Bruselas esgrime las fuertes diferencias de precio para liberalizar la venta de coches
El coste de un turismo en Dinamarca dobla el de Luxemburgo, el Estado m¨¢s barato
La Comisi¨®n Europea se carg¨® ayer de razones para mantener su propuesta de introducir principios liberalizadores en el sector del autom¨®vil. El estudio que ayer public¨® indica que un coche nuevo con impuestos incluidos puede costar hasta el doble seg¨²n se compre en un pa¨ªs u otro de la UE. Los fabricantes y Alemania son contrarios a la reforma que, de aceptarse, permitir¨ªa a los ciudadanos comprar un coche en cualquier pa¨ªs, incluso por Internet. Los concesionarios m¨¢s beneficiados ser¨ªan los de Luxemburgo y Espa?a, que tienen los precios m¨¢s bajos.
La comparaci¨®n de precios con impuestos incluidos aporta una visi¨®n m¨¢s realista de lo que ocurre en el mercado del autom¨®vil nuevo para el consumidor y, por tanto, del beneficio que supondr¨ªa para el consumidor medio de la liberalizaci¨®n del sector. As¨ª, por ejemplo, se demuestra que era pura ilusi¨®n que en Dinamarca y en Finlandia los coches nuevos resultaran los m¨¢s baratos de Europa.
Los impuestos se encargan en ambos pa¨ªses de disparar el precio final; sobre todo en Dinamarca. Un ejemplo: el Opel Corsa cuesta en este pa¨ªs 16.598 euros, mientras que en Luxemburgo el consumidor se lo lleva por casi la mitad (8.638) y en Espa?a, por 9.532.
La Comisi¨®n Europea insiste, en referencia a los precios antes de impuestos, en que 'los mercados m¨¢s baratos de la zona euro son Espa?a, Grecia y Finlandia, con diferencias de menos del 20% para m¨¢s del 90% de los modelos examinados'. Al Ejecutivo de Bruselas le sigue interesando la comparaci¨®n de precios sin impuestos porque es la manera de analizar la pol¨ªtica que siguen los fabricantes. As¨ª, constata que los precios generalmente bajos en Finlandia, Dinamarca y Grecia son una respuesta de los fabricantes a los altos impuestos sobre la compra de coches de estos Estados miembros para que, al final, el coste para el consumidor sea asequible.
Gran peso de los impuestos
El Reino Unido y Alemania siguen siendo los dos pa¨ªses donde los fabricantes suelen imponer los precios m¨¢s altos. As¨ª, volviendo al ejemplo elegido del Opel Corsa, en realidad es en Alemania donde el fabricante impone el precio m¨¢s alto (8.942 euros) y, curiosamente, en Dinamarca donde fija el m¨¢s bajo (6.497 euros), lo que, una vez incluidos los impuestos, var¨ªa sustancialmente las cosas.
Uno de los ejemplos se?alados como de gran disparidad en t¨¦rminos absolutos es tambi¨¦n el del Fiat Marea, cuyo precio es en Alemania de 15.422 euros y en Dinamarca, 9.651. El precio final, con impuestos, var¨ªa notablemente, convirtiendo a Espa?a en el pa¨ªs donde el precio es m¨¢s asequible (14.154), frente a Dinamarca (25.644), que marca el tope.
Este nuevo trabajo se ha elaborado en funci¨®n de 80 modelos de 24 fabricantes de autom¨®viles nuevos, los m¨¢s vendidos en la Uni¨®n Europea. Refleja la situaci¨®n a fecha 1 de noviembre de 2001, antes de la introducci¨®n del euro, aunque cuando ya los precios al por menor se hab¨ªan empezado a denominar en la nueva moneda en 12 pa¨ªses de la Uni¨®n. Sin embargo, constata que 'no se ha producido una convergencia de precios', como se?ala el propio Ejecutivo europeo.
'El seguimiento confirma que existe un gran margen para mejorar las condiciones de mercado en el sector de los veh¨ªculos de motor', dijo ayer el comisario de Competencia Mario Monti en un comunicado oficial. 'Las propuestas de reforma presentadas por la Comisi¨®n el 5 de febrero deber¨¢n situar al mercado interior en su m¨¢xima capacidad, despejando el camino para que los consumidores se beneficien de una mayor competencia'.
La propuesta de reforma mencionada por Monti (v¨¦ase EL PA?S del 4 de febrero pasado) consiste en abrir el mercado de manera que el ciudadano pudiera comprar su veh¨ªculo en cualquier pa¨ªs de la UE. El Ejecutivo europeo propone tambi¨¦n reducir las restricciones que los fabricantes imponen a los concesionarios de coches, de manera que, por ejemplo, los concesionarios podr¨ªan comercializar marcas diversas. Alemania, el m¨¢s importante productor de autom¨®viles de Europa, es el pa¨ªs que m¨¢s se opone a las aspiraciones de Bruselas, que, de llegar a buen t¨¦rmino, permitir¨ªan a los consumidores comprar un coche en un supermercado o a trav¨¦s de Internet, ya que los vendedores no estar¨ªan obligados a ofrecer los servicios posventa.
Los fabricantes con mayores diferencias de precios en la zona euro son General Motors, Fiat, el grupo PSA y Volkswagen. Los que limitan m¨¢s las distancias son algunos alemanes (BMW y DaimlerChrysler) y, en menor grado, Ford.
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