Fotos
Cuando ya hemos guardado los trajes y los av¨ªos de flamenca nos suele llegar un sobre que abrimos con cierta precauci¨®n porque sabemos que contiene fotos de la Feria. Quieras que no es el testigo de ese de ese rito en el que participamos peri¨®dicamente y que nos puede traer tanta alegr¨ªa como desconsuelo.
As¨ª ocurre reci¨¦n terminada cada Feria de Abril; desde la primera vez que posamos ante la c¨¢mara fotogr¨¢fica con los volantes y las esperanzas abiertas de la juventud, durante muchas primaveras que pasan casi inadvertidamente, hasta que un d¨ªa nos sorprende el presente congelado, en el mismo lugar, con el mismo atuendo, la misma sonrisa y el tiempo acumulado que ilumina alguna que otra redondez y afila cada pliegue y cada arruga a plena luz.
En fotograf¨ªas como esas nos llega la actualidad de repente, saltada de sentir en sentir y arrastrando un pasado como profundas fueron las felicidades y los desgarros que lo recorrieron. Salvo alguna que otra, a quienes atraparon distra¨ªdas, el resto del grupo suele estar bastante bien; pero lo que es una misma, francamente, siempre parece que est¨¢ enfocada a mala idea, desde muy arriba o muy abajo, el peor perfil, con mala cara, como reflejada en el futuro, con varios a?os m¨¢s de los que recoge el DNI. No comprendo c¨®mo, mir¨¢ndonos al espejo cada d¨ªa, siempre nos pensamos m¨¢s j¨®venes de lo que salimos en las fotos.
La verdad es que el disgusto es corto y no suele llegar a tragedia. Al presente lo asumimos m¨¢s r¨¢pido cada a?o porque vivimos muy deprisa, porque vamos adquiriendo pr¨¢ctica con el tiempo, porque es lo m¨¢s inteligente que se puede hacer y porque cada vez quedan menos mujeres cuya finalidad vital sea fascinar a los hombres.
No s¨¦ lo que sentir¨¢n los hombres frente a las fotograf¨ªas de la Feria. Nunca les he o¨ªdo comentar si se gustan m¨¢s o menos, pero me da la sensaci¨®n de que, en general, eso no les importa demasiado; como si les diera igual unos a?os m¨¢s que menos. Me parece que sus preocupaciones, m¨¢s que por la arruga y la est¨¦tica, van por otro lado. O por otros lados.
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