El otro Fara¨®n de Camas

El Betis de los ¨²ltimos dos a?os no se entender¨ªa sin ¨¦l. Eclipsado en parte por el desparpajo de Joaqu¨ªn y la irrupci¨®n del joven Dani, Jes¨²s Capit¨¢n Prada, Capi, sigue disfrutando de la fervorosa admiraci¨®n que le profesan los aficionados y sus compa?eros.

Buena persona. ?ste es el calificativo en el que coinciden todos para definir a este futbolista de 25 a?os que, desde hace dos temporadas, deslumbra como uno de los m¨¢ximos exponentes de eso que se vino a llamar la escuela sevillana. Un estilo que se resume en el gusto por los detalles t¨¦cnicos y el juego preciosista en la mediapunta. Eso y una encomiable capacidad de trabajo le han hecho fijo en el exitoso Betis de Juande Ramos.

Capi (Camas, Sevilla, 1977) es el prototipo de jugador de la casa por el que muchos t¨¦cnicos escaldados ahora suspiran. Alrededor de ¨¦l se ha ido forjando toda un quinta de j¨®venes futbolistas de los escalafones inferiores que contribuyeron a sacar al Betis del agujero de la Segunda Divisi¨®n cuando las estrellas se apagaron y que este curso, a poco que se d¨¦ bien, llevar¨¢n al Betis a Europa.

Pero no todo ha sido una dulce traves¨ªa. Antes de conocer la gloria, Capi pas¨® por todo tipo de avatares. Tras tres temporadas en el filial b¨¦tico, en el que form¨® una productiva delantera con Diego Trist¨¢n, fue cedido al Xerez y despu¨¦s al Granada (1999-2000), equipo en el que dej¨® huella. Capi fue sacado a hombros del estadio de Los C¨¢rmenes en agradecimiento a su esfuerzo para que el hist¨®rico Granada abandonase la Tercera Divisi¨®n.

Al Fara¨®n de Camas, nombre art¨ªstico del torero Curro Romero que el locutor del Betis ya adjudica a Capi al cantar la alineaci¨®n antes de cada partido, le empez¨® a sonre¨ªr la suerte. La llegada de Fernando V¨¢zquez en el verano de 2000 fue determinante. V¨¢zquez evit¨® en el ¨²ltimo momento que fuese cedido y se lo llev¨® a realizar la pretemporada. Capi le correspondi¨® con creces, como ha hecho tambi¨¦n con Juande Ramos, para quien es una pieza imprescindible.

Su brillante progresi¨®n no ha pasado inadvertida. El Deportivo y el Barcelona se han interesado por ¨¦l, pero Capi, con contrato hasta junio de 2006 y una cl¨¢usula de rescisi¨®n de 60 millones de euros, se siente feliz en Sevilla y en su Betis. Hogare?o, muy apegado a su familia y con planes de boda con la que es su novia desde hace seis a?os, no se plantea, por el momento, dejar su pueblo ni mucho menos al Betis ahora que el sue?o europeo est¨¢ al alcance.

Su otro sue?o es jugar en la selecci¨®n espa?ola. Y los ¨ªntimos de Jos¨¦ Antonio Camacho sostienen que lo cumplir¨¢ hoy. El seleccionador facilitar¨¢ la lista de convocados para el partido amistoso que Espa?a jugar¨¢ contra Holanda el d¨ªa 27. Capi prefiere no darlo por seguro. Aun as¨ª, no duda en recordar entre risas un an¨¦cdota premonitoria, de su primer y hasta el momento ¨²nico encuentro con Camacho. 'Hace a?os, estaba esperando a un amigo en un cruce de Camas cuando par¨® un coche y el conductor me pregunt¨® c¨®mo llegar a Valencina. Era Camacho, que entonces entrenaba al Sevilla...'. Es probable que uno de estos d¨ªas Capi pueda comentarle a Camacho ese episodio en persona.