Suiza suspende un tratado con Italia por una ley de Berlusconi
El primer ministro italiano, a punto de controlar la televisi¨®n p¨²blica
La discutida ley que regula las rogatorias judiciales, aprobada por el Gobierno de Silvio Berlusconi, tropez¨® ayer con un nuevo escollo internacional. El Gobierno suizo declar¨® que no ratificar¨¢, de momento, el tratado de cooperaci¨®n y asistencia judicial con Italia, firmado en 1998 y aprobado ya por el Parlamento. Berna espera a que los tribunales italianos se pronuncien sobre los recursos contra la ley.
El Gobierno helv¨¦tico, seg¨²n inform¨® ayer la agencia de noticias nacional Ats, considera que la ley italiana, que plasma el acuerdo firmado en 1998 por Berna y Roma para acelerar y simplificar los procedimientos de asistencia judicial entre ambos pa¨ªses, contradice de hecho el esp¨ªritu de ¨¦ste. La decisi¨®n de Berna significa un importante rev¨¦s pol¨ªtico para el Gobierno de Berlusconi, e implica que la colaboraci¨®n judicial entre Suiza e Italia se mantendr¨¢ ahora anclada en la Convenci¨®n de 1959.
El Gobierno suizo inform¨® de esta decisi¨®n en la respuesta por escrito a una pregunta del diputado socialista helv¨¦tico Nils de Dardel. En ella deja claro que Suiza no est¨¢ dispuesta a ratificar el tratado porque, de hacerlo, se arriesgar¨ªa a provocar las cr¨ªticas de la comunidad internacional al aceptar impl¨ªcitamente las condiciones que impone la nueva ley italiana. La ley, aprobada en oto?o, introduce la obligaci¨®n de certificar los documentos enviados a los magistrados y cambia la v¨ªa de transmisi¨®n de los mismos. Las rogatorias deben ser enviadas ahora al Ministerio de Justicia italiano, lo que, a juicio de Berna, resulta 'menos favorable a la ayuda internacional'.
La decisi¨®n del Gobierno suizo fue acogida en Italia con alivio por el centro izquierda que ha criticado duramente la ley del Gobierno Berlusconi acusando a ¨¦ste de haberla redactado a medida de sus necesidades judiciarias. 'Esto quiere decir que Suiza es un pa¨ªs democr¨¢tico', declar¨® Luciano Violante, portavoz de los Dem¨®cratas de Izquierda en el Congreso de los Diputados. Por su parte, Berlusconi rest¨® importancia a la noticia. 'Ya sab¨ªamos que Suiza hab¨ªa pedido alg¨²n tiempo para hacer comprobaciones t¨¦cnicas', dijo, pero a?adi¨® que la ley de rogatoria 'es sacrosanta'. Nicol¨® Ghedini, abogado defensor de Berlusconi en el proceso Sme, que se desarrolla actualmente en Mil¨¢n por presunta corrupci¨®n de jueces, no ocult¨® su decepci¨®n. 'Suiza tiende siempre a aislarse', declar¨®.
La decisi¨®n suiza se produce en v¨ªsperas del nombramiento de la nueva c¨²pula directiva de la RAI (la televisi¨®n p¨²blica italiana) en sustituci¨®n de la actual que cesa a partir del 16 de febrero. La elecci¨®n de los cinco cargos (incluido el nuevo presidente) ha desatado una lucha pol¨ªtica en el Gobierno, sobre todo por las exigencias de Umberto Bossi, l¨ªder de la Liga Norte, que reclama una plaza. Sin embargo, la elecci¨®n corresponde a los presidentes de las dos C¨¢maras del Parlamento, uno de Forza Italia y otro democristiano, y ambos tienen ya sus preferencias. Los cambios en la RAI revisten especial importancia porque Berlusconi, due?o de tres cadenas de televisi¨®n privada, pasar¨ªa a gobernar de facto las tres p¨²blicas. Una situaci¨®n que ha provocado alarma en la oposici¨®n y un llamamiento del presidente de la Rep¨²blica a respetar el pluralismo informativo.
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