La esp¨ªa japonesa

Youriko Saeke es como esos indios cherokees que los confederados empleaban para oler el viento y seguir pistas durante la guerra civil norteamericana. La gu¨ªa de los ojeadores de la selecci¨®n espa?ola conoce el territorio con el rigor de un nativo, es biling¨¹e, sigilosa y, adem¨¢s, entrenadora en categor¨ªa regional. Se trata de una rara experta en un Mundial abocado a la confusi¨®n cultural.

Nacida en Tokio hace 28 a?os, sus padres se trasladaron a Madrid por cuestiones de trabajo hace un decenio y ella, apasionada por el f¨²tbol como estaba, ingres¨® en la escuela de entrenadores. All¨ª comparti¨® pupitre con Luis Enrique, ahora en la selecci¨®n, y al cabo de un tiempo se sac¨® el t¨ªtulo. 'Siempre quise hacer algo que tuviera relaci¨®n con el f¨²tbol. De joven, jugaba, de organizadora, y mi ¨ªdolo era Guardiola', cuenta.

'En Jap¨®n el f¨²tbol es un deporte muy extendido entre las mujeres', prosigue, 'y cuando empec¨¦ a estudiar para entrenadora lo hice con la intenci¨®n de poder ganarme la vida con esto alg¨²n d¨ªa. Pero el mundo del f¨²tbol es machista, sobre todo en Jap¨®n. Y el mercado, en Espa?a, es reducido. S¨®lo 40 personas, o menos, se pueden ganar la vida con un trabajo as¨ª. Yo he tenido la suerte de encontrar otras alternativas'.

En la Federaci¨®n conocieron a Youriko cuando trabajaba como representante de la sede de Toyama, lugar de concentraci¨®n de Croacia. Y, aunque el sorteo termin¨® por alejar a Espa?a de Jap¨®n, lo cierto es que se consider¨® que pod¨ªa prestar un servicio muy ¨²til. 'Conozco muy bien Jap¨®n. All¨ª no me pierdo', dice; 'lo que no hablo es coreano, un idioma totalmente distinto. En Jap¨®n nadie habla coreano, pero los coreanos s¨ª hablan japon¨¦s'.

Las dificultades de la propia Youriko para comunicarse muestran la enorme barrera que suponen las diferencias culturales en el Mundial. El oc¨¦ano Pac¨ªfico, que se interpone entre Corea y Jap¨®n con m¨¢s de 200 kil¨®metros de agua, es el otro obst¨¢culo. Lo deber¨¢n salvar los ojeadores de Camacho para seguir en directo las evoluciones de los posibles rivales en la segunda ronda, Alemania o Camer¨²n, que jugar¨¢n en Jap¨®n, a m¨¢s de 700 kil¨®metros de Ulsan. 'Yo voy a ser la gu¨ªa', afirma Youriko.