Una investigaci¨®n muestra los graves da?os que el '¨¦xtasis' provoca en el cerebro

Pamplona Metabolitos t¨®xicos de origen hep¨¢tico producidos por el consumo de ¨¦xtasis provocan la destrucci¨®n en el cerebro de una gran cantidad de neuronas que sintetizan la serotonina, lo que genera graves alteraciones en el sistema nervioso y causa efectos a largo plazo de gravedad a¨²n desconocida. La investigaci¨®n, realizada en los ¨²ltimos tres a?os por la investigadora de la Universidad de Navarra Isabel Herv¨ªas, confirma los efectos neurot¨®xicos de esta anfetamina, conocida como MDMA (¨¦xtasis), en el sistema nervioso de animales de laboratorio.

En su estudio, la investigadora administr¨® por v¨ªa intraperitoneal dosis de ¨¦xtasis puro de 15 miligramos/kilo, procedentes de alijos policiales, a ratas y ratones albinos y comprob¨® que la droga se metaboliza en el h¨ªgado en forma de metabolitos t¨®xicos que alcanzan el cerebro generando una fuerte destrucci¨®n de las neuronas que sintetizan la serotonina, un neurotransmisor esencial del sistema nervioso central implicado en los procesos del sue?o, el apetito, la regulaci¨®n del estado de ¨¢nimo, la memoria y el aprendizaje, la depresi¨®n o la ansiedad, entre otros.

'La neurotoxicidad del ¨¦xtasis en los seres humanos es un hecho reconocido y la investigaci¨®n se ha centrado en conocer por qu¨¦ se producen esos trastornos neuropsiqui¨¢tricos que empiezan a manifestarse en los consumidores m¨¢s antiguos de esta droga', subraya Hervias.

Dosis de ¨¦xtasis administradas directamente en el cerebro de los animales de laboratorio no les provoc¨® los mismos da?os y la investigaci¨®n permiti¨® descartar desequilibrios energ¨¦ticos como causa de la destrucci¨®n de las neuronas. Herv¨ªas contin¨²a investigando la relaci¨®n que tiene la liberaci¨®n de dopamina provocada por esta droga en el da?o del sistema nervioso.

Hipotermia

La tesis doctoral de Hervi¨¢s, dirigida por Berta Lasheras y Norberto Aguirre, profesores del departamento de Farmacolog¨ªa de la Universidad de Navarra, ha permitido constatar, asimismo, que si las ratas y ratones son sometidos a un estado de hipotermia, el ¨¦xtasis administrado en ellos no provoca da?os.

En condiciones normales, y partiendo de una temperatura basal de 37 grados, ratas y ratones drogados con ¨¦xtasis alcanzaron temperaturas de hasta 42 grados y mantuvieron estados de entre 42 y 39 grados en las siguientes cinco horas.

'El fuerte golpe de calor es una de las consecuencias comprobadas entre los consumidores humanos', subraya Herv¨ªas, 'y ello nos lleva a seguir analizando la relaci¨®n entre temperatura corporal y neurotoxicidad y el papel que juega en la destrucci¨®n de las neuronas serotonin¨¦rgicas', a?ade la investigadora.

De hecho, existen discotecas en cuyo interior se consume ¨¦xtasis que han habilitado salas especialmente refrigeradas para que se relajen sus clientes.

Herv¨ªas se muestra muy cauta a la hora de trasladar los resultados de su investigaci¨®n al terreno del consumo humano. 'Estudios de neuroimagen han observado en humanos d¨¦ficit neurops¨ªquicos vistos ya en animales de experimentaci¨®n, lo que es un indicio de vulnerabilidad a los efectos de esta anfetamina', subraya.

Consumidores habituales de ¨¦xtasis padecen ataques de p¨¢nico, ansiedad, trastornos de sue?o y problemas de memoria y los cuadros cl¨ªnicos que presentan incluyen hipertensi¨®n arterial, coagulaci¨®n intravascular, insuficiencia renal, cuadros de hepatotoxicidad y espasticidad muscular.

Cantidades letales

Las dificultades para discernir los efectos puros del ¨¦xtasis en los humanos ha radicado hasta ahora en el policonsumo de estupefacientes y en la variedad de composici¨®n de los comprimidos que el consumidor ingiere, que presentan m¨²ltiples proporciones de esta droga mezclada con lactosa, anfetaminas, cafe¨ªna y otras sustancias en cantidades que han llegado a ser incluso letales en casos de fallecimiento por fibrilaci¨®n ventricular o hemorragias intracraneales.