El falso homicidio del presidente

El macrojuicio de Malabo ha entrado en barrena. El fiscal Seraf¨ªn Ond¨® acus¨® ayer a uno de los procesados del delito de 'homicidio al jefe del Estado'. El defensor Fernando Mic¨® fue generoso en su veloz r¨¦plica: 'En castellano, un homicidio incluye la muerte de la persona y hasta ahora, que yo sepa, el jefe del Estado sigue vivo'. El fiscal se mantuvo impert¨¦rrito. El resto de sus actuaciones no le fueron a la zaga. Como cuando ley¨® la declaraci¨®n policial de un procesado: '?Es cierto que usted dijo 'ya tenemos la primera pistola para dar el golpe?'. Se refiere a un arma de fuego olvidada en casa de su amante por un militar jam¨¢s detenido y que nunca ha sido exhibida como prueba. O en el caso de Juan Asumo, de 80 a?os, y que present¨® 'como otra pieza fundamental¨ªsima' de la acusaci¨®n. Al negar Juan estar al tanto de la supuesta asonada, el fiscal trat¨® de aturdirle para que refrendara su declaraci¨®n policial. El hombre inform¨® haberla firmado sin tener la oportunidad de leerla.

Hubo dos momentos ilustrativos del clima aprocesal que se vive en el cine Marfil. Al denunciar Hip¨®lito Ensema la violaci¨®n de su mujer por agentes de la seguridad, el presidente de la sala, Mart¨ªn Ns¨², le cort¨®: 'No viene a cuento y es una p¨¦rdida de tiempo'. O al llamar el ministerio fiscal a Guillermo Ond¨® El¨¢ se descubri¨® que su nombre no consta ni en el auto ni en las conclusiones de la fiscal¨ªa. Subi¨® al estrado como acusado y baj¨® segundos despu¨¦s sin saber su situaci¨®n. El d¨ªa transcurri¨® calmo. S¨®lo el gol de Senegal a Francia forz¨® al presidente a enviar a un pelot¨®n a un bar pr¨®ximo para acallar el jolgorio.

Con el proceso fuera de control, las c¨¢balas se centran ahora en la fecha de la conclusi¨®n. Mart¨ªn Ns¨² espera finalizar el domingo el interrogatorio para que el asunto quede el martes visto para sentencia, justo en la v¨ªspera del sexag¨¦simo cumplea?os de Obiang Nguema, cuyos fastos se van a celebrar en Mongomo, su aldea natal, el lugar del que proceden la mayor¨ªa de los detenidos. Sin sentencia no habr¨¢ perd¨®n ese d¨ªa. La medida se aplaza hasta el viaje de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar a Sur¨¢frica, con escala en Malabo. Su realizaci¨®n depender¨¢ del resultado del proceso y, en caso de condenas, de los indultos.