Colapso bancario

Mientras la econom¨ªa argentina se aproxima al colapso total, comienza a apreciarse la delicada situaci¨®n de las empresas espa?olas en aquel pa¨ªs. Una de las primeras y m¨¢s intensas manifestaciones del desplome econ¨®mico es la crisis en la que est¨¢n atrapados los bancos que operan en Argentina. El BBVA, presente en el Banco Franc¨¦s, y el SCH, a trav¨¦s del Banco R¨ªo, tendr¨¢n que hacer frente a cuantiosas provisiones, evaluadas en unos 3.000 millones de euros, para hacer frente a los quebrantos producidos por el desbarajuste argentino. Pocos precedentes existen en el mundo de una crisis financiera tan profunda y con tan pocas expectativas de soluci¨®n en los pr¨®ximos meses; hasta el punto de que bien puede decirse que las cuentas de resultados del BBVA y SCH quedar¨¢n dram¨¢ticamente afectadas en el ejercicio 2002 por la onda expansiva del llamado corralito bancario, inventado en mala hora por el ex superministro Cavallo.

La persistencia de las autoridades argentinas en el control de los dep¨®sitos no s¨®lo va a llevar a la econom¨ªa al caos, sino que cuanto m¨¢s se tarde en abolirlo m¨¢s dif¨ªcil ser¨¢ que los ciudadanos recuperen la confianza en los bancos, y ¨¦stos, a su vez, en la estabilidad econ¨®mica del pa¨ªs. La pol¨ªtica de demorar las decisiones correctoras -que deber¨ªan empezar por anular el corralito y reconocer la p¨¦rdida de valor de los dep¨®sitos bancarios de los argentinos- s¨®lo puede agravar el desastre. El Gobierno de Duhalde no est¨¢ dando en estos momentos la sensaci¨®n de que pueda presentar ante el Fondo Monetario, los inversores extranjeros y ante sus propios ciudadanos un plan econ¨®mico cre¨ªble, aunque sea el de 'sangre, sudor y l¨¢grimas', debido sobre todo a su debilidad pol¨ªtica.

La actitud del FMI en esta crisis no est¨¢ siendo m¨¢s clarividente. Presionado de un lado por quienes exigen explicaciones por haber concedido pr¨¦stamos a una econom¨ªa tan insolvente, y de otro por los que entienden que su tarea es precisamente actuar de bombero en esta clase de incendios, en el Fondo est¨¢n siguiendo la crisis econ¨®mica m¨¢s grave de los ¨²ltimos 20 a?os de forma displicente y lejana. De hecho, su ¨²ltima decisi¨®n de aplazar el pago de la deuda que venc¨ªa ayer s¨®lo es una ratificaci¨®n de la suspensi¨®n de pagos real que ya hab¨ªa decidido el Gobierno argentino. La indecisi¨®n de Buenos Aires y la indefinici¨®n del FMI permiten pronosticar que a los ciudadanos argentinos no se les va a ahorrar ni un solo gramo de angustia.