La Vega Baja recalificar¨¢ 40 millones de metros y planea 9 campos de golf

El intensivo proceso de construcci¨®n que est¨¢n alimentando los municipios de segunda y tercera l¨ªnea de costa en La Vega Baja se concreta en proyectos formidables: nueve campos de golf y unas 160.000 viviendas que podr¨¢n albergar hasta 600.000 habitantes, en una comarca deficitaria en recursos h¨ªdricos. El proceso depredador es tal que no se respetan montes, huertas y espacios protegidos. Los ayuntamientos recalifican a los mismos promotores, y tras los proyectos suelen aparecer los mismos abogados y arquitectos.

Seg¨²n los proyectos actuales, m¨¢s de 40 millones de metros cuadrados ser¨¢n urbanizables en La Vega Baja. El crecimiento demogr¨¢fico que puede experimentar la comarca, de cumplirse las expectativas creadas, resultar¨¢ claramente superior a sus posibilidades, ya que los ayuntamientos han liberalizado una extensi¨®n de suelo donde se podr¨¢n construir unas 160.000 viviendas con capacidad para 600.000 personas. Si se tiene en cuenta que la poblaci¨®n estable de La Vega Baja no alcanza los 300.000 habitantes, puede comprenderse con facilidad que este ritmo de expansi¨®n resulta desproporcionado.

La vor¨¢gine constructora en la comarca se siente con especial fuerza en los municipios de segunda l¨ªnea de costa, que suplen el hueco en la oferta que deja el litoral sobreexplotado.

Si prosperan todos los proyectos que se planean, La Vega Baja tendr¨¢ en breve plazo 15 campos de golf que consumir¨¢n casi diez millones de metros c¨²bicos de agua al a?o. Actualmente la comarca no puede absorber esta cantidad, debido al d¨¦ficit estructural y permanente de recursos h¨ªdricos que soporta. Prueba elocuente es que el a?o pasado necesit¨® un pr¨¦stamo de 20 hect¨®metros c¨²bicos de agua para cerrar airosamente el ejercicio h¨ªdrico del a?o 2000.

Los optimistas vaticinios que han proliferado en torno al AVE y a la probable alternativa de que se instale un apeadero en la comarca han sido tambi¨¦n un aliciente para algunos promotores vinculados al poder. Pero en la trama urban¨ªstica de La Vega Baja se repiten varias constantes que confieren a este exorbitante proceso recalificador una singularidad: detr¨¢s de casi todas las operaciones se hallan los mismos arquitectos, abogados y promotores, que obtienen sustanciosos beneficios a cambio de muy pocas concesiones, y los ayuntamientos que acceden a sus peticiones no suelen cumplir el procedimiento que marca la ley; eluden con frecuencia su obligaci¨®n de convocar concursos p¨²blicos para adjudicar la urbanizaci¨®n.

Para Miguel ?ngel Pav¨®n, de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (ASHA), el entramado inmobiliario de la comarca 'esconde una intenci¨®n manifiesta de crear una ciudad lineal desde Orihuela hasta Torrevieja donde todo estar¨ªa completamente urbanizado'.

El motor econ¨®mico del turismo de segunda residencia es un factor decisivo, y ligado a ¨¦ste, la implantaci¨®n del AVE, pero la especulaci¨®n tambi¨¦n se ha visto alentada por una situaci¨®n de plena libertad. En estos momentos, no existe un plan de acci¨®n territorial que ordene y regule el crecimiento urban¨ªstico, y este vac¨ªo legal explica en buena medida la desordenada y ca¨®tica expansi¨®n que se est¨¢ produciendo en La Vega Baja, donde la proliferaci¨®n de viviendas y de campos de golf plantea numerosas inc¨®gnitas sobre la calidad que tendr¨¢n los servicios y las infraestructuras.

Con un gobierno tripartito de mayor¨ªa socialista, San Miguel de Salinas contempla la recalificaci¨®n de unos 13 millones de metros cuadrados y la reserva de otras 14.000 hect¨¢reas, incluidos amplios espacios de Sierra Escalona, donde se baraja la opci¨®n de construir hasta tres campos de golf. El art¨ªfice del documento es Rafael Mart¨ªnez Campillo, uno de los nombres que reaparece con insistencia en numerosas operaciones urban¨ªsticas de La Vega Baja, como la recalificaci¨®n de El Raso en Guardamar o la propuesta alternativa al PGOU de Jacarilla.

Por lo general, en todas las actuaciones reclasificatorias se involucran los mismos nombres. Entre los promotores destacan dos, Joaqu¨ªn Grau y Antonio Pedrera, y entre los abogados y arquitectos que elaboran los propoyectos, el propio Mart¨ªnez Campillo y Juan Enrique Serrano, imputado por un caso de presunto cohecho junto al alcalde de Guardamar.

El gobierno de Almorad¨ª, del PP, incluy¨® en el documento de homologaci¨®n de sus normas subsidiarias un convenio con el promotor Joaqu¨ªn Grau en virtud del cual el Consistorio recalifica 430.000 metros de huerta tradicional para destinarlos a la construcci¨®n de mil viviendas.

El reclamo del golf es el recurso tur¨ªstico que mejor explotan todos los municipios de la comarca. El Ayuntamiento de Orihuela aprob¨® en diciembre la reclasificaci¨®n de 1.800.000 metros destinados a este fin y casualmente el beneficiario del proyecto tambi¨¦n fue Joaqu¨ªn Grau, el mismo que ha obtenido carta libre en Jacarilla para urbanizar m¨¢s de un mill¨®n de metros, no sin una ¨¢cida pol¨¦mica al descubrirse que la empresa Agr¨ªcola del Segura, SA, que dirige con Eduardo L¨®pez, fue la encargada de costear la redacci¨®n del Plan de Ordenaci¨®n Municipal.

El PGOU de esta localidad es obra de Juan Enrique Serrrano, y convierte en urbanizables m¨¢s de dos millones y medio de metros cuadrados. Pero a¨²n m¨¢s exorbitante es el proyecto que una asociaci¨®n de propietarios ha encargado a Mart¨ªnez Campillo y que se ajusta fidedignamente a la inspiraci¨®n que rige su modelo para San Miguel: propone reclasificar pr¨¢cticamente todo el t¨¦rmino municipal.

Similar orientaci¨®n ten¨ªa el controvertido plan de clasificaci¨®n de Algorfa, donde la constructora Villamart¨ªn, de Antonio Pedrera, construy¨® un campo de golf que la Consejer¨ªa de Urbanismo declar¨® ilegal.

En Rojales, la invasi¨®n en la zona de protecci¨®n oficial del per¨ªmetro de la Laguna de la Mata ha sido un intento subrepticio que se ha evidenciado sin tapujos en sus ¨²ltimas actuaciones urban¨ªsticas. Los tres sectores que se engloban en el plan denominado Lo Malab¨² ocupan 175 hect¨¢reas, de los que 45 forman parte de este per¨ªmetro, un proyecto que los ecologistas recurrieron ante el Tribunal Superior de Justicia valenciano, 'porque ni siquiera contaba con el obligado estudio de impacto ambiental', explica Miguel ?ngel Pav¨®n.

La intervenci¨®n de los ecologistas para frenar este avance intr¨¦pido hacia el per¨ªmetro de Las Lagunas no ha surtido efecto. Ahora, el Ayuntamiento de Rojales pretende recalificar otros 350.000 metros para ampliar el n¨²cleo de Ciudad Quesada, agravando la presi¨®n demogr¨¢fica de un humedal que ya sufre las consecuencias de la urbanizaci¨®n de El Raso de Guardamar, donde 60 de sus 120 hect¨¢reas invaden la franja de protecci¨®n.

Albatera y Pilar de la Horadada, ambos gobernados por el PSPV, cierran el nutrido cupo de municipios que han decidido ensanchar su suelo urbanizable. El primero prev¨¦ edificar una urbanizaci¨®n, con instalaci¨®n de golf, de 130 hect¨¢reas, y la mitad de su terreno ser¨¢ de titularidad p¨²blica, propiedades de monte que la Generalitat acaba de descatalogar. En Pilar de la Horadada su Ayuntamiento ha previsto un segundo campo de gol. Ambos tendr¨¢n una extensi¨®n superior al mill¨®n de metros cuadrados que, unidos a los 800.000 de diversas urbanizaciones que se est¨¢n ejecutando en las pocas playas v¨ªrgenes que atesora el municipio, suman un total de tres millones de metros cuadrados legalizados para edificar.