Vitoria revisa el modernismo catal¨¢n m¨¢s all¨¢ de Gaud¨ª

El modernismo catal¨¢n tuvo su mejor exponente en Antonio Gaud¨ª, pero sus coet¨¢neos tambi¨¦n ofrecieron aportaciones imprescindibles en todas las artes, mayores y menores, siguiendo la divisi¨®n de la ¨¦poca.

La Caja Vital ofrece desde el viernes una selecci¨®n de esas obras que marcaron un tiempo y que incluye espejos, sillones y otros muebles junto con pinturas y esculturas. Entre las 90 piezas que se exhiben se encuentran obras de Anglada Camarasa, Santiago Rusi?ol, Joan Busquets o, incluso, Pablo Picasso.

La exposici¨®n coincide con el 150 aniversario del nacimiento de Gaud¨ª, principal exponente de una corriente art¨ªstica que renov¨® el panorama de una Espa?a un tanto aldeana y gris. Hasta el 7 de abril se podr¨¢ disfrutar de una bocanada de aire cosmopolita que todav¨ªa hoy guarda su atractivo. En la muestra se han reunido piezas representativas de los artistas que destacaron en aquel momento, que tuvo en el Palau de la M¨²sica de Lluis Dom¨¦nech i Montaner o en La Sagrada Familia de Gaud¨ª su mejor expresi¨®n arquitect¨®nica. De Dom¨¦nech se incluye en la exposici¨®n, como pieza significativa, un capitel, mientras que de Gaud¨ª se presenta el sill¨®n de casa Calvet, una de sus mejores aportaciones al dise?o de mobiliario.

En la pintura, el modernismo se personific¨®, entre otros, en Santiago Rusi?ol, un hombre melanc¨®lico que resisti¨® hasta el fin la decadencia del movimiento que fund¨®. Carr¨¨ de Sitges y Jardines son los t¨ªtulos de las obras que se presentan en Vitoria, donde comparten espacio con las creaciones arabescas al estilo de Toulouse-Lautrec de Ram¨®n Casas o los jarrones floridos de Anglada Camarasa. Tambi¨¦n se presentan cuadros de Joan Llimona, primer presidente del Cercle artistic de Sant Lluc, desde el que se impuls¨® esta corriente art¨ªstica.

Mobiliario y joyas

La personalidad arrebatadora del franc¨¦s Auguste Rodin impregn¨® la escultura modernista de una concepci¨®n visual que influy¨® en artistas catalanes como Miquel Blay, Eusebi Arnau o Eric Clarass¨®, de quienes se han recogido piezas de peque?o volumen que hac¨ªan las delicias de la burgues¨ªa de la ¨¦poca. Sus casas estaban amuebladas con creaciones de Homar i Mesquida, de quien se ofrecen un par de sillas y una l¨¢mpara, o de Joan Busquets, uno de los preferidos, que est¨¢ presente en la exposici¨®n con una poltrona y una mesa auxiliar. Y las mujeres llevaban cuidadas joyas de Lluis Masriera i Ros¨¦s, aut¨¦nticos delirios de color y artificio, repletos de exotismo, como ese colgante que lleva una cabeza de un hind¨² o el broche que presenta aves del para¨ªso.

La exposici¨®n se completa con un cuidado cat¨¢logo en el que se ofrece una breve semblanza biogr¨¢fica de cada creador presente en la muestra, adem¨¢s de unos textos introductorios a cargo de la comisaria de la exposici¨®n, Marisa Oropesa, Daniel Giralt-Miracle, Jaume Soc¨ªas, Mar¨ªa Isabel Gonz¨¢lez Navarro y Merc¨¦ Rodr¨ªguez.