Jerez 2002, al galope
Antonio Ortiz, director del Comit¨¦ Organizador de los Juegos Ecuestres: 'Vamos a dar la talla'
El tiempo es un jinete que cabalga sin pausa, y la organizaci¨®n de los Juegos Ecuestres Mundiales de Jerez hace ya meses que se adentr¨® en su particular cuenta atr¨¢s. Antonio Ortiz Rufino (Sevilla, 1959) es el director del Comit¨¦ Organizador de Jerez 2002, el m¨¢ximo responsable -despu¨¦s del presidente Pedro Pacheco- de que este gran circo est¨¦ en perfecto estado de revista el 10 de septiembre, fecha en la que arrancar¨¢ el mayor evento que haya acogido nunca esta ciudad andaluza. A siete meses vista del acontecimiento, la primera preocupaci¨®n de Ortiz y su equipo, formado por 35 personas, es 'la obligaci¨®n de dar la talla organizativamente' porque, seg¨²n asegura, 'los recintos van a estar y van a ser de primer orden'. El cuartel general de los juegos se encuentra en el coraz¨®n de lo que ser¨¢ el epicentro del mundial, el ¨¢rea de Chap¨ªn, en cuyo per¨ªmetro se ubican tres de las instalaciones dispuestas para la competici¨®n: el estadio municipal, el palacio de deportes y el picadero cubierto. A pesar de ello, Ortiz y sus colaboradores han logrado abstraerse del paisaje de excavadoras, gr¨²as, operarios y cemento que les rodea, conscientes de que los trabajos marchan conforme a los plazos. 'Todo estar¨¢ terminado en junio', se?ala Ortiz, 'menos el estadio, que estar¨¢ concluido un mes despu¨¦s, con idea de que tengamos tiempo suficiente para que adaptemos las instalaciones al a?adido ef¨ªmero del evento'. Antes de agosto, por tanto, estar¨¢ levantado un gran decorado con cuatro escenarios para la competici¨®n en los que se habr¨¢n invertido 60 millones de euros.
Mientras pasea por el interior de un estadio Chap¨ªn desnudo de asientos y vestido de andamios, el director de Jerez 2002 asegura que ya se ha acostumbrado a verlo as¨ª. 'Ser¨¢ impresionante cuando se termine. Estoy deseando que llegue el momento', a?ade. Los trabajos de remodelaci¨®n del estadio municipal de Chap¨ªn dotar¨¢n al edificio de una cubierta de grader¨ªo completa, ampliar¨¢n el aforo (de 17.000 a 20.500 espectadores) y mejorar¨¢n su imagen exterior y los diferentes servicios de los que dispone. La joya de la corona de Jerez 2002 ser¨¢ el escenario de las ceremonias de inauguraci¨®n y clausura y albergar¨¢ las pruebas de doma cl¨¢sica y saltos, dos de las disciplinas m¨¢s atractivas.
El Palacio de Deportes, situado a s¨®lo unos metros del estadio, estar¨¢ terminado en abril y contar¨¢ con un aforo de 5.900 personas gracias a un sistema de gradas retr¨¢ctiles que permitir¨¢ ganar espacio a la pista cuando sea necesario. Una segunda pista de calentamiento y entrenamiento ir¨¢ anexa al palacio, donde se disputar¨¢n algunas pruebas de enganches y del concurso completo de equitaci¨®n. El impresionante complejo de Chap¨ªn se cierra con un picadero cubierto, ya finalizado, con un rect¨¢ngulo de 1.600 metros cuadrados y 550 asientos. A las afueras de Jerez nos encontramos con Garrapilos, el cuarto y ¨²ltimo de los escenarios.
Ortiz respira tranquilo cuando dice que la financiaci¨®n est¨¢ 'comprometida y asegurada', pero no ha sido f¨¢cil conseguir la velocidad de crucero en todas las infraestructuras de las que depende el ¨¦xito de los Juegos Ecuestres Mundiales. Los retrasos en las subvenciones provocaron m¨¢s de un enfrentamiento el a?o pasado entre el Ayuntamiento local y los gobiernos auton¨®mico y central. Finalmente, todas las administraciones han participado en la financiaci¨®n del acontecimiento.
Con el paisaje ya esbozado y tiempo suficiente para rematarlo, el director de Jerez 2002 est¨¢ inmerso ahora en la compleja tarea de tener a punto los proyectos log¨ªsticos y deportivos. 'Son siete disciplinas, siete campeonatos del mundo, y no es f¨¢cil la organizaci¨®n de la competici¨®n', confiesa.
Las cifras del evento
Los Juegos Ecuestres de Jerez ser¨¢n un acontecimiento deportivo y tur¨ªstico casi a partes iguales. Se calcula que durante los 12 d¨ªas de competici¨®n, del 10 al 22 de septiembre, pasar¨¢n por la ciudad y su entorno alrededor de 300.000 personas. El n¨²mero de periodistas acreditados estar¨¢ por encima de los 1.000, cifra que garantiza la cobertura informativa. La venta de entradas es otro term¨®metro que habla por s¨ª solo: ya han entrado en taquilla m¨¢s de 360.000 euros. Hasta el momento, el 99% de los compradores son extranjeros, una cuesti¨®n que no parece preocupar en demas¨ªa a los organizadores, que conf¨ªan en que el p¨²blico nacional responda cuando se acerque m¨¢s la fecha. El alojamiento de los visitantes tampoco quita el sue?o en una ciudad que asiste estos d¨ªas a la construcci¨®n de seis nuevos establecimientos hoteleros con los que completar una oferta de casi 10.000 plazas de todas las categor¨ªas en un radio de 25 kil¨®metros, y otras 50.000 en localidades situadas a menos de una hora de la sede. Los juegos tambi¨¦n tienen su mascota. Fino, un caballo alado dise?ado por Antonio Esquivias, ha estado presente en todos los acontecimientos de relevancia relacionados con el caballo que se han celebrado en los ¨²ltimos meses. Campa?as publicitarias y una importante presencia en publicaciones especializadas han movido el nombre de Jerez 2002 en el exterior.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.