Rusia cuida su frontera asi¨¢tica

El presidente de Rusia, Vlad¨ªmir Putin, est¨¢ aprovechando las noches blancas de San Petersburgo para confirmar que el ¨¢guila bic¨¦fala de su escudo nacional es tambi¨¦n una realidad en su pol¨ªtica exterior. Tras las citas occidentales con los l¨ªderes de EE UU y de la UE en mayo, Putin dedica las horas m¨¢gicas de su ciudad natal a los dirigentes asi¨¢ticos, mientras sus diplom¨¢ticos subrayan que la actividad internacional rusa se rige por la doctrina de los 'm¨²ltiples vectores'.

Mosc¨² dio un impulso importante a su 'vector asi¨¢tico' el viernes con dos acuerdos suscritos por seis pa¨ªses (Rusia, China, Kazajist¨¢n, Uzbekist¨¢n, Tayikist¨¢n y Kirguist¨¢n) para institucionalizar la Organizaci¨®n de Cooperaci¨®n de Shanghai (OCS), con un secretariado en Pek¨ªn, y para crear una organizaci¨®n antiterrorista regional con sede en Bishkek (Kirguist¨¢n).

Pek¨ªn pretende que se eliminen las trabas a la emigraci¨®n laboral china a Rusia

China teme que EE UU se quede de forma permanente en su retaguardia

La cumbre de Rusia y sus vecinos asi¨¢ticos ha evidenciado el papel directo que EE UU tiene en Asia Central, gracias a su presencia militar en Afganist¨¢n, Uzbekist¨¢n y Kirguist¨¢n. Islam Kar¨ªmov, el l¨ªder de Uzbekist¨¢n, que reprime duramente a su oposici¨®n islamista desde hace a?os, se erigi¨® en principal defensor de los intereses norteamericanos en la zona. 'La correlaci¨®n de fuerzas en el mundo cambia y nadie puede negar los acontecimientos tras el 11 de septiembre y el pragmatismo de los dirigentes de Rusia y de EE UU, sobre todo de Rusia', dijo Kar¨ªmov. La posici¨®n uzbeka contrasta con la de China. Pek¨ªn teme que los norteamericanos se queden de forma permanente en su retaguardia y est¨¢ preocupada por el acercamiento entre Rusia y la OTAN.

La evoluci¨®n del factor militar norteamericano depender¨¢ en parte de c¨®mo se perciba la amenaza del fundamentalismo isl¨¢mico. Inquieto por la eventual extensi¨®n del conflicto a su territorio, Kar¨ªmov opina que 'no debe excluirse la posibilidad de reagrupamiento de las fuerzas terroristas' en Afganist¨¢n.

La extensi¨®n del fundamentalismo isl¨¢mico al territorio ex sovi¨¦tico es uno de los argumentos que Putin ha dado a los chinos para justificar la presencia norteamericana. Seg¨²n el presidente ruso, los 4.000 miembros del Movimiento Islamista de Uzbekist¨¢n que luchaban en Afganist¨¢n se dispon¨ªan a derrocar a los reg¨ªmenes laicos de Asia Central.

Afganist¨¢n es todav¨ªa una fuente de inestabilidad para la regi¨®n, dijo el l¨ªder de Tayikist¨¢n, Ejmomali Rajm¨®nov, seg¨²n el cual desde el 11 de septiembre el tr¨¢fico de narc¨®ticos desde Afganist¨¢n ha aumentado, en lugar de disminuir. Kar¨ªmov, a su vez, acusa a la ONU y a la comunidad internacional de no haber elaborado un plan internacional para luchar contra el narcotr¨¢fico.

En el mundo interdependiente actual, los dilemas simplificados est¨¢n desapareciendo tanto para China como para Rusia. Ambos pa¨ªses est¨¢n interesados tanto en las buenas relaciones entre s¨ª como con EE UU. El volumen comercial de China con EE UU (80.000 millones de d¨®lares) es ocho veces superior al volumen comercial de China con Rusia. Las posibilidades de desarrollo de la colaboraci¨®n econ¨®mica entre los dos vecinos dependen de que Rusia supere las viejas consideraciones estrat¨¦gicas. Por razones hist¨®ricas, a los rusos les asusta m¨¢s la presencia de los chinos en Siberia que la de EE UU en Asia Central. El ingreso de Rusia en la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) puede cambiar las cosas.

Para su sorpresa, los representantes rusos se han encontrado con posiciones 'extremadamente duras' en las negociaciones que mantienen desde abril en Pek¨ªn, seg¨²n reconoc¨ªa un funcionario gubernamental en Mosc¨². Los chinos, que ya son miembros de la OMC, quieren un r¨¦gimen de empresa nacional para las compa?¨ªas con capital chino que se establezcan en Rusia y que Mosc¨² elimine las limitaciones tanto cualitativas como cuantitativas a la emigraci¨®n laboral china a Rusia, as¨ª como la reducci¨®n de un 50% de los aranceles de importaci¨®n de los productos chinos.M¨¢s all¨¢ del giro radical de la pol¨ªtica exterior, la competencia por los flujos de petr¨®leo y gas en los grandes espacios euroasi¨¢ticos se mantiene e incluso ha adquirido una nueva din¨¢mica. Rusia no quiere que el oleoducto Bak¨² (Azerbaiy¨¢n)-Ceijan (Turqu¨ªa) le arrebate el tr¨¢nsito de crudo. En San Petersburgo, Kazajist¨¢n y Rusia han firmado un importante acuerdo, en el que se dan garant¨ªas rec¨ªprocas para asegurar el paso de su crudo por sus respectivos territorios. Los proyectos de colaboraci¨®n energ¨¦tica entre Kazajist¨¢n y Rusia -a los que se suman proyectos de inversiones kazajas en terminales petroleras en el litoral cercano a San Petersburgo-, tendr¨¢n, seg¨²n Putin, grandes consecuencias para la pol¨ªtica energ¨¦tica en Europa.