Los abonados se perdieron un gol

La desorganizaci¨®n en el reparto de entradas gratuitas a los abonados provoc¨® ayer que decenas de ellos no pudieron entrar al campo hasta media hora despu¨¦s de haberse iniciado el partido. El Bernab¨¦u present¨® una gran entrada, de 42.600 espectadores atra¨ªdos por el gran momento que vive el Madrid, que contra el Rayo anunci¨® que presentar¨ªa su alineaci¨®n estelar. Pero muchos abonados, con derecho a entrada gratis en la Copa, se tuvieron que perder el gol de Roberto Carlos, en el minuto 33, por la falta de organizaci¨®n del club en el reparto, la escasa informaci¨®n que brind¨®, y las pocas taquillas disponibles.

Miles de aficionados se agolpaban en las puertas del estadio cuando el ¨¢rbitro pit¨® el comienzo de partido. Los abonados se dirigieron directamente a los tornos, carn¨¦ en mano, pero al exhibirlo se les inform¨® que deb¨ªan pasar por las taquillas para recoger su entrada. 'Los tornos funcionan con l¨¢ser y necesitan leer un c¨®digo', explicaron los empleados del club. Eso no lo sab¨ªan los abonados, que debieron hacer colas de hasta cuarenta minutos para recibir su entrada. En las colas se agolparon tambi¨¦n los aficionados sin abono, que pagaron entre 6 y 30 euros (1.000 y 5.000 pesetas) por ver el encuentro.

En el interior del campo, el Madrid tard¨® en imponerse al Rayo y el p¨²blico la emprendi¨® con su chivo expiatorio preferido: Guti. El delantero madridista fall¨® un gol a bocajarro tras una gran jugada de Zidane y Roberto Carlos. Luego le hicieron penalti, o eso pareci¨®, y le anularon un gol porque el juez de l¨ªnea entendi¨® que el bal¨®n no hab¨ªa traspasado la raya. En la segunda parte, tras fallar un cabezazo a centro de Figo y un disparo, tambi¨¦n tras un centro del portugu¨¦s, el p¨²blico fue lapidario. '?Morientes, Morientes...!', cantaron.