Pasos adelante y atr¨¢s
El auto dictado el pasado d¨ªa 3 por el juez Garz¨®n sobre la red de financiaci¨®n del nacionalismo radical vinculado a ETA se ha cruzado de manera intempestiva con el debate en torno al anteproyecto de Ley de Partidos que el Gobierno acaba de enviar al Congreso para disolver Batasuna. Las conclusiones provisionales alcanzadas por el magistrado de la Audiencia Nacional a trav¨¦s de la v¨ªa penal llegan tan o m¨¢s lejos que las aspiraciones del Ejecutivo a trav¨¦s de la v¨ªa pol¨ªtica: 'En el estado actual de la causa no existe ninguna duda para el instructor de que Batasuna forma parte org¨¢nica de la estructura de la organizaci¨®n terrorista ETA-KAS-Ekin'. La diferencia entre ambos recorridos es s¨®lo jur¨ªdico-t¨¦cnica: mientras el Gobierno pretende desarrollar el segundo de los dos procedimientos previstos por el art¨ªculo 5 de la Ley de Partidos de 1978 para disolver una organizaci¨®n pol¨ªtica (haber incurrido en un il¨ªcito democr¨¢tico-constitucional), el juez Garz¨®n recurre al primer supuesto -el il¨ªcito penal- mencionado por ese mismo precepto: configurar una asociaci¨®n il¨ªcita tipificada en el C¨®digo Penal.
Dos d¨ªas despu¨¦s de que los partidos vascos democr¨¢ticos (nacionalistas o constitucionalistas) suscribieran una Declaraci¨®n c¨ªvica en defensa de la democracia, la libertad y el pluralismo en los municipios amenazados por la doble acci¨®n de ETA y de sus organizaciones de apoyo legales o alegales, los dirigentes del PNV reunidos en Pamplona el pasado s¨¢bado amenazaban con boicotear la aplicaci¨®n pr¨¢ctica de ese documento -un paso adelante y otro atr¨¢s- si las tentativas en curso de disolver Batasuna por la v¨ªa pol¨ªtica o por la v¨ªa penal no fuesen frenadas en seco. No les resultar¨¢ f¨¢cil a los nacionalistas utilizar la Declaraci¨®n c¨ªvica pactada el 3 de mayo por PNV, EA, PP, PSOE e IU -a fin de someterla luego a la aprobaci¨®n de los ayuntamientos vascos- para justificar su chantaje.
El documento de la Asociaci¨®n de Municipios del Pa¨ªs Vasco (Eudel) no se limita a condenar 'las acciones terroristas de ETA' contra la vida, la libertad y los derechos humanos. Los partidos firmantes tambi¨¦n se comprometen a adoptar iniciativas (incluso judiciales) para el reconocimiento ¨¦tico, social y material y la solidaridad activa con las v¨ªctimas de la violencia, la intolerancia y la extorsi¨®n, as¨ª como a garantizar 'el libre ejercicio de los derechos de participaci¨®n y representaci¨®n pol¨ªtica' de los ciudadanos frente a las 'acciones ileg¨ªtimas, amenazas, intimidaciones o agresiones' en el ¨¢mbito municipal. La Declaraci¨®n c¨ªvica no se anda con rodeos y cita 'a los corporativos del Partido Socialista y del Partido Popular' entre 'los compa?eros amenazados, agredidos y asesinados' por la furia asesina y la intolerancia; tambi¨¦n acuerda que los principios y compromisos del texto constituyan 'la base pol¨ªtica imprescindible para cualquier acuerdo pol¨ªtico'. Los hechos descritos en el documento llevan a una conclusi¨®n evidente: si los asesinatos terroristas son obra de ETA, la autor¨ªa de los ataques a la libertad de expresi¨®n, los actos de intolerancia, las amenazas, las intimidaciones y las agresiones en los municipios vascos reiteradamente condenados en la Declaraci¨®n c¨ªvica es imputable a Batasuna y a los dem¨¢s grupos de sost¨¦n del nacionalismo radical.
En cualquier Estado de derecho del planeta, un partido que persiga fines delictivos o que aplique medios delictivos para alcanzar sus metas debe ser disuelto por los tribunales en aplicaci¨®n del principio de legalidad. Desde hace a?os, las investigaciones de Garz¨®n parten de una 'interpretaci¨®n integradora y global del complejo terrorista encabezado por ETA'; el instructor de la Audiencia Nacional hab¨ªa reunido ya abundantes indicios sobre la imbricaci¨®n de las ramas especializadas de esa constelaci¨®n criminal (Ekin, Jarrai, Haika, Segi, Saki, Gestoras, Askatasuna) dentro de un mismo tejido organizativo. Seg¨²n el ¨²ltimo auto, 'no existe duda' -a la vista de los indicios econ¨®micos y financieros disponibles- de 'la labor pol¨ªtica marcada y subordinada' de Batasuna respecto a ETA y de su 'dependencia e integraci¨®n' en 'la organizaci¨®n terrorista matriz'. ?Qu¨¦ har¨¢n los dirigentes del PNV cuando esas fundamentadas sospechas -ampliamente extendidas en la sociedad vasca y apoyadas por datos hist¨®ricos y pol¨ªticos abrumadores- sean probadas ante los tribunales?
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