Fraga Iribarne 'cay¨®' en la selectividad

Rufaida, una espa?ola de origen sirio de 17 a?os, entr¨® ayer a las 10.15 en un aula de la Complutense cubierta con su hiyab y dispuesta, al igual que otros 25.200 j¨®venes -1.500 menos que en junio del a?o pasado- a enfrentarse a la selectividad, que termina ma?ana. Repartieron el primer examen y ley¨® la opci¨®n A de lengua y literatura: 'En casi todos los momentos de su vida, Andr¨¦s experimentaba la sensaci¨®n de sentirse solo y abandonado'. P¨ªo Baroja. El ¨¢rbol de la ciencia. La opci¨®n B no iba tanto con la ocasi¨®n: El reino de Cervantes, del venezolano Arturo Uslar Pietri, planteando el eterno problema de Espa?a y su relaci¨®n con Hispanoam¨¦rica.

Pero Rufaida no estaba sola. A las 14.00, y tras hacer el segundo examen, el de ingl¨¦s, la esperaba su padre a la puerta. 'Simplemente es para que no tenga nervios. S¨¦ que est¨¢ preparada, pero es para que la psicolog¨ªa no le afecte', comentaba el progenitor antes de excusarse porque se iban a almorzar. 'Lo normal es que los pap¨¢s, las mam¨¢s y los ni?os vengan un d¨ªa antes del examen buscando el aula donde se van a examinar. Pero hoy ya vienen solos. Imag¨ªnate la verg¨¹enza si les acompa?an sus padres', dec¨ªa una conserje que se pas¨® el primero de los tres d¨ªas que durar¨¢n las pruebas 'viendo a los j¨®venes atacados y perdiditos, sin saber d¨®nde est¨¢n los ba?os, la cafeter¨ªa ni nada de nada'.

'Los nervios son muchos al principio, pero cuando ves que es f¨¢cil se te pasa todo'

A Rufaida no se la ve¨ªa avergonzada. Quiz¨¢s un poco m¨¢s callada que cuando se sent¨® al sol, a la puerta de la facultad de Farmacia, y se qued¨® a sus anchas con tres amigas que pusieron osos y ranas de peluche a empollar. 'Nos hemos pasado dos semanas, 10 horas al d¨ªa, metidas en una biblioteca con los peluches', explicaba Lorena, de 18 a?os. Y luego brome¨®: 'Nos soplan en los ex¨¢menes porque tenemos conexi¨®n mental'. No era el ¨²nico amuleto que entr¨® en la facultad en lo que ser¨¢ posiblemente la pen¨²ltima convocatoria de junio de selectividad. Carla, con pinta de buena estudiante, se hab¨ªa puesto una camiseta con un elefante con la trompa hacia arriba. 'Pero ella no va a necesitar la suerte', aseguraba su compa?era.

A¨²n les quedaba por delante el examen de historia, com¨²n para todas las modalidades de bachillerato, donde cay¨® el reinado de Alfonso XIII y C¨¢novas del Castillo. Y responder en 10 l¨ªneas qui¨¦n es Manuel Fraga Iribarne. Pero los ¨¢nimos estaban ya entonces m¨¢s calmados. Los futuros universitarios se tumbaron en la hierba mientras los tel¨¦fonos m¨®viles no paraban de sonar. 'Pero ?quieres colgar ya? ?Qu¨¦ pesada que es con su churri!', protestaba una joven. 'Lo peor es al principio. En el primer examen est¨¢s muy nerviosa, pero cuando ves que es f¨¢cil, se te pasa todo', explicaba Sara, de 17 a?os, que como la mayor¨ªa de los alumnos comentaba con los profesores que les acompa?aron que el examen les hab¨ªa salido bien.

?Realmente es para tanto? 'Yo he o¨ªdo que aprueba uno de cada 10. Digo..., nueve de cada 10', dec¨ªa la amiga de Carla. Casi: en la convocatoria de junio de 2001 pas¨® el 81,8% de los que se presentaron a este examen, que computa el 40% frente al expediente acad¨¦mico para calcular la nota de ingreso en la universidad. 'Vienen muy advertidos. En clase hemos hecho modelos de ex¨¢menes de otros a?os. Lo normal es que no tengan problemas', confiaba una profesora de arte de un colegio privado que fue a acompa?ar a sus estudiantes.

Adem¨¢s, cada vez es m¨¢s f¨¢cil entrar en la carrera deseada. Las seis universidades p¨²blicas madrile?as ofrecen para el pr¨®ximo curso 44.152 de plazas de nuevo ingreso, seg¨²n aprob¨® ayer el Consejo de Coordinaci¨®n Universitaria. Pero, por primera vez, los madrile?os tendr¨¢n que competir en igualdad de condiciones con los estudiantes de toda Espa?a. El Gobierno regional ha decidido abrir todas las vacantes, a pesar de que s¨®lo ten¨ªan obligaci¨®n de hacerlo en un 50% de sus plazas, lo que puede provocar que la nota de corte (la m¨ªnima para acceder a cada titulaci¨®n) suba este a?o en licenciaturas y diplomaturas.

Aunque no todos los que se someten al suplicio de la selectividad quieren obtener una plaza en la universidad. 'Yo no me juego nada, porque quiero hacer un ciclo superior de formaci¨®n profesional. Me he presentado ¨²nicamente por no dejarme puertas cerradas', comentaba ?scar. Y su compa?ero ?ngel asent¨ªa: 'Yo igual. Si saco un 6 har¨¦ una carrera y, si no, pues a formaci¨®n profesional', apostillaba.

?ngel conocer¨¢ su nota, al igual que el resto de los alumnos, el pr¨®ximo 24 de junio. Y dispondr¨¢ hasta el d¨ªa 27 para reclamar. Las seis universidades publicar¨¢n las calificaciones en sus p¨¢ginas web. Pero Marta apostaba ya: 'Creo que aprobar¨¦. Siempre he sido muy negativa y luego me he dado cuenta de que puedes cambiar y conseguir lo que te propones'.