El jefe del Ej¨¦rcito de Yugoslavia se niega a acatar la destituci¨®n ordenada por Kostunica

El presidente de Yugoslavia, Vojislav Kostunica, pas¨® a retiro y destituy¨® ayer de su cargo al jefe del Ej¨¦rcito, el general Nebojsa Pavkovic, de 56 a?os, quien en una primera reacci¨®n se ha negado a aceptar la decisi¨®n presidencial. Pavkovic atribuye la decisi¨®n de Kostunica a 'una venganza personal' y asegura: 'No voy a cumplir la orden'. Pavkovic replic¨® de forma airada a la destituci¨®n, que calific¨® de 'ilegal', y se quej¨® de haber sido destituido 'como si fuese el peor canalla de este Estado'.

Pavkovic mand¨® las tropas de Yugoslavia en 1999 durante los bombardeos de la OTAN y supo mantenerse en el puesto tras la ca¨ªda del r¨¦gimen del presidente Slobodan Milosevic. El idilio que mantuvieron durante largo tiempo el presidente Kostunica y el general Pavkovic se rompi¨® ayer de forma abrupta con la destituci¨®n fulminante del militar, que se ha declarado en rebeld¨ªa y amenaza con revelaciones contra el presidente, al que acus¨®, en una declaraci¨®n en el telediario de la televisi¨®n estatal serbia (RTS), de haber utilizado al Ej¨¦rcito con fines partidistas.

En el mismo telediario, de m¨¢xima audiencia, Kostunica anunci¨® la destituci¨®n de Pavkovic, y no dio motivos claros para justificar la decisi¨®n. Tras subrayar como 'incuestionables' los m¨¦ritos de Pavkovic, 'durante la agresi¨®n de 1999', a?adi¨® Kostunica: 'Ahora, tanto el Ej¨¦rcito como el Estado necesitan unas capacidades diferentes'. A continuaci¨®n Kostunica critic¨® la forma en que Pavkovic se fue: 'Me da mucha pena que el general Pavkovic haya decidido irse de esta forma tan poco militar y haya pensado que ¨¦l est¨¢ por encima del Ej¨¦rcito, y el Ej¨¦rcito, por encima del Estado'. Seg¨²n Kostunica, decidi¨® tomar la medida 'por el control civil, la democracia y la conservaci¨®n del Ej¨¦rcito como instituci¨®n'.

El general, a continuaci¨®n y en el mismo telediario, acus¨® a Kostunica de tomar la decisi¨®n de forma ilegal y fuera del marco del Consejo Supremo de Defensa, que se hab¨ªa reunido ayer durante m¨¢s de cinco horas. Seg¨²n la agencia France Presse, en esa reuni¨®n Kostunica no consigui¨® convencer a los otros miembros del consejo de la medida. En el mencionado m¨¢ximo organismo participan, adem¨¢s de Kostunica, los presidentes de Serbia, Milan Milutinovic, y el de Montenegro, Milo Djukanovic, y altos mandos militares.

Abuso de poder

Pavkovic atribuye la decisi¨®n a 'una venganza personal del se?or Kostunica', porque desde hace un a?o le advirti¨® que abusaba de su posici¨®n de presidente y de usar los servicios de informaci¨®n militares para sus fines de partido, 'conseguir informaciones y otras cosas que obstaculizaban el funcionamiento del Ej¨¦rcito en su conjunto'. Advirti¨® amenazador Pavkovic que hablar¨¢ de 'otros abusos' y anunci¨® que 'ha descartado' aceptar la destituci¨®n: 'No voy a cumplir esa orden y pido la protecci¨®n de las instituciones m¨¢s altas del Estado'.

Pavkovic hab¨ªa sido durante mucho tiempo la manzana de la discordia entre Kostunica y sus aliados de coalici¨®n pol¨ªtica de la Oposici¨®n Democr¨¢tica de Serbia (DOS). Kostunica no destituy¨® en su d¨ªa a Pavkovic tal vez para recompensarle que el d¨ªa 5 de octubre de 2000, cuando cay¨® Milosevic, el militar se neg¨® a sacar los tanques contra la poblaci¨®n que se hab¨ªa lanzado a las calles de Belgrado.

A pesar de las exigencias de que lo destituyera, Kostunica mantuvo a Pavkovic en su puesto hasta ayer, pero la destituci¨®n amenaza con desencadenar una crisis por el anuncio de Pavkovic de que no obedecer¨¢ la orden del presidente.

El presidente yugoslavo ha nombrado al frente del Ej¨¦rcito federal a Branko Krga; 'espero que cumplir¨¢ con su deber', a?adi¨®. Krga fue en el pasado el n¨²mero dos del general ahora destituido por el presidente de Serbia y Montenegro.

Por su parte, el jefe de Gobierno de Serbia, el reformista Zoran Djindjic, acus¨® a Kostunica de desestabilizar la imagen de Yugoslavia en un nuevo episodio del enfrentamiento entre los dos pol¨ªticos serbios. Djindjic es partidario de las reformas r¨¢pidas que generen en el extranjero un clima favorable al Gobierno de Belgrado y abran la puerta a las inversiones que desesperadamente necesita la econom¨ªa yugoslava. Djindjic ha acusado repetidamente a Kostunica de mantener una postura ambigua en lo que respecta a desmontar las estructuras de poder levantadas por la familia Milosevic.