El Instituto de Investigaciones Biom¨¦dicas pierde proyecci¨®n por falta de apoyo ministerial

El Instituto de Investigaciones Biom¨¦dicas de Barcelona (IRBB), concebido hace poco m¨¢s de un a?o como un gran centro de excelencia capaz de codearse con la ¨¦lite internacional, deber¨¢ conformarse por el momento con unos objetivos mucho m¨¢s modestos. La falta de concreci¨®n en la ayuda prometida por el Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa, as¨ª como disputas internas en el seno de la Universidad de Barcelona -de la que depende el centro- sobre el modelo que adoptar, han obligado a replantear el proyecto a la baja, aunque 'manteniendo su singularidad'.

La creaci¨®n del IRBB fue anunciada como una 'magn¨ªfica oportunidad' para que Espa?a pudiera disponer en un plazo razonable de centros de excelencia en el ¨¢rea biom¨¦dica 'capaces de competir' con la ¨¦lite internacional. Su puesta en marcha en el entorno del Parque Cient¨ªfico de Barcelona (PCB) recibi¨® el apoyo p¨²blico del Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa, por boca de su titular, Anna Birul¨¦s, y del Gobierno catal¨¢n.

Al carro del proyecto, cuyos costes de mantenimiento se estimaron entonces en 15 millones de euros anuales (unos 2.500 millones de pesetas), se sumaron Joan Massagu¨¦ en calidad de asesor cient¨ªfico y Juan Carlos Izpis¨²a como primer investigador estrella. El primero, director del programa de biolog¨ªa celular en el Memorial Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York, es uno de los investigadores m¨¢s citados en el mundo en el ¨¢rea biom¨¦dica; Izpis¨²a, del Instituto Salk de la Joya (California), ha renunciado.

La realidad, a tenor de lo expuesto en la reuni¨®n del patronato del PCB celebrada recientemente, en la que se abord¨® la constituci¨®n formal del IRBB y se nombr¨® nuevo equipo directivo, va a ser muy distinta. De los 15 millones de euros previstos, de momento s¨®lo hay uno garantizado, que aportar¨¢ el Departamento de Investigaciones y Universidades. El ministerio todav¨ªa no ha comprometido, despu¨¦s de un a?o de conversaciones, cantidad alguna pese a sus promesas iniciales.

El centro carece a¨²n de entidad jur¨ªdica, aspecto que dificulta enormemente la llegada de dinero, seg¨²n las fuentes consultadas. Como guinda, la excesiva dilaci¨®n de su puesta en marcha ha obligado a congelar los fichajes de investigadores internacionales. Joan Tugores, rector de la UB, admite que la situaci¨®n obligar¨¢ a arrancar con 'una econom¨ªa de m¨ªnimos'.

Su director, Joan Guinovart, ratificado en el cargo esta misma semana, confiesa que el IRBB no podr¨¢ aspirar 'de partida' a los planteamientos iniciales, pero dice que 'las caracter¨ªsticas de singularidad' que defin¨ªan el proyecto se mantienen intactas.

Esa singularidad, que debe permitir la convivencia de investigadores procedentes de la propia UB y del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas) y de fichajes captados en el mercado cient¨ªfico internacional, es la que habilitar¨ªa al centro para 'seguir aspirando a la excelencia', siempre y cuando el dinero necesario llegara a sus arcas.

Joan Massagu¨¦, uno de los buques insignia del proyecto, condiciona su continuidad a la ambici¨®n del centro. 'Durante una primera fase', afirm¨®, 'se ha completado un proceso de asesoramiento en el dise?o del IRBB seg¨²n criterios de singularidad, contenido cient¨ªfico, estructura institucional y planificaci¨®n estrat¨¦gica'. Esta fase ha culminado con un plan estrat¨¦gico que ha sido bien recibido por todas las partes, afirma el investigador.

El plan, redactado tras la renuncia de Juan Carlos Izpis¨²a Belmonte a incorporarse al centro, prev¨¦ un presupuesto m¨ªnimo inicial de 10 millones de euros anuales, cantidad que podr¨ªa reducirse a seis millones en una primera fase. El dinero deber¨ªa ser aportado a partes iguales por El Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa y el Gobierno catal¨¢n. Adem¨¢s, prev¨¦ una entidad jur¨ªdica propia. Con estas condiciones, asegura Massagu¨¦, el IRBB tendr¨ªa los medios necesarios para aspirar a 'alta categor¨ªa cient¨ªfica'. Sin ellos, 'forzosamente' deber¨¢ conformarse con un horizonte menos ambicioso.

El Gobierno catal¨¢n argumenta que hay 'razones' para que el ministerio concrete su ayuda. Para ello ser¨ªa necesario 'un cambio de actitud de la UB' con respecto al centro y dar con una f¨®rmula jur¨ªdica adecuada que permita el trasvase de dinero desde el ministerio al IRBB. En principio, en el ministerio se pensaba en un centro independiente de la UB, y ahora se ha convertido en uno de car¨¢cter mixto.