Ministra, en Infantil ya aprenden a leer
Me van a perdonar que les refiera una an¨¦cdota personal, pero creo que su relevancia lo justifica. El hecho es que mi hijo Francesc, que termina estos d¨ªas su etapa de Educaci¨®n Infantil en el colegio p¨²blico Padre Catal¨¤, ya lee. A¨²n con bastantes titubeos e inseguridad, pero ya es capaz de comprender peque?os textos escritos (tanto en valenciano como en castellano.) Y no es que sea un especial, en su aula tambi¨¦n Dani, Marina, Ferran y varios compa?eros m¨¢s han aprendido a leer. Otros a¨²n no tienen esa soltura, pero est¨¢n cerca de alcanzarla y en breve adquirir¨¢n una adecuada competencia lectora. Alguno de los compa?eros de clase, por ser m¨¢s peque?os o por su ritmo madurativo m¨¢s lento, necesita un margen mayor y aprender¨¢n a leer el curso que viene. Hasta aqu¨ª quiz¨¢ no vean nada anormal, nada sorprendente. Por lo que cualquiera conoce respecto a sus hijos, nietos, sobrinos..., la mayor¨ªa de escolares de 4 y 5 a?os en los colegios espa?oles dedican una buena parte de su tiempo a actividades de iniciaci¨®n a la lectura y a la escritura (y a la numeraci¨®n y el c¨¢lculo).
Pues bien, esto que sabe cualquier persona corriente, lo desconocen en el Ministerio de Educaci¨®n. Hace unas semanas en su bolet¨ªn El Gobierno Informa se indicaba que 'en la actualidad, los objetivos de este nivel (Educaci¨®n Infantil) se circunscriben a la socializaci¨®n y al conocimiento del propio cuerpo, mientras que la nueva Ley de Calidad 'introduce el aprendizaje de lectura, escritura y habilidades num¨¦ricas'. Es necesario sacar al ministerio de su error. Ahora nuestros preescolares no s¨®lo est¨¢n aprendiendo donde tienen los pies y donde est¨¢n las orejas; no s¨®lo escuchan cuentos, aprenden canciones y juegan con sus compa?eros. Nuestros hijos tambi¨¦n han aprendido a leer y a contar. Ello ha sido posible gracias a la curiosidad infantil y a sus esfuerzos diarios, pero tambi¨¦n -y sobre todo- por el trabajo de su profesora, Mar¨ªa Pilar, prepar¨¢ndoles, organizando su aprendizaje.
Con el gran inter¨¦s y dedicaci¨®n que pone la mayor¨ªa del profesorado, no creo que le siente muy bien la informaci¨®n err¨®nea que el ministerio difunde respecto a qu¨¦ se hace en sus aulas. Como tampoco al resto del profesorado le deben gustar las frecuentes intervenciones de la ministra y sus expertos cuando aseguran que los alumnos s¨®lo estudian en clase el r¨ªo o el monte de su localidad y no los restantes r¨ªos y montes de Espa?a; o cuando se repite hasta la extenuaci¨®n que ya no se cultiva la memoria en la ense?anza y que no se exige esfuerzo a los escolares, sino que predominan las actividades l¨²dicas en las aulas (y todo ello como fruto de la aplicaci¨®n de esa ley que parece ser la causa de todos los males de la educaci¨®n: la LOGSE). La reiteraci¨®n de errores de este tipo, que manifiestan el desconocimiento en el ministerio de la realidad de las escuelas, nos lleva a dudar si se trata tan solo de ignorancia o es algo m¨¢s.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.