Rob Glaser: 'La m¨²sica tiene un gran potencial, pero los servicios de pago deben ir paso a paso'

RealNetworks, empresa socia de MusicNet, se dedica al mercado del software de descargas de contenidos y a los servicios de suscripci¨®n. Ha lanzado Real Video 9 y una versi¨®n para el mundo de la telefon¨ªa m¨®vil. Su director, Rob Glaser, se enfrenta al reto de atraer suscriptores a MusicNet, el servicio musical de pago por Internet que funciona con su sistema RealOne.

Pregunta: Comenz¨® en Microsoft cuando acab¨® sus estudios en Yale. ?C¨®mo se siente ahora que RealNetworks se opone a su antigua compa?¨ªa?

Respuesta: Cuando comenc¨¦ hace unos a?os me concentr¨¦ en cosas que no se hab¨ªan hecho hasta el momento. Apple innovaba, mientras que Microsoft no. La experiencia fue buena.

P. RealNetworks ha establecido relaciones con Intel y ahora con Nokia. ?Por qu¨¦?

'Los dos servicios musicales de pago en red, MusicNet y Pressplay, tienen un escaso cat¨¢logo de productos'

'En los ¨²ltimos meses la cantidad total de intercambios o descargas ilegales ha excedido el nivel que alcanz¨® Napster'

R. Tenemos relaciones muy estrechas con muchas compa?¨ªas. Durante siete a?os, nos han dicho que somos muy buenos; otros comentaron que s¨®lo ¨¦ramos un est¨¢ndar de los PC. Lo importante es tener una buena tecnolog¨ªa y muchos contenidos que la usen. Ahora, tambi¨¦n podemos decir que seremos el est¨¢ndar de los dispositivos m¨®viles (Nokia fabrica 100 millones de terminales al a?o). En el futuro habr¨¢ m¨¢s y m¨¢s m¨®viles conectados a Internet.

P. Pero tienen en Media Player un fuerte competidor.

R. Creo que hemos ido triunfando. Microsoft ha suministrado el Media Player con Windows durante cinco a?os, pero el an¨¢lisis es mucho m¨¢s complicado porque si se suministra un producto con un sistema operativo y no se utiliza, no importa demasiado.Nosotros tenemos 50 millones en todo el mundo.

P. RealNetworks participa en el servicio de descargas musicales MusicNet; pero este servicio tiene muchas restricciones, a diferencia de lo que ofrece el grupo competidor PressPlay.

R. La cuesti¨®n no es poner un servicio musical contra el otro, sino que ambos servicios musicales de pago tienen un escaso cat¨¢logo de productos. Y la raz¨®n de ello es la paradoja de la industria musical. Nosotros tenemos mucho ¨¦xito con los servicios de suscripci¨®n de contenidos en general. Hemos conseguido 500.000 suscriptores en todo el mundo de RealOne Superpass, que da acceso a grandes ligas de Estados Unidos (b¨¦isbol, baloncesto...), varios grandes medios de comunicaci¨®n como CNN, canales de entretenimiento...

P. ?Y por qu¨¦ la industria fracasa en la m¨²sica?

R. La m¨²sica tiene un gran potencial, pero sabemos que debemos lanzar los servicios musicales paso a paso.

P. Pero mientras, iniciativas como Napster o Kazaa van muy deprisa...

R. La experiencia Napster cre¨® unas expectativas en cuestiones de precio y de poder obtenerlo todo. El gran problema fueron los derechos de propiedad intelectual. Era imposible evitar que los usuarios compartieran contenidos ilegales. Los propietarios de los derechos [las discogr¨¢ficas], parad¨®jicamente, no sintieron que pod¨ªan poner contenidos legales en la red con ese nivel de funcionalidad, sino s¨®lo cat¨¢logos parciales de m¨²sica. No vieron que pod¨ªan ofrecer servicios con este tipo de funcionalidades, sino con muy pocas. Por ejemplo, no consideraban la posibilidad de pasar los archivos a aparatos m¨®viles.

P. ?Cu¨¢l fue la soluci¨®n?

R. Nosotros pensamos que era necesario ir paso a paso, pero las discogr¨¢ficas quer¨ªan hacerlo ya. Ten¨ªamos dos elecciones: esperar al nuevo ciclo o crear MusicNet, y decidimos crear el servicio. Napster cerr¨®, algo que estuvo muy bien, pero luego aparecieron otros como Morpheus, Kazaa, etc. Por ello, inmediatamente las expectativas de los consumidores fueron de nuevo colmadas, a pesar de que estos programas eran dif¨ªciles de manejar. En los ¨²ltimos meses la cantidad total de intercambios o descargas ilegales ha excedido el nivel alcanzado por Napster.

P. ?Cree que arraigar¨¢ la suscripci¨®n de pago por contenidos?

R. En el futuro nadie querr¨¢ pagar por nada, pero s¨ª por el valor a?adido. En Estados Unidos, el 50% del tiempo dedicado a la televisi¨®n es para programas gratuitos y el resto a canales de pago; pero entre el 65 y el 70% lo hacen por servicios premium de pago. Dicho de otra forma, el contenido tiene valor. Hay dos modelos para acceder a ellos: a trav¨¦s de los anuncios o por suscripciones. La gente se suscribe y ello puede servir para otros medios como Internet.