Bajarse al moro

Hubo una ¨¦poca en que hizo furor en determinados ambientes la expresi¨®n 'bajarse al moro'. Frase hecha que se utilizaba como eufemismo para referirse a un viaje (no precisamente de trabajo, las m¨¢s de las veces) a latitudes m¨¢s septentrionales que las peninsulares, con el ¨¢nimo de retornar portando mercanc¨ªas cuya adquisici¨®n en Espa?a (al menos en la Espa?a peninsular) era dif¨ªcil o incluso imposible, por inmoral o ilegal.

Se trataba, sencillamente, de buscar fuera de nuestras fronteras lo que dentro de Espa?a no se pod¨ªa obtener. Incluso se rod¨® una pel¨ªcula con ese t¨ªtulo (y con ese contenido), en la que, por cierto, el hoy estrella hollywoodiense Antonio Banderas casi debutaba, acompa?ando a Aitana S¨¢nchez Gij¨®n.

Y eso es, ni m¨¢s ni menos, lo que pretende Chaves al anunciar que piensa realizar un viaje a Marruecos 'hace tiempo programado': quiere obtener un supuesto r¨¦dito pol¨ªtico (el descr¨¦dito que creen poder causar en el Gobierno Aznar) desarrollando una actividad pol¨ªtica mas all¨¢ de nuestras fronteras, en vista de que por m¨¢s que gasten esfuerzos en la pol¨ªtica interna, no consiguen ara?ar votos (ni siquiera intenci¨®n de voto), entre los actuales votantes populares. No es dato que me invente, sino extra¨ªdo de las sucesivas encuestas de intenci¨®n de voto, sondeos diversos y bar¨®metros sociol¨®gicos: todos anuncian lo mismo, apostando por una continuidad en el ejercicio del Gobierno por un partido (el PP) que ha puesto en pr¨¢ctica pol¨ªticas sociales y econ¨®micas que han tra¨ªdo, al menos por ahora, la tranquilidad (social y econ¨®mica) a los espa?oles.

Dicho de otro modo, que lo que no puede obtener el PSOE en el ejercicio de la labor pol¨ªtica y parlamentaria de oposici¨®n dentro de las fronteras espa?olas (por ineptitud de los unos, pero tambi¨¦n por aciertos de los otros), tanto en la direcci¨®n nacional como en la organizaci¨®n auton¨®mica del PSOE-A, lo pretende obtener fuera de Espa?a, por cierto en la tierra natal del propio Chaves.

Ahora bien, si el objetivo de los partidos de oposici¨®n debe ser, prioritariamente, la articulaci¨®n de una alternativa pol¨ªtica aplicable, seria y cre¨ªble frente a la del actual partido gobernante, mal camino llevan los sesudos dirigentes socialistas si todo lo que se les ocurre es bajarse al moro. No han conseguido poner de acuerdo a los barones regionales socialistas sobre el modelo de Estado que quieren (dejando aparte majader¨ªas como la del 'federalismo asim¨¦trico'), o sobre el Sistema de Financiaci¨®n Auton¨®mica, o sobre tantos asuntos importantes de verdad, ni tampoco parece que eso les importe mucho, porque han encontrado su forma de hacer oposici¨®n: bajarse al moro. Votos no se consiguen muchos, pero...

En vista del ¨¦xito que obtuvo Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero con su viaje a Marruecos (no fue capaz ni de defender la libertad de expresi¨®n, que no parece ser una de las m¨¢s extendidas en el pa¨ªs vecino), Chaves vuelve a las andadas. Si el viaje de Zapatero fue un ¨¦xito, y as¨ª lo vendi¨® la prensa af¨ªn: porque poco menos que sirvi¨® para resolver la crisis diplom¨¢tica, ?c¨®mo es que Chaves viaja para acercar las posturas de ambos Gobiernos? ?No estaban ya acercadas? Luego, si Chaves tiene que acercar las posturas de ambos Gobiernos, es que el viaje de Zapatero fue un fracaso. Quien lo entienda que nos lo explique.

Ahora, para rid¨ªculo, el del ¨ªnclito Gaspar Zarr¨ªas, que lleva dos d¨ªas insistiendo en que el viaje estaba 'hace tiempo programado', cuando la realidad debe ser bien distinta, habida cuenta de la 'sorpresa' que ha causado el anuncio del viaje en Marruecos, seg¨²n publica el diario oficialista Le Mat¨ªn. Y es que los marroqu¨ªes no dan cr¨¦dito a lo que pasa en Andaluc¨ªa: quien contribuy¨® decisivamente a la crisis diplom¨¢tica con Marruecos, al organizar un pseudorefer¨¦ndum 'sobre la independencia del Sahara' (octubre, sede del Parlamento de Andaluc¨ªa), es el mismo que ahora se brinda como mediador para acercar posturas y resolver el conflicto. El mismo que incendia el bosque pretende aparecer como bombero para apagarlo. O sea, el bombero pir¨®mano.

?se es el problema de dejarse aconsejar por mentes obtusas (m¨¢s pendientes de hacer da?o al adversario pol¨ªtico que de atender a las razones de Estado que deben presidir cualquier acci¨®n de gobierno): que no les deja ver el da?o que se causa a terceros. En este caso, el anuncio de un viaje a Marruecos ha levantado grandes ampollas y ha causado un da?o probablemente irreparable entre la comunidad saharaui afincada en Andaluc¨ªa, que recrimina a Chaves (y con raz¨®n) que primero apoye sus reivindicaciones (incluso con la parida del pseudorefer¨¦ndum que tanto molest¨® en Marruecos), para despu¨¦s arrojarse en brazos del mortal enemigo de los saharauis, el Gobierno de Rabat. ?O es que Chaves piensa ir a Marruecos a defender al Frente Polisario y sus reivindicaciones?

Y, mientras tanto, los pescadores de Barbate (y de toda Andaluc¨ªa) siguen esperando que desde su Gobierno auton¨®mico se le d¨¦ una soluci¨®n a los graves problemas de subsistencia que atraviesan. ?Qu¨¦ pa¨ªs!