M¨¢laga no quiere a sus actores

Se aproxima el final del V Festival de Cine Espa?ol de M¨¢laga y, seguramente ya, la jet-set malague?a, o mejor dicho, los aparentes ricachones, donde se incluyen senadores, diputados, banqueros y otras 'especies' que patentizan privilegiados lazos pol¨ªticos, tienen preparados sus elegantes esmoquin de alquiler, cuyas esposas o 'acompa?antes' mostrar¨¢n durante esta semana sus collares de perlas, anillos de oro, pendientes de rub¨ª y sus exuberantes abrigos de alg¨²n extra?o animal (aunque apriete el calor). Evidentemente, ir¨¢n perfumadas y con un grosor de varios cent¨ªmetros de crema y maquillaje que cubrir¨¢n sus pellejosos rostros. Otros, con no menor suerte, a pesar de su excesiva edad, aparecer¨¢n acompa?ados, adem¨¢s de su bast¨®n, de una atractiva y exorbitante mujer que lucir¨¢ todos sus atractivos y mucho m¨¢s gracias a un m¨¢s que generoso escote; de seguro, sabr¨¢ de cualquier cosa menos de cine.

No quiero ser cruel, pero esto m¨¢s que un festival de cine parece una derrochadora fiesta para estos personajes que, despu¨¦s de cada evento, asisten a una comilona de lujo donde se hartan de comer jam¨®n de pata negra y otros sabrosos manjares; manjares que estos ricachones, por muy ricos que sean, nunca en su pu?etera vida los han probado.

Mientras todo esto sucede, pagado por supuesto a costa de todos los malague?os, nosotros, los actores de M¨¢laga que formamos una excelente cantera, nos tenemos que quedar en la puerta del Teatro Cervantes viendo pasar a gente por una alfombra roja al estilo Pret a port¨¦, porque nadie se ha acordado de nosotros. No es por nada, pero M¨¢laga poco se acuerda y apoya a sus actores que comienzan; pero eso s¨ª, si luego de esta cantera surge alg¨²n Antonio Banderas o alguna Mar¨ªa Barranco, acudir¨¢ a ellos para que pongan su popularidad y m¨¦ritos al servicio de los malague?os, porque a alg¨²n pol¨ªtico le interese; pero, antes, que le zurzan. (V¨¦ase: Ram¨®n Salazar.)

En fin, fuera lo que fuese, como este a?o tampoco me van a invitar porque soy un actor de poca monta, intentar¨¦ hacer, igual que hice a?os anteriores, colarme dentro del teatro y de esas 'fiestas privadas' de inauguraci¨®n y clausura. Lo de colarme no lo hago porque tengo mucha cara, lo hago porque el festival de cine espa?ol se hace en M¨¢laga, y como dice los organizadores, el festival es por y para los malague?os, y yo... soy malague?o.