Cerca de 40 fallecidos por 'muerte dulce' en ocho a?os
La inhalaci¨®n de mon¨®xido de carbono -incoloro e inodoro- ocasiona lo que los forenses denominan muerte dulce: produce el fallecimiento de la v¨ªctima de forma fulminante y sin sufrimiento. La v¨ªctima siente una especie de sopor hasta que pierde la consciencia. La intoxicaci¨®n produce la par¨¢lisis de las piernas, a la vez que un aturdimiento instant¨¢neo que impide cualquier reacci¨®n.
Supuestamente, la muerte dulce dej¨® ayer sin vida a cinco j¨®venes en Legan¨¦s. Si la autopsia lo confirma, estas v¨ªctimas se unir¨ªan a la larga lista de fallecimientos en los ¨²ltimos a?os por esta causa en la regi¨®n. Desde 1994, cerca de 40 personas han fallecido de muerte dulce en la regi¨®n.
El a?o acaba como empez¨®, porque el 7 de enero dos miembros de un matrimonio, de 67 y 70 a?os, fallecieron en Alcorc¨®n por una mala combusti¨®n de la caldera de gas natural. No han sido los ¨²nicos en morir as¨ª este a?o. Hace tan s¨®lo cuatro d¨ªas, un hombre muri¨® en el interior de una caseta de obra de M¨®stoles al intoxicarse con el mon¨®xido procedente de una estufa.
Adem¨¢s, David A. B., de 30 a?os, encontr¨® la muerte en abril del a?o pasado en su chal¨¦ de Soto del Real tras inhalar mon¨®xido de carbono. Su novia, que tambi¨¦n result¨® intoxicada, qued¨® en coma. En otro suceso, el calentador de un modesto piso de San Blas se carg¨® de mon¨®xido de carbono el 18 de noviembre del a?o 2000 y envenen¨® a una familia entera. La madre, Mar¨ªa del Mar Jos¨¦ Ruano, fue hallada semidesnuda en la ba?era; su esposo, Juan Carlos Herrero, ca¨ªdo en el suelo del aseo; ?scar, el hijo mayor, de tres a?os, en la cama del matrimonio, y ?lex y ?lvaro, los dos mellizos, de dos a?os, en las camas de su peque?a habitaci¨®n.
Caldera de gas
El mismo a?o, el d¨ªa de Navidad, dos primas de nacionalidad ecuatoriana perecieron en su vivienda de Galapagar por la emanaci¨®n de mon¨®xido de carbono que emanaba de una caldera de propano que quemaba mal. Una t¨ªa de las j¨®venes fue a visitarlas la noche del siniestro, pero decidi¨® marcharse porque empez¨® a sentir mucho sue?o. Probablemente, los efectos del gas empezaban ya a sentirse en la casa y su decisi¨®n de abandonarla le salv¨® la vida. El due?o del inmueble, vecino del municipio, hall¨® los cad¨¢veres de las mujeres y de sus tres perros al regresar a las cuatro de la ma?ana a su domicilio.
El 5 de mayo de 1999, un matrimonio septuagenario que viv¨ªa en un chal¨¦ de Mejorada del Campo perdi¨® la vida por la defectuosa combusti¨®n de una estufa.
En la madrugada de enero de 1996, el mon¨®xido de carbono llev¨® a la tumba a un padre y a dos de sus hijos en la vivienda que pose¨ªa esta familia en San Fernando. Tres agentes de Gas Natural fueron condenados a pagar 92 millones de pesetas por su responsabilidad en el accidente.
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