Aznar responsabiliza de los altos precios de la vivienda a comunidades y ayuntamientos

El boom de la vivienda, cuyos precios se han disparado un 55% en los ¨²ltimos cinco a?os, coincide con una fase de bonanza econ¨®mica e hipotecas baratas, que han animado a los espa?oles a pagar, en ocasiones, cifras desorbitadas por un piso. Pero el fondo del problema del encarecimiento de la vivienda es 'la escasez de suelo urbanizable', advirti¨® ayer el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, derivada de la pol¨ªtica desarrollada por ayuntamientos y comunidades aut¨®nomas. El Ejecutivo tiene la intenci¨®n de resucitar el pacto sobre el suelo que promet¨ªa en su programa electoral.

No se trata ni del sector de la construcci¨®n, que goza de grandes dosis de competencia, ni de los costes de edificaci¨®n, que han experimentado alzas moderadas. Para el Gobierno, uno de los grandes culpables del alza de los precios, junto al 'fuerte tir¨®n' de la demanda animada por las 'buenas expectativas de financiaci¨®n', es el encarecimiento del suelo, que ya absorbe un tercio del precio final de un piso. El presidente advirti¨® de que uno de los principales problemas se deriva de la 'excesiva rigidez de la normativa urban¨ªstica', que deber¨ªa cambiarse.

'Hago un llamamiento a la cooperaci¨®n y la coordinaci¨®n de las administraciones con responsabilidad en pol¨ªtica de vivienda', concluy¨® en la clausura de un acto organizado en Madrid por la Asociaci¨®n de Promotores y Constructores de Espa?a (APCE) para presentar el Plan de Vivienda 2002-2005. Aznar apel¨® a las comunidades y a los ayuntamientos a colaborar con este plan modificando la normativa y atajando el encarecimiento de la vivienda.

La compra de terrenos supone el 37% del coste total de construcci¨®n de una vivienda, frente al 26% que representaba en 1996, seg¨²n la patronal de los promotores. Esta asociaci¨®n coincide en se?alar al suelo como uno de los principales responsables del alza de precios. 'El espectacular crecimiento de la demanda', se?al¨® en el mismo acto el presidente de esta asociaci¨®n, Guillermo Chicote, 'ha casi agotado la disponibilidad de suelo apto para edificar'.

Cuando se trata de viviendas de protecci¨®n social -las llamadas VPO, destinadas a las familias que no pueden permitirse el lujo de acudir al mercado libre para comprar una casa-, el escollo del suelo puede ser insalvable. Dada su carest¨ªa y el beneficio que reporta, el suelo que ponen los ayuntamientos a disposici¨®n de promotores y constructores suele estar dirigido al mercado libre, y tan s¨®lo una m¨ªnima parte se destina a vivienda social. Por ejemplo, en Madrid, est¨¢ previsto que se construyan m¨¢s de 150.000 viviendas en los pr¨®ximos a?os, pero el mercado de las VPO, que se supone que los planes gubernamentales intentan fomentar, est¨¢ pr¨¢cticamente paralizado. La situaci¨®n no es exclusiva de la capital de Espa?a. En 1996, cuatro de cada diez viviendas construidas eran VPO en todo el pa¨ªs, mientras que ahora apenas suponen un 5% del total.

El principal motivo de la escasez se debe a que, a falta de incentivos oficiales y con una demanda poderosa, los constructores prefieren dedicarse al mercado libre, mucho m¨¢s rentable que el de la VPO, que adem¨¢s est¨¢n sujetas a un precio m¨¢ximo. Los ayuntamientos utilizan la subasta y la recalificaci¨®n de terrenos como un mecanismo de financiaci¨®n. En este sentido, el presidente de la APCE critic¨® que 'los poderes p¨²blicos enajenen suelo en duras subastas al mejor postor' y abog¨® por la coordinaci¨®n: 'Estamos cerca del limite' de acceso a la vivienda de una 'buena parte de la poblaci¨®n'.

Pacto entre administraciones

Durante el mismo acto, el ministro de Fomento, Francisco ?lvarez Cascos, anunci¨® su intenci¨®n de promover un pacto para hacer frente a 'los problemas de rigidez' en el mercado del suelo entre las comunidades 'que quieran contar con una pol¨ªtica urban¨ªstica al servicio de las necesidades sociales y no al servicio de la especulaci¨®n'. El pacto del suelo es una antigua promesa del PP, que lo incluy¨® en su programa electoral, que ahora se pretende reavivar. El ministro record¨® que el Gobierno no tiene competencias directas en la construcci¨®n de VPO. 'No puede promover directamente la construcci¨®n ni la rehabilitaci¨®n, ni la urbanizaci¨®n del suelo', a?adi¨®.