El s¨ªndrome de la seca pone en peligro 92.000 hect¨¢reas de encinar andaluz
Un estudio alerta de los efectos de este mal
En los pr¨®ximos 10 a?os Andaluc¨ªa puede perder entre el 10% y el 20% de sus encinares, lo que significar¨ªa la desaparici¨®n de al menos 92.000 hect¨¢reas de dehesa. As¨ª lo advierten Rafael Navarro y Pilar Fern¨¢ndez, investigadores del Departamento de Ingenier¨ªa Forestal de la Universidad de C¨®rdoba, en un estudio publicado por la Fundaci¨®n Ricardo Delgado Vizca¨ªno. Y la raz¨®n es el llamado s¨ªndrome de la seca, un mal que debilita progresivamente a los ¨¢rboles del g¨¦nero Quercus, como las encinas y los alcornoques, los sensibiliza a todo tipo de infecciones y ataques y termina por matarlos.
Seg¨²n explic¨® Rafael Navarro, la seca es un problema complejo en el que intervienen varios agentes. El primer factor es ambiental y se relaciona directamente con la sequ¨ªa. 'Entre 1990 y 1995 hubo zonas de Andaluc¨ªa que recibieron la d¨¦cima parte de las precipitaciones normales', se?al¨® el investigador. 'Los a?os extremadamente secos alternan con otros muy h¨²medos y c¨¢lidos, y esa irregularidad clim¨¢tica favorece el decaimiento de encinas y alcornoques'.
Otros agentes decisivos para la seca son los bi¨®ticos, es decir, los derivados de la acci¨®n de seres vivos como hongos, bacterias o insectos. En Andaluc¨ªa, aclar¨® Navarro, los cuatro m¨¢s virulentos son tres hongos y un insecto. El primero de los hongos, Phytophthora, pudre las ra¨ªces; el segundo, Diplodia, ataca a las ramas y a las hojas; el tercero, Hipoxilon, da?a sobre todo el tronco y las ramas. El insecto, Cerambyx, es particularmente agresivo, porque en sus fases larvarias se alimenta de madera y excava galer¨ªas en el tronco hasta acabar con el ¨¢rbol.
El factor humano
El factor humano tambi¨¦n pesa. 'El encinar y el alcornocal han estado sometidos a intensos aprovechamientos desde hace siglos', indic¨® el investigador. La carga ganadera excesiva, la extracci¨®n de le?a, las podas o el laboreo del suelo 'causan un estr¨¦s indirecto que debilita a los ¨¢rboles', justific¨® Navarro.
Todo esto hace que de las 928.000 hect¨¢reas pobladas por encinas y alcornoques en Andaluc¨ªa, que se reparten por las sierras de Huelva, Sevilla, C¨®rdoba y M¨¢laga, el 20% est¨¦ afectado por la seca en diversos grados de da?o. La muerte por este s¨ªndrome trae consigo graves p¨¦rdidas ecol¨®gicas y econ¨®micas; como recuerda el investigador, 'el cerdo ib¨¦rico es un recurso clave para muchas comarcas andaluzas, y depende exclusivamente de la dehesa. Si se reduce la superficie de encinar, no se puede alimentar la misma cantidad de ganado'.
El estudio de los profesores Navarro y Fern¨¢ndez defiende la necesidad de actuar contra la seca. 'Lo primero es fraccionar el problema, porque se tiende a hablar de seca gen¨¦ricamente ante situaciones distintas', declar¨® Navarro. Por ejemplo, los encinares de C¨®rdoba sufren sobre todo la acci¨®n del insecto Cerambyx; en Huelva el agente m¨¢s da?ino es el hongo Phytophthora; y en las provincias m¨¢s orientales predominan los factores clim¨¢ticos sobre los bi¨®ticos, y la sequ¨ªa es el agente principal. 'Hay que estudiar cada caso, hacer diagn¨®sticos concretos y dar soluciones espec¨ªficas', dijo el investigador.
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