C¨¦lulas embrionarias

No es la primera vez que un cient¨ªfico debe salir de Espa?a con el prop¨®sito de culminar una labor, pero que el doctor Bernat Soria vea truncada en su propio pa¨ªs su l¨ªnea de investigaci¨®n sobre el uso de las c¨¦lulas madre embrionarias para tratar la diabetes tipo I por causas ajenas a las realidades tecnol¨®gicas o de financiaci¨®n, sino por razones de ¨¦tica confesional en un Estado de derecho cuya Carta Magna declara la aconfesionalidad del mismo, supone un preocupante caso de contradicci¨®n constitucional y de ineficacia legislativa para adaptar las leyes a la realidad desde una perspectiva laica.

Consideramos injusto que las creencias de algunos puedan condicionar el proceso de curaci¨®n de nuestros hijos y de otros cientos de miles de diab¨¦ticos, obligados desde sus primeros a?os de vida a estrictos controles de los hidratos de carbono de su alimentaci¨®n, horarios rigurosos, a numerosos pinchazos diarios para medir su glucosa y tambi¨¦n pinchazos continuos para inyectarse la correspondiente insulina, episodios m¨¢s o menos frecuentes de mareos con p¨¦rdida de la consciencia y a comas diab¨¦ticos sin que este sufrimiento no evite completamente consecuencias para la vista, el ri?¨®n, etc¨¦tera.Esta situaci¨®n no s¨®lo nos afecta como madres, por la incomprensi¨®n e inoperancia con que act¨²an al respecto las autoridades pertinentes, sino que tambi¨¦n nos provocan la gran inquietud de sentir otra muestra de los integrismos que acechan y se resisten a aceptar una visi¨®n positiva de la dimensi¨®n del hombre y del progreso.