El Bar?a se anula en Mallorca

El Bar?a no pas¨® anoche de un triste empate en Son Moix, un resultado con sabor a fracaso. Rexach defiende siempre la tesis de que un punto no vale casi nada. Y con esa sensaci¨®n regres¨® a Barcelona. Quiz¨¢ pag¨® su pavorosa falta de ambici¨®n, su renuncia obsesiva al tridente, a dejar a Saviola en el banquillo durante medio partido.

Ante el Mallorca, los azulgrana ofrecieron un partido nulo en el primer tiempo y su reacci¨®n tras el descanso no les alcanz¨® para ganar por su alarmante falta de punter¨ªa. El pibito, Gabri y Geovanni fallaron tres ocasiones francas justo cuando el encuentro agonizaba. El empate dar¨¢ algo de calma al Mallorca, un equipo fundido f¨ªsicamente, en estado cr¨ªtico. Pero no calmar¨¢ en absoluto a los azulgrana, encantados hace cuatro d¨ªas por acercarse al liderato y que hoy, en esta Liga tan apretada, deber¨¢n aguardar resultados para ver d¨®nde acaban.

Son Moix siempre ha provocado pesadillas al Bar?a y esta vez decidi¨® no sufrir. Pero volvi¨® casi de vac¨ªo. Rexach repiti¨® el mismo equipo que dispuso ante el Tenerife y la Real con tres defensas, cinco medios y Kluivert y Rivaldo en punta. La f¨®rmula funcion¨® mal el mi¨¦rcoles y s¨®lo se corrigi¨® cuando Charly apost¨® por Saviola y el tridente. Pero el pibito fue otra vez el gran sacrificado. El Bar?a tuvo el bal¨®n pero su comodidad provoc¨® un dominio est¨¦ril. No le sirvi¨® de nada tener la pelota porque no tuvo delante a ning¨²n equipo alegre: el Mallorca est¨¢ en el pozo de la tabla y Kresic fue tambi¨¦n a no perder. Una barrera de seis hombres empapel¨® a Roa como una tela de ara?a con el ¨²nico objetivo de desbaratar cualquier opci¨®n azulgrana e impulsar alg¨²n contragolpe de Luque y Losada. El resultado fue un partido plano y un di¨¢logo inexistente entre dos equipos conscientes de que una derrota reabrir¨ªa la crisis de uno (el caso del Bar?a) o sangrar¨ªa al otro (el Mallorca).

Fue como jugar al front¨®n: los azulgrana no encontraron el menor resquicio y apenas generaron peligro. Todo se qued¨® en intentos: Rivaldo, que super¨® un encontronazo con Nadal y estuvo a punto de retirarse (Saviola calent¨® in¨²tilmente veinte minutos), intent¨® varias veces chuts lejanos. Igual que Kluivert, tan desasistido como el brasile?o. El juego no se pod¨ªa canalizar por el centro ni tampoco por las bandas porque Campano y Paunovic impidieron las internadas por las bandas de Gabri y Sergi. El Mallorca no lo hizo mejor que el Bar?a. Los dos equipos vivieron esperando un despiste de la zaga contraria, como cuando Roa desbarat¨® a tiempo un contragolpe de Rivaldo o Reina otro de Luque tras un error de Cristanval.

El partido estaba en punto muerto y los dos t¨¦cnicos decidieron removerlo tras el descanso. Kresic cumpli¨® el deseo de la grada apostando por el creativo Ibagaza, a quien prefiri¨® renunciar al principio por arrastrar una leve lesi¨®n. Rexach calc¨® entonces su reacci¨®n de hace pocos d¨ªas: quit¨® a Rochemback, que acababa de hacer una dur¨ªsima entrada a destiempo sobre Nadal, y apost¨® por Saviola. Y los equipos despertaron y el juego empez¨® a cobrar sentido y vida de porter¨ªa a porter¨ªa. La pelota gan¨® velocidad y metros. Rivaldo volvi¨® a probarlo dos veces con dos remates desde fuera del ¨¢rea. Roa se la jug¨® parando uno de ellos con el pecho porque el rebote fue a parar a los pies de Saviola, que envi¨® alto y fuera. El Mallorca no se qued¨® tampoco de brazos cruzados pero se top¨® con la solvencia de Reina, que hizo in¨²til una carrera de Luque. O con la concentraci¨®n defensiva del Bar?a, que tambi¨¦n desbarat¨® otra veloz carrera de Ibagaza.

El tridente acab¨® jugando solo 18 minutos. Charly decidi¨® revelar a Rivaldo (maltrecho por las lesiones) por Geovanni. Charly tard¨® demasiado tiempo a por el partido y sus jugadores tampoco actuaron con convicci¨®n. Todas las ocasiones se acumularon en la ¨²ltima media hora. La responsabilidad del gol cay¨® entonces en Saviola, que fall¨® dos oportunidades claras al no coronar un contragolpe y errar un chut solo ante su compatriota. Pero la cosa se qued¨® ah¨ª: el Mallorca acus¨® el desgaste f¨ªsico y el Bar?a, muy lento, no despert¨®. Gabri, Kluivert y Geovanni pudieron marcar justo al final pero Roa y su escaso acierto dejaron el partido tan nulo como al principio.