Duro y a la cabeza
El pisot¨®n de C¨¢ceres en la nuca de Rivaldo, otro aprieto para Competici¨®n
El romanticismo es cosa del pasado en el Celta, que cansado de enredarse en el adorno ha elevado la dosis de contundencia en su f¨²tbol. Pero no todos sus jugadores han interpretado el mensaje con la misma claridad; alguno incluso ha confundido el vigor con la violencia, y se entreg¨® el s¨¢bado a la sobredosis para detener al Bar?a.
M¨¢s que al Bar?a, a quien intentaron frenar algunos jugadores celestes por la v¨ªa de apremio fue a sus principales figuras, con especial atenci¨®n a las muy castigadas piernas de Rivaldo. En alg¨²n caso la amenaza sobrepas¨® la cintura para alcanzar incluso la cabeza, en un lance captado por las c¨¢maras de televisi¨®n que avergonzar¨¢ a su protagonista, el central argentino Fernando C¨¢ceres.
El suceso comenz¨® con Rivaldo y C¨¢ceres disputando la pelota en carrera, sigui¨® con la ca¨ªda del brasile?o al piso y concluy¨® con la alevosa planta del pie del jugador del Celta en un lugar indeterminado entre la cabeza y la nuca del azulgrana. Como quien tropieza, C¨¢ceres plant¨® sus tacos. El ¨¢rbitro no vio ni falta, quiz¨¢s por la tibia protesta de un delantero acostumbrado a marcajes antediluvianos.
Dej¨® la acci¨®n de C¨¢ceres el mismo desagradable sabor de ocurrencias similares perpetradas por defensas sin argumentos, como el a¨²n reciente zapateado de Ayala sobre la espalda de Simao, o la severa persecuci¨®n de Albelda a los tobillos de Zidane con que se inici¨® la temporada. La antideportiva acci¨®n del central y alguna otra protagonizada por compa?eros de C¨¢ceres afearon el partido del Celta, equipo que le ech¨® m¨¢s f¨ªsico que f¨²tbol al decisivo partido del s¨¢bado. Los tacos de las botas c¨¦lticas estar¨¢n todav¨ªa a estas horas grabados en las piernas de muchos de los futbolistas del Barcelona.
Una menci¨®n especial merece Vagner, un tipo que tiene a Bala¨ªdos acostumbrado a sus excentricidades. Llevaba un rato el brasile?o pidiendo el cambio, pero antes de irse le dedic¨® un homenaje a las espinilleras de Rivaldo. Pudo costarle la tarjeta roja, pero zanj¨® el ¨¢rbitro la situaci¨®n con una liviana amarilla que permiti¨® que se consumara la sustituci¨®n.
Pese al rudo tono que le dio el Celta al encuentro, el parte de bajas barcelonista tuvo m¨¢s que ver con la mala fortuna. A Puyol le apart¨® del partido un problema muscular, y Rivaldo comenz¨® a caminar con dificultad despu¨¦s de una impecable entrada de Sergio. Pero la cojera que acompa?¨® al brasile?o hasta el final del partido ilustr¨® un partido demasiado violento.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.