Un congreso conmemora en Ja¨¦n el centenario de la muerte de Emile Zola
Intelectuales de 17 pa¨ªses analizan al precursor del naturalismo
El pensamiento ut¨®pico del escritor franc¨¦s Emile Zola, la vigencia de su discurso en la sociedad actual o la revisi¨®n del concepto del naturalismo son algunas de las cuestiones que centran el Congreso Internacional sobre Emile Zola y el naturalismo, inaugurado ayer en la Universidad de Ja¨¦n. Un total de 87 investigadores procedentes de 17 pa¨ªses de cuatro continentes participan en este foro que se hace coincidir con el centenario de la muerte del que fue considerado el principal precursor del naturalismo.
Es la segunda vez en sus 11 a?os de vida que este congreso se celebra en Europa, y la primera vez que llega a Espa?a. Ha sido posible gracias al Departamento de Lenguas y Culturas Mediterr¨¢neas de la Universidad de Ja¨¦n y la colaboraci¨®n de la Asociaci¨®n Internacional de Estudios de Emile Zola, mucho m¨¢s arraigada en Am¨¦rica que en el viejo continente y que mantiene viva una escuela literaria y art¨ªstica que surgi¨® en Francia el ¨²ltimo tercio del siglo XIX y que fundamentaba la verdad de la novela en la escrupulosa observaci¨®n de la realidad y en la experimentaci¨®n.
El congreso, que se desarrolla hasta ma?ana s¨¢bado en el edificio Zabaleta del campus jiennense, cuenta con expertos de renombre en el campo del naturalismo procedentes de pa¨ªses tan diversos como Australia, Canad¨¢, Estados Unidos, Gran Breta?a, M¨¦jico, Corea, Brasil, Italia, Alemania, Holanda, Finlandia, Polonia, Austria, Portugal o Espa?a. Sin embargo, uno de sus principales atractivos es la presencia en Ja¨¦n de la biznieta de Emile Zola (Par¨ªs, 1840-1902). Brigitte Emile-Zola destac¨® la idea ut¨®pica que presidi¨® el pensamiento de su ascendiente. 'Pensaba que al final prevalecer¨ªa la bondad en el hombre, la idea de vivir todos en paz en el trabajo, en la familia', declar¨®. De alguna manera, esos rasgos humanos quedaron de manifiesto en Los cuatro evangelios (1899), una de las obras cumbres del escritor franc¨¦s.
'?l dec¨ªa que ten¨ªa derecho a so?ar', explic¨® Brigitte Emile-Zola, quien ha heredado de sus familiares todas las cartas de Zola con otros intelectuales europeos. En base a esos documentos, y tambi¨¦n a los testimonios de sus padres y abuelos, la biznieta de Zola quiso contrarrestar la imagen 'fantasiosa' de la esposa del escritor, Alexandrie, de quien dijo que 'la hab¨ªan colocado en un pedestal'. Seg¨²n los expertos que ayer se dieron cita en Ja¨¦n, Zola, atra¨ªdo por las ideas socialistas, quiso aplicar el rigor cient¨ªfico a los hechos humanos y sociales. Encarnaci¨®n Medina, profesora de la Universidad jiennense y una de las coordinadoras del congreso, agreg¨® que el compromiso de Zola con los m¨¢s desfavorecidos qued¨® evidenciado en otra de sus obras trascendentes: Yo acuso (1893), un c¨¦lebre manifiesto favorable a Dreyfus. En Espa?a, la influencia de Zola tuvo sus principales manifestaciones en P¨¦rez Gald¨®s y Pardo Baz¨¢n, y entre los hispanoamericanos a Edwards Bello, Gamboa o Martel.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.