Imaz nombr¨® asesora a una viceconsejera para que siguiese cobrando mientras era candidata
Bel¨¦n Greaves conserv¨® el mismo sueldo que ten¨ªa y luego recuper¨® su antiguo cargo
La viceconsejera de Comercio y Consumo, Bel¨¦n Greaves, dimiti¨® de su cargo el pasado mes de abril para cubrir la formalidad legal que le imped¨ªa ser candidata en las elecciones de mayo, pero sigui¨® cobrando del Departamento de Industria como asesora del consejero, Josu Jon Imaz, mientras se desarrollaban la precampa?a y la campa?a electorales y hasta dos semanas despu¨¦s de los comicios. Greaves volvi¨® a su antiguo puesto una vez constituido el Gobierno. Fuentes de Industria justificaron este tr¨¢nsito y se limitaron a se?alar que el departamento no incumpli¨® la ley.
El caso de Bel¨¦n Greaves viene a a?adirse a la pol¨¦mica levantada hace dos meses por la revelaci¨®n por el PSE de que el ex consejero de Educaci¨®n, Inaxio Oliveri, fue nombrado, el mismo d¨ªa que dejaba ese puesto, asesor de Gabriel Incl¨¢n, responsable de Sanidad y ex compa?ero suyo en el primer gabinete de Juan Jos¨¦ Ibarretxe.
La metodolog¨ªa en este caso fue la misma: para garantizar la percepci¨®n de su salario, el mismo d¨ªa en que Greaves cesaba como viceconsejera de Comercio fue nombrada asesora para temas de comercio y turismo del titular del departamento, Josu Jon Imaz. El consejero firm¨® la orden de nombramiento el 7 de mayo con efectos retroactivos desde el 2 de abril, cuando Greaves dej¨® la viceconsejer¨ªa para integrarse en la candidatura del PNV por Vizcaya.
Fuentes del Departamento de Industria consultadas ayer se?alaron que la dimisi¨®n se realiz¨® para cumplir las exigencias de la ley electoral, que convierte en inelegibles a todos los altos cargos del Ejecutivo por debajo del de consejero. Dichas fuentes reconocieron que el nombramiento como asesora se realiz¨® 'para que [Greaves] pudiera seguir trabajando y cobrando' y encontraron perfectamente natural este tr¨¢nsito. 'Se cumpli¨® la ley y nadie puede ser m¨¢s estricto que ¨¦sta', se?alaron estas fuentes. Este peri¨®dico no logr¨® hablar personalmente con la interesada.
Greaves nunca fue sustituida en su cargo de viceconsejera, que ella misma volvi¨® a ocupar el 27 de septiembre, tras dimitir como diputada en la C¨¢mara. El mismo portavoz del Departamento de Industria consultado por este peri¨®dico afirm¨® que no se la sustituy¨® en la viceconsejer¨ªa porque 'no val¨ªa la pena colocar para dos meses en ese puesto a alguien que no sab¨ªa nada de ¨¦l', lo que parece indicar que, pese a ser aspirante a diputada, Industria ya contaba con su vuelta de seguir gobernando el PNV.
El rango que se otorg¨® a Greaves como asesora fue el mismo que ten¨ªa: el de viceconsejera. Tambi¨¦n se le reconoci¨® el derecho a la percepci¨®n de cesant¨ªa al t¨¦rmino del desempe?o de su funci¨®n y conserv¨® su sueldo, cifrado en 10,7 millones de pesetas brutas anuales. De acuerdo con ¨¦l se le retribuy¨® en los casi dos meses de precampa?a y campa?a electoral que mediaron entre el 2 de abril y la fecha de su nuevo cese, el 28 de mayo, dos semanas despu¨¦s de celebrados los comicios. Del centener de cargos de confianza nombrados esta legislatura, s¨®lo nueve tienen esta categor¨ªa.
Bel¨¦n Greaves constituye, junto con Oliveri, un raro ejemplo de un miembro de un Gobierno que ha permanecido en el siguiente en un rango inferior al que ten¨ªa. Greaves fue consejera de Comercio y Turismo en sustituci¨®n de la socialista Rosa D¨ªez, cuando el PSE abandon¨® la coalici¨®n con el PNV, en el mes de junio de 1998. En el siguiente gabinete, Greaves reapareci¨® como viceconsejera, a las ¨®rdenes de Josu Jon Imaz.
El caso de Inaxio Oliveri, quien permaneci¨® como asesor de Incl¨¢n durante un periodo de tiempo similar al de Greaves durante el verano pasado, fue revelado por el PSE durante un pleno parlamentario. A ra¨ªz de ¨¦l, el PP present¨® una pregunta parlamentaria al consejero de Sanidad, autor del nombramiento, que finalmente fue retirada al recibir el portavoz del grupo popular, Leopoldo Barreda, una llamada del propio ex consejero, en la que ¨¦ste se explic¨® en privado.
Tanto populares como socialistas dijeron no querer hacer sangre del caso de Oliveri, pero los segundos presentaron una iniciativa para cambiar la ley de incompatibilidades. ?sta persigue endurecer las condiciones del acceso a los cargos p¨²blicos y controlar la actividad de sus titulares cuando se reincorporan a la actividad privada. El grupo parlamentario del PSE pidi¨® adem¨¢s al Gobierno informaci¨®n documentada sobre la contrataci¨®n de personal eventual y de confianza durante los dos mandatos de Ibarretxe.
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