Blatter, contra las cuerdas
Mientras su rival electoral amenaza con llevarle a los tribunales por corrupci¨®n, el presidente de la FIFA viaja a Corea del Norte, lo que provoca la ira de su vecino del sur
'La FIFA est¨¢ gestionada como una dictadura y ya no es una organizaci¨®n decente y bien estructurada; ha sido reducida a una organizaci¨®n Blatter'. (...) 'El presidente ha hecho cuatro contratos de consultor¨ªa artificiales para pagar a personas que le hab¨ªan ayudado en el pasado'. (...) 'Su secretaria recibi¨® un Mercedes como coche de servicio'. (...) 'Blatter jam¨¢s revel¨® su remuneraci¨®n al Comit¨¦ Ejecutivo'.
La lectura de ¨¦stas y otras grav¨ªsimas acusaciones, recogidas en un amplio informe de 20 folios, por parte del suizo Michael Zen-Ruffinen, secretario general de la FIFA, ante el Comit¨¦ Ejecutivo de ese organismo, amenaza con da?ar de forma irreversible la imagen del tambi¨¦n suizo Joseph Blatter, presidente del m¨¢ximo ¨®rgano del f¨²tbol mundial, que se encuentra en pleno periodo de b¨²squeda de apoyos entre las diversas federaciones para ser reelegido en el cargo. 'Algunos de estos hechos constituyen un acto criminal en el C¨®digo Penal suizo', concluy¨® Zen-Ruffinen en su exposici¨®n.
Acusado de corrupto por el que es su mano derecha en la FIFA, criticado dur¨ªsimamente por el vicepresidente de ese mismo organismo, el surcoreano Chung Mong-joon, por haber acudido a reunirse con las autoridades pol¨ªticas y futbol¨ªsticas de Corea del Norte apenas un mes antes de que su vecino del sur, junto a Jap¨®n, albergue el Mundial, y aguantando la andanada del sueco Lennart Johansson, su hom¨®logo de la UEFA, que pidi¨® p¨²blicamente su dimisi¨®n inmediata, Joseph Blatter vive el momento m¨¢s azaroso de su mandato, golpeado como est¨¢ desde varios frentes.
'Limpiar la casa'
Zen-Ruffinen fue desglosando en su informe todos los casos de presuntas irregularidades cometidas por Blatter, en alguno de los cuales se relatan las cantidades percibidas por ciertas personas cercanas a la organizaci¨®n, hasta 50.000 d¨®lares (unos 55.000 euros), 'si las informaciones que facilitaban se correspond¨ªan a los objetivos del presidente'.
'Es el momento' dijo Zen-Ruffinen ante sus compa?eros de la ejecutiva, 'de que la FIFA limpie su casa por dentro y aclare los actos corruptos cometidos por el presidente, que ha ordenado pagos o los ha hecho directamente. No se trata de que Blatter haya sido comprado, sino que ¨¦l mismo estaba comprando'.
Tras la tormenta desatada por la filtraci¨®n a varios medios, y su posterior publicaci¨®n, del informe, Zen-Ruffinen, un ex ¨¢rbitro, intent¨® suavizar los hechos, por lo que ha precisado algunos detalles de lo publicado. Dice el secretario general que la conflictiva situaci¨®n por la que atraviesa la FIFA, que vive un periodo cr¨ªtico por la quiebra de ISL y la del grupo alem¨¢n Kirch -al que vendi¨® los derechos de televisi¨®n de los Mundiales de 2002 y 2006- responde a 'problemas estructurales' y no a un enfrentamiento 'personal' entre ¨¦l y Blatter.
Tras asegurar que la filtraci¨®n del informe se hizo sin su consentimiento, Zen-Ruffinen critic¨® el que se hayan 'falseado' los hechos y desvel¨® que su comparecencia ante la Comisi¨®n Ejecutiva se produjo 'por una solicitud formal del propio presidente'.
Una vez que se hizo p¨²blico el informe, Blatter reaccion¨® de inmediato y, adem¨¢s de se?alar que lo ocurrido entre los dos m¨¢ximos responsables de la FIFA no debe afectar al normal desarrollo del pr¨®ximo Mundial, rechaz¨® todas las acusaciones de corrupci¨®n y emplaz¨® a su segundo a 'trabajar m¨¢s y jugar menos a los detectives'.
Campa?a presidencial
Blatter se?al¨® tambi¨¦n que Zen-Ruffinen era utilizado por los componentes de la oposici¨®n hacia la carrera presidencial, y aludi¨® directamente a la UEFA, cuyo m¨¢ximo mandatario, Johansson, perdi¨® hace cuatro a?os la anterior batalla presidencial. 'El nombre de este juego se llama campa?a presidencial', sentenci¨®.
Y es que, imitando a su antecesor en el puesto, Joao Havelange, que acostumbraba a convocar elecciones a pocas fechas del inicio de cada Mundial, Blatter ha hecho lo propio. Sin embargo, Havelange jam¨¢s tuvo problemas. Nunca encontr¨® oposici¨®n, y su reelecci¨®n siempre acababa si¨¦ndolo por aclamaci¨®n. A Blatter, que accedi¨® a la presidencia en el verano de 1998, poco antes del Mundial de Francia, el plan se le ha torcido. De forma inesperada, el camerun¨¦s Isaa Hayatou, presidente de la Confederaci¨®n Africana de F¨²tbol, decidi¨® hace pocas fechas entrar en la batalla y anunci¨® la presentaci¨®n de su candidatura.
A 21 d¨ªas de esos comicios, a Blatter le llueven los palos desde varios frentes. Su visita a Corea del Norte, que ¨¦l calific¨® como 'respuesta a una invitaci¨®n' y que supone la primera de un miembro de la FIFA a ese pa¨ªs, ha levantado una enorme polvareda en Corea del Sur. As¨ª, Chung Moon-Joon, vicepresidente surcoreano de la FIFA, ha acusado a Blatter de hacer ese viaje 'para mendigar votos'. 'Nunca pens¨¦ que un presidente pudiera hacer esto', concluy¨® Moon-Joon, quien apoya al candidato rival de Blatter, Isaa Hayatou.
El ¨²ltimo en apuntarse a la batalla dial¨¦ctica ha sido Johansson, que a ra¨ªz de las acusaciones vertidas contra Blatter ha solicitado por primera vez de manera p¨²blica su 'dimisi¨®n inmediata, con el fin de restablecer la credibilidad de la FIFA. El testimonio de Zen-Ruffinen es claro y muy serio'. As¨ª las cosas, no resulta extra?o que Isaa Hayatou haya desvelado que los miembros africanos de la FIFA se reservan el derecho de acudir a la justicia.
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