Con Marcos Alonso, tampoco
El Zaragoza estrena t¨¦cnico ante el Valladolid, pero sigue sin ver la luz
Ni con cambio de sistema ni con nuevo entrenador. Nada. Las constantes vitales del Zaragoza en esta Liga van cada vez a menos y su estado es cr¨ªtico. En un partido que se consideraba una final, por la trascendencia que adquieren los puntos en casa en este ¨²ltimo tramo de la temporada, el conjunto aragon¨¦s fue incapaz de superar al Valladolid. Y eso que al cuadro pucelano ni le iba ni le ven¨ªa nada en el envite.
Marcos Alonso apel¨® a la calidad en su alineaci¨®n para tratar de llevarse los tres puntos. Jugadores como Juanele o Galletti camparon a sus anchas en un esfuerzo por retener el bal¨®n y, a partir de ah¨ª, crear peligro mediante conexiones con Milosevic. Pero la f¨®rmula no dio resultado y tuvo como consecuencia un centro del campo desequilibrado y reacio a la hora de defenderse.
ZARAGOZA 0| VALLADOLID 0
Zaragoza: La¨ªnez; Pablo, C¨¦sar, Rebosio, Esquerdinha (Bilic, m. 84); Acu?a; Jos¨¦ Ignacio, Vellisca; Juanele (Corona, m. 69), Galletti (Drulic, m. 76); y Milosevic. Valladolid: Ricardo; Torres G¨®mez, Caminero (Harold Lozano, m. 89), Pe?a, Marcos; Jes¨²s, Mario; Fernando Sales, Fernando, Luis Garc¨ªa; y Tote (?scar, m.76). ?rbitro: Puentes Leira. Amonest¨® a Pablo, C¨¦sar, Jos¨¦ Ignacio, Marcos, Jes¨²s, Luis Garc¨ªa y ?scar. Unos 20.000 espectadores en La Romareda
Ante esta endeblez en el centro del campo, el Valladolid se encontr¨® casi con la obligaci¨®n de triangular. A base de tocar la pelota, fue arrinconando al Zaragoza, cuyo tembleque se hac¨ªa patente cada vez que los vallisoletanos rondaban su ¨¢rea. Fernando Sales y Luis Garc¨ªa abrieron muy bien el campo y fueron una amenaza constante para la espalda de la defensa aragonesa. Al cuarto de hora del partido, La¨ªnez ya hab¨ªa suspirado tres veces. Sobre todo, en una media vuelta de Tote, cuyo disparo detuvo con alg¨²n problema.
El encuentro resultaba entretenido. Con el Zaragoza acongojado y el Valladolid relajado, cualquier ocasi¨®n era sin¨®nimo de gol. Los de Marcos encontraron un fil¨®n en el juego a¨¦reo y antes del descanso gozaron de tres ocasiones, todas ellas en testarazos que se perdieron muy cerca de la porter¨ªa defendida por Ricardo. Sin embargo, estos fueron los ¨²nicos momentos en los que se vio verdaderamente decidido a un equipo que no logra soltarse las ataduras impuestas por su grave clasificaci¨®n.
Y es que, tras la reanudaci¨®n, el Zaragoza dio muestras de ser un cuadro hundido. Sin un jugador capaz de echarse el equipo a las espaldas y tirar del carro, deambul¨® por el campo con los brazos ca¨ªdos, como despidi¨¦ndose de la Primera Divisi¨®n. Tampoco pudo ayudarles Marcos pese a intentarlo. No fue capaz de hacer reaccionar a los suyos. Acab¨® el partido con Drulic, Bilic y Milosevic, los tres delanteros centro del equipo, en el rect¨¢ngulo, pero el problema no est¨¢ en la disposici¨®n t¨¢ctica, sino en la actitud de los jugadores.
Rendidos, cabizbajos y sin poder de reacci¨®n, los zaragocistas estuvieron m¨¢s cerca de la derrota que de otra cosa. Si ¨¦sta no se concret¨® fue porque el Valladolid jug¨® a medio gas. Aun as¨ª, se pudieron ver algunos destellos de sus jugadores del ataque y una estupenda ubicaci¨®n defensiva.
Mucho tendr¨¢ que trabajar Marcos si quiere recuperar al Zaragoza, ya que todav¨ªa no se vislumbra la luz al final del t¨²nel. Desde luego, por lo visto ayer, le queda demasiada tarea para tan pocas jornadas.
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