarentena' fuera del Senado.

Pero las se?as son inequ¨ªvocas. La misma caligraf¨ªa, el mismo lenguaje y el mismo remite. El autor, seg¨²n el especialista del FBI James Fitzgerald, es probablemente un hombre maduro, que puede ser estadounidense o llevar tiempo viviendo en EE UU. Es resentido, vive recluido de la sociedad y posiblemente ha tomado antibi¨®ticos para protegerse. Ha tenido que ver mucha televisi¨®n y leer muchos peri¨®dicos para estar al tanto de la investigaci¨®n y poder huir si se viera cercado. Ha podido cambiar de apariencia, estar ansioso y casi con toda seguridad no se ha mostrado en p¨²blico traumatizado por los atentados. Y ha intentado despistar a la polic¨ªa con frases como 'Al¨¢ es grande' o 'Muerte a Israel, muerte a Am¨¦rica'.

El perfil psicol¨®gico coincide con el de otro conocido 'terrorista casero' que mandaba cartas-bomba: Theodore Kaczynski, Unabomber, a quien el FBI tard¨® 18 a?os en arrestar. En el caso del ¨¢ntrax, que se ha cobrado cuatro vidas, el refinamiento de la bacteria en las cartas enviadas al Senado y a los medios de comunicaci¨®n indica que se puede fabricar en un laboratorio barato, de unos 2.500 d¨®lares (unas 450.000 pesetas), lo cual dificulta la b¨²squeda del culpable.

B¨²squeda complicada

La b¨²squeda de c¨®mplices de los atentados del 11 de septiembre o de otros 'terroristas dormidos' en EE UU es mucho m¨¢s compliacada, admit¨ªa ayer el director del FBI. 'Sabemos que hay personas asociadas, afiliadas, que dan apoyo a grupos terroristas, no s¨®lo a Al Qaeda, y estamos haciendo lo posible por encontrarlas', dijo.

La red de arrestos a musulmanes -unos 1.200 hasta ahora- no ha producido resultados concretos. A ninguno de los sospechosos se le ha podido vincular con los atentados de Nueva York y Washington y muy pocos est¨¢n colaborando. Mueller confirm¨® que el yemen¨ª fugitivo Ramsi Benalsblish habr¨ªa sido el vig¨¦simo piloto, de haber obtenido un visado para viajar de Alemania a EE UU. El l¨ªder de la operaci¨®n terrorista suicida, Mohamed Atta, trat¨® de consegu¨ªrselo varias veces sin ¨¦xito.

Atta y Benalsblish hab¨ªan compartido con otros cuatro militantes isl¨¢micos un apartamento en Hamburgo desde el que tramaron la conspiraci¨®n terrorista. Dos se suicidaron en los atentados y los otros dos siguen fugitivos. ?D¨®nde? El FBI dice tener s¨®lo una vaga idea de que escaparon de Alemania a principios de septiembre rumbo a alg¨²n pa¨ªs musulm¨¢n.