Pressplay y MusicNet abren la batalla de la m¨²sica de pago descargada de Internet
Los dos servicios de suscripci¨®n estar¨¢n operativos en enero e intentan ser la respuesta comercial de las grandes discogr¨¢ficas al fen¨®meno del intercambio gratuito de archivos musicales. No permiten la copia en port¨¢tiles MP3
La batalla comercial por la m¨²sica de pago en Internet ha empezado de lleno. Al anuncio del lanzamiento en enero de MusicNet (AOL, Bertlesmann, EMI y RealNetworks) se sum¨® el mi¨¦rcoles pasado Pressplay, un servicio que cuenta con el apoyo de Vivendi Universal y Sony. La otra gran discogr¨¢fica, EMI, tambi¨¦n ha ofrecido su cat¨¢logo a Pressplay.
Pressplay ofrece 14 d¨ªas de prueba en los que podr¨¢n o¨ªrse en red 200 temas y descargar 20. Dentro de 15 d¨ªas, Presspaly cobrar¨¢ una suscripci¨®n mensual cuyo precio var¨ªa seg¨²n el servicio que demande el internauta.
La oferta Basic costar¨¢ 9,95 d¨®lares mensuales ( 1.840 pesetas) y permitir¨¢ 300 audiciones en red (streaming) y la descarga de 30 archivos musicales cada mes. Esta suscripci¨®n, la m¨¢s barata, no permitir¨¢ grabar en el ordenador ninguna canci¨®n. La oferta Silver (14,95 d¨®lares) admitir¨¢ la audici¨®n mensual de 500 temas, 50 descargas y la grabaci¨®n de 10 archivos. La suscripci¨®n Gold (19,95 d¨®lares) ofrecer¨¢ 750 audiciones, 75 descargas y 15 grabaciones y la Platinum, la m¨¢s cara (24,95 d¨®lares), permitir¨¢ 1.000 audiciones mensuales, 100 descargas y 20 grabaciones.
El sitio recomienda una conexi¨®n de 128 kbps, lo que excluye a quien no tenga banda ancha. El sistema no trabaja con MP3 ni permite el traspaso de los temas grabados a port¨¢tiles con este lector. Pressplay exige Windows Media Player, un sistema operativo Windows a partir del 98, y no funciona en Mac.
Pressplay permitir¨¢ escuchar un tema durante 30 segundos antes de decidir si se prosigue la escucha o se descarga, y pagar por ello. El servicio admite sacar una copia del archivo descargado para un segundo ordenador. Si un suscriptor se da de baja de Pressplay, los archivos descargados quedan inaudibles aunque puede recuperarlos si antes de seis meses renueva su suscripci¨®n. Pressplay no permitir¨¢ la grabaci¨®n de discos enteros. S¨®lo podr¨¢n grabarse en el ordenador dos temas de un mismo artista en un mes.
MusicNet, a la hora de cerrar esta edici¨®n, no daba tantos detalles sobre su oferta a trav¨¦s de RealNetworks, que anuncia un precio de suscripci¨®n de 9,95 d¨®lares para 100 audiciones y 100 descargas al mes, s¨®lo accesibles desde Estados Unidos. En este caso no se podr¨¢n grabar los temas en un CD. Estos dos servicios son un intento de las grandes discogr¨¢ficas para controlar el comercio musical en red y desviar el consumo de m¨²sica en Internet de las plataformas gratuitas de intercambio que son perseguidas judicialmente por las discogr¨¢ficas al considerar que se trata de pirater¨ªa.
MusicNet, en principio, no permite grabar los temas descargados en un CD y Pressplay, que s¨ª lo admite en tres de sus cuatro f¨®rmulas de suscripci¨®n, tambi¨¦n impide que los archivos descargados puedan escucharse en un reproductor port¨¢til de MP3. Estos reproductores han tenido un gran ¨¦xito a remolque de la existencia en Internet de servicios como Napster o Gnutella, que permit¨ªan descargar m¨²sica del ordenador de otro internauta sin pagar.
Actualmente, incluso algunos modelos de lectores de DVD admiten la audici¨®n de archivos MP3.
El fen¨®meno Napster
Las discogr¨¢ficas consiguieron bloquear judicialmente Napster, que finalmente entr¨® en la ¨®rbita de Bertelsmann para incorporarse a su oferta de pago. En los tribunales, hay otros casos abiertos contra otros servicios similares que, sin embargo, presentan una dificultad para su persecuci¨®n: mientras Napster centralizaba en la base de datos de su servicio el millonario listado de temas descargables, otros servicos peer to peer (entre amigos) no ofrecen la lista sino que buscan el tema solicitado entre los ordenadores conectados.
Todos estos servicios han argumentado que no se trata de pirater¨ªa porque no media el cobro, es un intercambio entre amigos de canciones como lo hab¨ªa con las cintas. Algunos grupos como Metallica los combatieron duramente por considerar que perjudicaban sus derechos de autor.
La gran diferencia entre MusicNet y Pressplay es que ¨¦ste es un servicio desde Internet bajo la misma marca aunque sea accesible desde otros portales como Yahoo! o MSN, que apoyan su lanzamiento. MusicNet, por el contrario, se presenta como un software que puede ser explotado por otras compa?¨ªas bajo su propia marca. Mientras que el primero tiene un listado de precios cerrado, MusicNet permite a sus afiliados definir su propia pol¨ªtica de precios.
Viejos enemigos
La tecnolog¨ªa de Pressplay, adem¨¢s de Windows Media, es suministrada por MP3.com, el servicio de m¨²sica en red que Vivendi adquiri¨® a principios de a?o por 350 millones de d¨®lares.
Se da la circunstancia de que Universal, que participa en Pressplay, present¨® una demanda judicial contra MP3.com por uno de sus servicios de descarga de m¨²sica, que consideraba pirata. MP3.com fren¨® el proceso con un acuerdo que supuso el pago de 53,4 millones de d¨®lares a Universal.
La duda sobre este par de grandes operaciones discogr¨¢ficas es si conseguir¨¢n evitar que se mantenga el intercambio gratuito de m¨²sica en Internet, que tiene un notable arraigo entre los internautas.
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