Chirac convierte la lucha contra el aumento de la delincuencia en el eje de su campa?a

Francia se ha convertido en un lugar verdaderamente peligroso, donde 'nadie est¨¢ al abrigo, nadie se siente seguro'. As¨ª lo afirm¨® ayer Jacques Chirac, el presidente de un pa¨ªs de 61 millones de habitantes, que recibe cada a?o la visita de otros 76 millones de personas. Convertido en el primer propagandista del motivo por el que conviene salir corriendo, el presidente prometi¨® en su primer mitin de campa?a resolver el problema si es reelegido, utilizando un arsenal de medidas represivas: 'Impunidad cero', encierro de menores delincuentes, escuelas separadas para alumnos dif¨ªciles y emplazamiento de todos los organismos de seguridad bajo la autoridad directa del jefe del Estado.

El asunto es delicado, entre otras razones, porque est¨¢ orientado a meter en cintura a muchos adolescentes. Su discurso mezcla los vientos del otro lado del Atl¨¢ntico con las inquietudes de la sociedad francesa, para la cual la inseguridad es el principal problema del pa¨ªs. Las estad¨ªsticas disponibles hablan de cuatro millones de delitos y faltas denunciadas en 2001, un 7,69% m¨¢s que el a?o precedente [en Espa?a aumentaron un 10,45%]; un 62% m¨¢s de robos que el a?o anterior; 13% m¨¢s de violaciones; 11% m¨¢s de bienes destruidos y as¨ª un largo rosario de delitos en franco aumento.

Chirac arroja toda la responsabilidad sobre el Gobierno de su rival, el primer ministro socialista, Lionel Jospin: 'Se ha cerrado los ojos durante demasiado tiempo, se han opuesto prevenci¨®n y represi¨®n como si fuera preciso escoger entre las dos (...), se ha permitido que la ola se hinche a las puertas de las ciudades, como si la violencia y el odio pudieran ser conjurados con el silencio, la ignorancia y el olvido', martille¨® en su primer mitin de campa?a, para el que eligi¨® un pueblo de la conflictiva periferia de Par¨ªs.

Medidas propuestas

He aqu¨ª las principales medidas propuestas por Chirac:

- Impunidad cero. 'Ninguna infracci¨®n, por ligera que sea, debe ser dejada sin respuesta inmediata'. Para ello propone 'una justicia de proximidad, capaz de tratar los peque?os delitos y de pronunciar penas de reparaci¨®n inmediatas y efectivas, trabajos de inter¨¦s general o multas', al estilo de 'las antiguas justicias de paz'. Sin entrar a¨²n en detalles, Chirac sugiere revisar todo el sistema judicial.

- Lugares de encierro. Creaci¨®n de 'centros preventivos' donde encerrar a los menores reincidentes mientras aguardan el momento de ser juzgados. Creaci¨®n de 'centros educativos cerrados' para los reincidentes, una vez condenados. Creaci¨®n de prisiones 'modernas y diferenciadas, seg¨²n la naturaleza de las infracciones cometidas'. Los menores declarados culpables de cr¨ªmenes deben ser emplazados en 'instituciones penitenciarias especializadas', a fin de sustraerles 'a la atm¨®sfera delet¨¦rea de las prisiones para adultos'.

- Escuelas para alumnos conflictivos. Creaci¨®n de centros escolares 'especializados' en estudiantes expulsados de otros establecimientos.

- Reconstrucci¨®n de barrios dif¨ªciles. Destrucci¨®n de barriadas en malas condiciones y reconstrucci¨®n de un mill¨®n de alojamientos en 20 a?os.

- Poderes de seguridad. Coordinar la Polic¨ªa y la Gendarmer¨ªa (equivalentes a la Polic¨ªa Nacional y a la Guardia Civil espa?olas) en un Ministerio de la Seguridad Interior (actualmente la Gendarmer¨ªa depende de Defensa). Emplazamiento de un 'Consejo de Seguridad Interior' bajo la autoridad del jefe del Estado, que re¨²na al primer ministro, a los ministros afectados y a los responsables de las Administraciones de la seguridad. Aumentar el n¨²mero de agentes.

- Grupos operativos. Creaci¨®n de 'agrupaciones operativas de intervenci¨®n y de sost¨¦n', que asociar¨¢n a 'magistrados, polic¨ªas, gendarmes, aduaneros, servicios de la represi¨®n de fraudes e inspectores de trabajo'.

Todo este cat¨¢logo de medidas fue acogido con acusaciones de plagio por el tercer hombre en la reci¨¦n iniciada carrera por El El¨ªseo, Jean-Pierre Chev¨¨nement, quien ech¨® mano de su mordacidad para subrayar que Chirac 'acaba de descubrir el agua caliente'.

V¨ªspera de elecciones

El presidente del ultraderechista Frente Nacional, Jean-Marie Le Pen, se felicit¨® de la 'lepenizaci¨®n de los esp¨ªritus', mientras el ministro del Interior, el socialista Daniel Vaillant, pon¨ªa en duda la credibilidad de Chirac: 'La inseguridad es un tema mayor, que debe ser tratado seriamente y no se puede simplemente descubrirlo en v¨ªsperas de unas elecciones', intent¨® decir en el hemiciclo de la Asamblea Nacional, en medio de la bronca montada por los diputados de centro-derecha.

Ninguno de los comentarios de urgencia entr¨® en la arquitectura de los poderes dibujada por Chirac, que, en definitiva, tiende a fortalecer el presidencialismo en un sistema pol¨ªtico donde tanto el jefe del Estado como los diputados son elegidos directamente por el pueblo. En el esquema expuesto por Chirac, a las ¨¢reas de defensa y pol¨ªtica exterior, que est¨¢n reservadas al presidente, deber¨ªa a?adirse la seguridad interior, hasta ahora un espacio reservado al Gobierno.