La obra de Guti¨¦rrez Arag¨®n, estudiada como una clave de la transici¨®n
El cineasta ultima 'El caballero Don Quijote' y prepara otro rodaje.
Lleva mal eso de que le llamen acad¨¦mico. Pero en oto?o ingresa en la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Tampoco tolera bien que se le dediquen cursos y homenajes como si se hubiese retirado, m¨¢s ahora que est¨¢ hiperactivo ultimando su nuevo Quijote y preparando un nuevo rodaje: El futuro que te espera. Pero no va a tener m¨¢s remedio que acudir al seminario que le brinda la Fundaci¨®n para la Investigaci¨®n del Audiovisual y la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo en Valencia. Lo dirige el cr¨ªtico Carlos F. Heredero y la tesis que este mismo plantea parece indiscutible: 'No se puede explicar el cine de la transici¨®n y de los a?os ochenta sin Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n'.
Desde que sorprendiera hace casi 30 a?os con Habla mudita, Guti¨¦rrez Arag¨®n (Torrelavega, Cantabria, 1942) no ha dejado de hacer cine. En 2002 ha trabajado duro en dos proyectos. Uno se ver¨¢ ya en septiembre y es una nueva versi¨®n de la obra de Cervantes -que ya adapt¨® para la televisi¨®n en una serie protagonizada por Fernando Rey- titulada El Caballero Don Quijote, con Juan Luis Galiardo (hidalgo) y Carlos Iglesias (Sancho Panza). Otro empieza a rodarse el pr¨®ximo oto?o y es una vuelta a sus ra¨ªces antes de que desaparezcan. Se titula El futuro que te espera y, seg¨²n ¨¦l, ser¨¢ 'una pel¨ªcula sencilla sobre las gentes que viven hoy en el valle del Pas'. Es decir, los famosos pasiegos de su tierra.
Pero antes se dejar¨¢ caer este mes por Valencia, donde tendr¨¢ que escuchar las teor¨ªas, diatribas y discusiones que levanta entre cr¨ªticos, estudiosos, escritores y profesionales del s¨¦ptimo arte su cine m¨¢gico, sugerente, contradictorio, envolvente y fiel a su entorno. 'No se puede entender la transici¨®n sin Habla mudita o sin Son¨¢mbulos o Camada negra, lo mismo que no se pueden entender los a?os ochenta sin Demonios en el jard¨ªn, La mitad del cielo o La noche m¨¢s hermosa. Su obra siempre responde a las coordenadas de la modernidad', afirma Heredero.
Pero Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n se quita importancia, con ese arte que se dan algunos norte?os para pasar a segundo plano aunque sepan de sobra que est¨¢n en el primero. 'El car¨¢cter testimonial de las pel¨ªculas existe, muchas veces, a pesar de la voluntad del director', dice. 'Y ¨¦stas se convierten en reflejo de una ¨¦poca, lo quieras o no, incluso las que est¨¢n consideradas como vanguardistas. Pero eso es porque lo quiere la gente'.
En el curso se abordar¨¢n todas las vertientes en las que ha destacado este cineasta singular. Desde su relaci¨®n con los cuentos fant¨¢sticos a su vena cervantina; desde su trabajo como guionista al an¨¢lisis de su figura y la de su generaci¨®n en un tiempo y un pa¨ªs muy concretos. Un personaje que Heredero define como 'francotirador tan apocal¨ªptico como integrado', en homenaje a Umberto Eco. Y cuya obra, a juicio del cr¨ªtico, 'se define por cosas singulares, con una estructura de cuentos de hadas para adultos con el tel¨®n de fondo de la historia detr¨¢s'.
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