El centro del campo

Peligro superado. Ya hay que descartar el viejo temor a que los jugadores dieran el trabajo por cumplido por el mero hecho de estar en un Mundial. La actitud del domingo demuestra que quieren llegar a lo m¨¢s alto. El Mundial no termin¨® cuando Camacho anunci¨® la lista; empez¨® ese d¨ªa. Otra buena noticia: nadie habl¨® de la temperatura ni la humedad ni antes ni despu¨¦s.

Derecho conquistado. Ya llegar¨¢n la emoci¨®n y las obligaciones de la inmediatez cuando el torneo se transforme en Copa. Ahora reina la Liga y hay que saber jugarla. Habr¨¢ partidos que permitan especular. ?se es el derecho que se gan¨® Espa?a.

Cautela. Eslovenia es lo que es: una selecci¨®n menor, compuesta por jugadores de Ligas menores o equipos de segunda fila, aunque en el primer tiempo actu¨® motivada y fresca. Dentro de su nivel, jug¨® con oficio. Y hasta se envalenton¨® por la inquietud y nerviosismo que supon¨ªa para Espa?a la palabra 'deb¨²'. Espa?a rompi¨® su maleficio, pero el rival nos obliga a ser cautos.

La m¨¢xima del f¨²tbol. Un equipo juega como juega su centro del campo. O sea, Espa?a fue el reflejo de Baraja -no en su sitio habitual-, Luis Enrique -no en su sitio ideal- y De Pedro -sorprendente su aportaci¨®n-, m¨¢s la ayuda de Valer¨®n, con toques de extraordinaria calidad, y Ra¨²l. La victoria se fragu¨® ah¨ª. Defensivamente, no nos cost¨® mucho. No fue preciso un gran esfuerzo para robar el bal¨®n.

Paciencia. Hubo poca aportaci¨®n de Trist¨¢n. Pero es muy dif¨ªcil sustituirle porque siempre esperas una genialidad de ¨¦l.

Complejo absurdo. Hay una especie de complejo en las jugadas a bal¨®n parado que no deber¨ªa calar en la selecci¨®n. Cada acci¨®n est¨¢tica es un problema. Y no veo por qu¨¦: el juego a¨¦reo de Hierro, Nadal, Juanfran, Puyol y Baraja es una garant¨ªa. Se siente el problema, pero no creo que sea un asunto complicado de resolver. Es m¨¢s psicol¨®gico que real.

Las parejas. Espa?a fue fiel al sistema que instal¨® Camacho desde su llegada. Sobre la base de un 4-4-2, la formaci¨®n de parejas: Valer¨®n-Baraja, Luis Enrique-Puyol, De Pedro-Juanfran... Y Ra¨²l, asociado a todos ellos con su naturalidad caracter¨ªstica. El equipo se desorden¨® en algunos momentos, pero incluso fue beneficioso. A veces, si la gente se mueva con la seguridad que lo hicieron el domingo, viene hasta bien no mantener la rigidez de las posiciones.