Nace un museo de pintura en San Francisco el Grande
Cincuenta obras de Zurbar¨¢n, Alonso Cano, Bayeu y Carducho esmaltar¨¢n un itinerario que incluir¨¢ el enorme coro
La historia del arte har¨¢ justicia a uno de sus hitos madrile?os m¨¢s monumentales: la iglesia de San Francisco el Grande. El Instituto del Patrimonio Hist¨®rico Espa?ol (IPHE) quiere realzar numerosas obras de arte que este templo aloja desde hace siglos. Para ello va a crear en su seno un museo de pintura. Si todo discurre como tiene previsto, el futuro museo madrile?o ser¨¢ visitable por el p¨²blico en un plazo de 24 meses. As¨ª lo subraya ?lvaro Mart¨ªnez Novillo, subdirector del IPHE, una de las instituciones art¨ªsticas de mayor prestigio en Espa?a.
El futuro museo constar¨¢ de un itinerario que partir¨¢, presumiblemente, desde las capillas que circundan la planta basilical; se adentrar¨¢ por las galer¨ªas que conducen hasta la sacrist¨ªa; proseguir¨¢ a trav¨¦s de las salas capitulares del ¨¢rea conventual para ascender posteriormente hasta el coro, que abarca una cincuentena de metros de frente por la mitad, aproximadamente, de profundidad. Desde la balconada de esta tarima elevada, generosa en proporciones, se ofrecer¨¢ al futuro visitante una contemplaci¨®n monumental de la bas¨ªlica. All¨ª se alza un ¨®rgano Cavaill¨¦-Coll, de molduras neocl¨¢sicas, al que los especialistas atribuyen la mejor calidad sonora de Madrid; ha sido recientemente restaurado. Junto a ¨¦l ser¨¢n dispuestos al menos diez cuadros de gran formato, de tres o m¨¢s metros de altura por dos metros de anchura. Los lienzos forman parte de un contingente de 48 obras de arte que hoy permanecen dispuestas fuera del espacio mural del templo y que decoran distintos rincones del interior del recinto, en las inmediaciones de la sacrist¨ªa y en galer¨ªas de salas capitulares. Entre los cuadros del siglo XVII que ornamentar¨¢n el museo destacan dos de Francisco de Zurbar¨¢n (un San Juan de la Marca y otro dedicado a San Buenaventura). Fue ¨¦ste uno de los ¨²ltimos cuadros pintados por el artista extreme?o antes de morir, en Madrid, en 1664. De la misma centuria hay otra tela, excelsa, de Alonso Cano.
El templo devolver¨¢ a los monasterios de El Paular y El Parral dos magn¨ªficas siller¨ªas de los siglos XV y XVI
Del siglo posterior y siguientes el futuro museo acoger¨¢ lienzos de Jos¨¦ Camar¨®n, Antonio Carnicero, Zacar¨ªas Gonz¨¢lez Vel¨¢zquez, Manuel de la Cruz y Andr¨¦s de la Calleja. Algunos de ellos fueron seguidores de Rafael Mengs, pintor de la Corte de Carlos III. Hay, adem¨¢s, otras obras de Casado del Alisal, Mu?oz Degra¨ªn, Moreno Carbonero y Mart¨ªnez Cubells.
El templo de San Francisco el Grande, entre otras joyas, alberga tres siller¨ªas de gran belleza, labradas en maderas nobles. La primera, en nogal, proced¨ªa del monasterio de El Paular, cenobio encaramado en lo m¨¢s alto de la sierra madrile?a, bajo la falda de Pe?alara, que data de 1390. La siller¨ªa es de estilo g¨®tico ojival, fue asignada por el obispo de Segovia, Juan V¨¢zquez de Cepeda, en torno al a?o de 1440. Otra de las siller¨ªas procede del monasterio segoviano de El Parral, y fue tallada por Bartolom¨¦ Fern¨¢ndez en 1526; la tercera proven¨ªa de un convento dominico. Las dos primeras llegaron a San Francisco el Grande tras haber entrado en situaci¨®n de ruina los monasterios de procedencia, tras los procesos desamortizadores de la Iglesia cat¨®lica y la consecutiva exclaustraci¨®n de los monjes, a mediados del siglo XIX. Seg¨²n se?ala ?lvaro Mart¨ªnez Novillo, 'las siller¨ªas volver¨¢n a sus lugares de origen'. Los espacios que dejen pasar¨¢n a formar parte del ¨¢rea muse¨ªstica.
El conservador Antonio S¨¢nchez Barriga y el arquitecto Javier Feduchi, hijo de Luis Feduchi, durante a?os responsable de la conservaci¨®n de la bas¨ªlica, trabajan desde meses atr¨¢s en el dise?o del museo. S¨¢nchez Barriga, quien tuviera encomendada la restauraci¨®n del templete de Bramante, canon arquitect¨®nico renacentista en Roma, ha culminado recientemente una actuaci¨®n restauradora de la pintura mural de San Francisco el Grande, tras once meses de trabajo al frente de un equipo de once personas. Queda por delante el tratamiento, por ¨¦l proyectado, del presbiterio y el del coro, que esperan ser adjudicados. 'Tal vez sea necesario desplazar el altar hacia adelante para neutralizar visualmente el presbiterio mientras dura la restauraci¨®n, que podr¨ªa durar un a?o', se?ala. La bas¨ªlica posee la cuarta c¨²pula m¨¢s grande de Europa.
Con una altura de 72 metros hasta el cimborrio, dispone de siete capillas ornamentadas ricamente con cuadros de magn¨ªfica hechura, entre los que deslumbra San Bernardino de Siena, el primero de los encargados por la Casa Real a Francisco de Goya.
Una pinacoteca en el claustro
El claustro de San Francisco el Grande es una pinacoteca. As¨ª lo establec¨ªa en 1919 el cl¨¦rigo y cr¨ªtico de arte Calabuig Revert. El Instituto del Patrimonio Hist¨®rico Espa?ol ha tomado en serio aquel dictamen. Los 48 cuadros que integrar¨¢n el futuro museo de la calle de Bail¨¦n han decorado las galer¨ªas conventuales durante la atribulada historia del templo, exacerbada durante las fases, alternativamente laicas y clericales, del siglo XIX. De sus muros colgaron lienzos atribuidos a Herrera el Viejo, Rizzi, Pacheco, Crayer, Ribalta, Vicente Carducho, Maella y otros. Los cambios de ubicaci¨®n de los ornamentos han sido constantes: muestra de ello es un excelente ¨®leo mariano, conocido como La Porci¨²ncula, vinculada a las indulgencias, obra de Francisco Bayeu, cu?ado de Goya; tras presidir el templo, pas¨® d¨¦cadas en una meseta situada en la escalera que llega al coro, donde a¨²n hoy se halla. La leyenda sit¨²a el origen del templo en la Edad Media, al regreso de San Francisco de As¨ªs de una peregrinaci¨®n a Compostela, en 1214. En Madrid, sobre este espacio, fund¨® una ermita franciscana. En su fase moderna, su construcci¨®n comenz¨® en 1761. Carlos III la encomend¨® a Ventura Rodr¨ªguez, pero su autor fue el cl¨¦rigo Cabezas, y su fachada, obra de Sabatini. Lugar predilecto de la nobleza para sus enterramientos, en su lar fueron sepultados Ruy Gonz¨¢lez de Clavijo, embajador de Castilla ante Tamerl¨¢n, aut¨®crata de Asia Central; la reina Juana, esposa de Enrique IV, y el marqu¨¦s de Villena. Desde este templo se centralizaron tareas religiosas sobre Tierra Santa. La Obra P¨ªa, instituci¨®n asentada en Jerusal¨¦n, codirige el templo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.