La directiva fantasma
Las 'pyme' europeas de 'software' ignoran los beneficios de patentar sus programas
La directiva 2002/0047 est¨¢ pensada, dice la Comisi¨®n Europea, para conseguir que la industria del software de la zona euro sea tan competitiva como la de EE UU. Pero esta directiva, que plantea que los programas deben ser patentables, ha suscitado las dudas de pyme europeas que creen que las dificultades que supone patentar puede empeorar su competividad frente a las multinacionales.
El Gobierno estadounidense ha reconocido, en varios informes sobre competitividad, que el mercado del software es uno de los que m¨¢s han contribuido al crecimiento del empleo y la productividad del pa¨ªs en los noventa con, adem¨¢s, menores costes, ya que desarrollar programas es relativamente barato: Microsoft, la mayor compa?¨ªa de software del mundo, invierte cada a?o 5.000 millones de d¨®lares en I+D, pero aun as¨ª dispone de 3.000 millones en caja porque lo que hace es, b¨¢sicamente, gastar en cerebros que dise?an millones de l¨ªneas de c¨®digo inform¨¢tico al a?o.
En Estados Unidos, los programas de software est¨¢n protegidos por patentes, que son peque?os monopolios que se otorgan a las compa?¨ªas que los dise?an para explotar esa invenci¨®n. Y ¨¦ste es un buen negocio para algunas multinacionales. IBM ha obtenido en 2001 m¨¢s de 1.500 millones de d¨®lares por ventas y transferencias de propiedad intelectual, e ingresos por licencias y royalties.
En Europa, en cambio, el dise?o de un c¨®digo inform¨¢tico es casi arte. Es equiparable al de una obra literaria o musical, ya que est¨¢ protegido por los derechos de autor, lo que significa que el creador puede reclamar derechos sobre la reproducci¨®n, transformaci¨®n y distribuci¨®n de sus obras, desde el mismo momento de su creaci¨®n y durante toda su vida. Esta protecci¨®n parec¨ªa suficiente. 'Nunca hemos tenido problemas de falta de protecci¨®n con nuestros programas', dice Pablo Olabarr¨ªa, miembro de la asesor¨ªa jur¨ªdica de Meta4. ?sta es, probablemente, la mayor compa?¨ªa de software de Espa?a -ingres¨® 52,3 millones de euros el pasado a?o- y cotiza en el Nasdaq Europe. Pero Olabarr¨ªa s¨ª considera que una patente ofrecer¨ªa mayor seguridad a la compa?¨ªa, 'porque el programa ser¨ªa m¨¢s defendible y, adem¨¢s, podr¨ªamos traspasarlo o venderlo, como un activo m¨¢s de la empresa'.
?stas son algunas de las razones por las que la Comisi¨®n Europea ha presentado una propuesta de directiva para que las invenciones en las aplicaciones de software sean tan patentables como lo son los inventos en el sector de la electr¨®nica, la ingenier¨ªa, la biotecnolog¨ªa o muchas otras.
Multinacionales a favor
Las grandes compa?¨ªas asociadas en BSA (Business Software Alliance, entre las que se encuentran Microsoft, Apple, Adobe o EDS) se han mostrado p¨²blicamente partidarias de esta medida, que permitir¨¢ la armonizaci¨®n de las pol¨ªticas nacionales. En Espa?a, la patronal de compa?¨ªas tecnol¨®gicas Sedisi est¨¢ tambi¨¦n a favor de la directiva. 'Esta medida servir¨¢ para poner a disposici¨®n de las medianas y peque?as empresas de software un sistema de protecci¨®n de sus innovaciones o invenciones t¨¦cnicas', asegura Alfonso Garc¨ªa Campo, asesor jur¨ªdico de Sedisi. 'La seguridad y protecci¨®n que ofrece la patente actuar¨¢ como un incentivo para que las empresas del sector de programas inform¨¢ticos inviertan en su desarrollo e innovaci¨®n, y puedan comercializar sus derechos mediante el otorgamiento de contratos de licencia', contin¨²a.
Pero las pyme europeas no parecen conocer las consecuencias de esta directiva. La Comisi¨®n Europea, de hecho, puso en marcha una consulta p¨²blica antes de realizar el proyecto, y de las 1.433 respuestas que recibi¨®, s¨®lo una treintena era de las pyme que pretendr¨ªa proteger; la mayor¨ªa de las respuestas fueron, adem¨¢s, contrarias a las patentes (v¨¦ase cuadro). Las pyme espa?olas est¨¢n a¨²n menos concienciadas ante una ley que modificar¨¢ su modelo de negocio en los pr¨®ximos a?os. Entre las cinco consultadas por EL PA?S, s¨®lo una, Microdelta, ten¨ªa formada una opini¨®n al respecto. El resto no sab¨ªa qu¨¦ pod¨ªa significar la directiva, ni qu¨¦ consecuencias pod¨ªa tener para ellas, aparte de un mayor coste econ¨®mico para la obtenci¨®n de la patente, y la investigaci¨®n de otras antes de sacar al mercado sus programas. 'Patentar siempre es caro y complejo', confirma Jos¨¦ Antonio Carnevali, del bufete Cremades & Calvo Sotelo. Olabarr¨ªa se atreve a calcular un coste de unos 3.000 euros en solicitar la patente europea, otros 1.750 euros en el examen, 1.650 euros para la concesi¨®n, y entre 6.000 y 12.000 euros para las traducciones. 'Un excelente negocio para los abogados, pero no comprendo qu¨¦ me aportar¨¢ a m¨ª', explica Jorge Huerta, director general de Microdelta.
Esta pyme, con sede en San Sebasti¨¢n de los Reyes (Madrid), ha dise?ado una aplicaci¨®n inform¨¢tica para el control de env¨ªos de marketing por correo electr¨®nico. Huerta explica que el software es casi una materia viva, mutante; su compa?¨ªa transforma las l¨ªneas de c¨®digo de sus programas al menos una vez a la semana. As¨ª que la primera duda, que la directiva no aclara, es si deber¨¢ registrar cada modificaci¨®n que realice. 'Podemos dedicarnos a hacer programas o a registrarlos, pero no a las dos cosas', dice. Otro problema para ¨¦l es que no comprende la motivaci¨®n de la patente, ya que, en software, innovar es condici¨®n sine qua non para hacer negocios, ya que es un mundo en que hay estudiantes que son capaces de crear programas que ponen en peligro industrias enteras (como hizo Napster con las discogr¨¢ficas). 'Yo modifico mis programas porque tengo que hacerlo. Patentarlos no me animar¨¢ m¨¢s', concluye.
Con Huerta est¨¢n miles de estudiantes de inform¨¢tica y desarrolladores de software libre, una comunidad que crea y modifica programas inform¨¢ticos cediendo sus c¨®digo fuente -las instrucciones de construcci¨®n- y, por tanto, sus derechos de autor. Las compa?¨ªas que realizan negocios en este ¨¢mbito no cobran nada por sus programas, aunque s¨ª por su instalaci¨®n y mantenimiento. Jos¨¦ Mar¨ªa Olmo, presidente de la compa?¨ªa de software libre ?ndago, asegura que esta directiva 'a?adir¨ªa casi un 30% m¨¢s de trabajo en registrar y comprobar los registros, y yo ya invierto un tercio de mis ingresos en I+D'. La pol¨¦mica sigue en marcha ya que, aunque la directiva a¨²n debe ser aprobada en cada pa¨ªs -Reino Unido y Alemania est¨¢n a favor, Francia en contra, y Espa?a a¨²n no se ha pronunciado-, las mayores posibilidades de las multinacionales para patentar antes que las pyme preocupan cada vez m¨¢s. 'En la patente, el que llega primero es el inventor', confirma Carnevali.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.