Chirac prepara un 'Gobierno electoral' para conseguir la mayor¨ªa en las legislativas de junio

Jacques Chirac nombrar¨¢ la semana pr¨®xima un 'Gobierno electoral', encargado de ganar las legislativas de junio y arrebatar as¨ª a la izquierda el control de la Asamblea Nacional. El presidente y sus colaboradores excluyen cualquier compromiso con el 'frente anti-Le Pen' m¨¢s all¨¢ del domingo pr¨®ximo, confiados en una victoria c¨®moda en la segunda vuelta de las presidenciales y en rematarlo con un triunfo en las legislativas. 'Yo no soy de los que comparan Alemania de 1932 con Francia de 2002', a?ade Nicol¨¢s Sarkozy, uno de los candidatos a ocupar el cargo de primer ministro, en una operaci¨®n orientada a recuperar a parte de los electores que han trasvasado su voto a la extrema derecha.

'No soy de los que insultan al 20% de los votantes', argumenta Sarkozy en sus intervenciones de campa?a. El diputado y alcalde de Neuilly distingue entre los dirigentes del Frente Nacional y sus electores: el voto a Le Pen 'refleja la exasperaci¨®n de los que est¨¢n hartos de que no se les escuche ni se les atienda' y 'no se les puede tratar de fascistas, ni de peste negra'. A juicio del primer ministrable, en la primera vuelta no s¨®lo fue derrotado Lionel Jospin, sino que tanto la izquierda como la derecha recibieron el mensaje de que han minimizado durante demasiado tiempo la exasperaci¨®n de los electores con la 'falta de acci¨®n' de los gobiernos.

Un voto del 80% a favor de Chirac ser¨ªa interpretado por ¨¦ste como un voto de confianza para 'salvaguardar y hacer respetar los valores de la Rep¨²blica' y no para cambiar su 'visi¨®n de Francia'. De modo que, tan pronto como Jospin presente su dimisi¨®n, Chirac nombrar¨¢ al nuevo jefe de gobierno, con el encargo de dirigir la campa?a legislativa.

En las filas de Uni¨®n por la Rep¨²blica (RPR) -el partido m¨¢s af¨ªn al presidente- se describe a Sarkozy como un 'hombre de guerra', una persona cuya elecci¨®n implicar¨ªa la firme decisi¨®n de ir a por todas. Otros candidatos al cargo recuerdan que Sarkozy significar¨ªa entregar el poder a un antiguo adversario del propio Chirac, que escogi¨® en el pasado el campo de otro conservador, ?douard Balladur, en el duelo interno que se produjo en la derecha durante las elecciones presidenciales de 1995.

Chirac y Sarkozy multiplican sus declaraciones en contra de mantener el 'frente republicano' m¨¢s all¨¢ del domingo. Ya est¨¢ conseguido el acuerdo para presentar candidaturas conjuntas de derecha y de centro en el 90% de las circunscripciones de Francia. 'Hasta el domingo, todos estamos detr¨¢s del ¨²nico candidato republicano a la presidencia [Chirac]. Inmediatamente despu¨¦s, ser¨¢ el tiempo de proponer a los franceses una alternativa para poner en pr¨¢ctica el programa de Jacques Chirac', puntualiza Sarkozy. El propio Chirac 'se implicar¨¢ a fondo en la campa?a de las elecciones legislativas', confirma Mich¨¨lle Alliot-Marie, la actual presidenta de Uni¨®n por la Rep¨²blica (RPR).

Sin una mayor¨ªa parlamentaria, los poderes del presidente pueden verse mermados de nuevo. Un buen argumento frente a una extrema derecha tan potente. Con los partidos socialista y comunista gravemente afectados por las derrotas de sus candidatos respectivos, el 21 de abril, Chirac es el beneficiario de una carambola que le permite construirse una s¨®lida mayor¨ªa parlamentaria y obtener el control de todo el poder, pese a haber logrado menos del 20% de los votos en la primera vuelta de las presidenciales.

Antes de que comience la nueva campa?a, Chirac constituir¨¢ un Consejo Nacional de Seguridad e incluir¨¢ en el nuevo Gobierno un ministro de Seguridad, con el encargo de unificar bajo su mando las fuerzas policiales y la Gendarmer¨ªa. Las rebajas de impuestos prometidas por Chirac, las leyes de programaci¨®n para la Justicia y un proyecto de descentralizaci¨®n de las competencias gubernamentales vendr¨¢n despu¨¦s, seg¨²n ha explicado Roselyne Bachelot, portavoz de campa?a de Chirac. Todo ello en el supuesto de que las urnas no reserven el domingo pr¨®ximo otra sorpresa may¨²scula, para la que ning¨²n sector pol¨ªtico ni social se encuentra preparado en Francia, al margen de la extrema derecha.

El nuevo Gobierno conducir¨¢ la preparaci¨®n de las elecciones en el interregno en que est¨¢ disuelta la Asamblea Nacional. Despu¨¦s de las legislativas, la nueva C¨¢mara tendr¨¢ la posibilidad de derribar al Gobierno designado por Chirac si la mayor¨ªa resultante no fuera de su campo pol¨ªtico. Se trata, precisamente, de evitar que esto suceda, dando as¨ª 'coherencia' a todas las instituciones: presidencia de la Rep¨²blica, Gobierno y Asamblea Nacional. La derecha puede hacerse as¨ª con todo el poder.