El cardenal de Boston declara bajo juramento en el caso de un cura pederasta de su di¨®cesis

Ayer se escribi¨® otro cap¨ªtulo infame en la historia de la Iglesia cat¨®lica en Estados Unidos. El cardenal de Boston, Bernard Law, fue forzado a prestar declaraci¨®n jurada en un caso de pederastia en el que se le acusa de negligencia por permitir que un sacerdote que ha abusado de m¨¢s de 130 menores se trasladara de parroquia en parroquia. Horas antes de que el prelado testificara, la polic¨ªa detuvo al segundo sacerdote en una semana, en esta ocasi¨®n por violar repetidamente a un ni?o en un cementerio cercano a la capital del Estado de Massachusetts.

Aunque el cardenal Law testific¨® a puerta cerrada, sus declaraciones se grabaron en v¨ªdeo a petici¨®n de la defensa en la demanda civil entablada por una de las supuestas v¨ªctimas del ex sacerdote John Geoghan, quien ahora cumple una condena de 10 a?os. El letrado, Mitchel Garabedian, hab¨ªa solicitado la semana pasada al juez que adelantara el interrogatorio del cardenal por temor a que Law se trasladara en junio de forma definitiva a un puesto en el Vaticano. La petici¨®n tambi¨¦n estuvo motivada en la ruptura por parte de la archidi¨®cesis de su compromiso de indemnizar a las 86 v¨ªctimas de Geoghan.

La declaraci¨®n jurada de Law puede durar d¨ªas. El abogado Garabedian le pregunt¨® cu¨¢ndo tuvo conocimiento de los abusos de Geoghan. El cardenal se mostr¨® cooperante, pero adujo que la memoria le fallaba y no record¨® ni cu¨¢ndo conoci¨® a Geoghan ni cu¨¢ndo supo de las primeras acusaciones de pederastia contra ¨¦l.

El v¨ªdeo previsiblemente ser¨¢ utilizado, seg¨²n fuentes del tribunal de Suffolk, en algunas de las otras 150 demandas por pederastia contra la archidi¨®cesis de Boston. Las cerca de 600 alegaciones de abusos de menores a manos del clero en esta ciudad desencadenaron a comienzos de a?o el mayor esc¨¢ndalo de la Iglesia cat¨®lica en EE UU. La primera que salt¨® a las portadas de la prensa fue precisamente la del ex cura Geoghan, pero desde entonces no pasa un d¨ªa sin que se produzca un nuevo episodio de supuestos abusos.

Uno de los m¨¢s tenebrosos ha sido el del ahora ex sacerdote Ronald Paquin, arrestado en la madrugada de ayer en su apartamento cuando, seg¨²n las autoridades, se dispon¨ªa a escapar a otro Estado u otro pa¨ªs. Hace semanas, ¨¦l mismo admiti¨® que hab¨ªa estado 'jugando sexualmente' con varios ni?os, pero los detalles que salieron a relucir tras su detenci¨®n desaf¨ªan la imaginaci¨®n de cualquier guionista de cine de horror. Paquin, de 59 a?os, viol¨® m¨¢s de 50 veces a un ni?o en el cementerio de Haverhill. All¨ª se lo llevaba a 'jugar' en el coche cuando el ni?o ten¨ªa 12 a?os. Contra ¨¦l pesan decenas de acusaciones en los Estados de Massachusetts, New Hampshire y Maine, explicaba ayer el fiscal del caso, Kevin Burke.

Paquin fue destituido de su ministerio sacerdotal en 1990, despu¨¦s de que la Iglesia pagara calladamente millones de d¨®lares de indemnizaci¨®n a cuatro de sus v¨ªctimas. Paquin compareci¨® tras su arresto ante el tribunal de Haverhill y se declar¨® inocente, al igual que lo hab¨ªa hecho el lunes el tambi¨¦n ex sacerdote Paul Shanley, de 71 a?os, arrestado la semana pasada por violar repetidamente a un ni?o de seis a?os. El juez le impuso a Shanley una fianza de 750.000 d¨®lares por ese caso, pero est¨¢ acusado tambi¨¦n de decenas de violaciones y abusos a otros menores.