<l>Radio Nacional</l>

Le escribe un amante de la radio, totalmente descorazonado, para comunicarle mi rendici¨®n incondicional ante el proceso de degradaci¨®n que este medio est¨¢ sufriendo. Yo, que no pienso que haya una cadena sustancialmente mejor que otras, prefiero (prefer¨ªa) escuchar RNE simplemente por la ausencia de publicidad, aunque solapadamente metan alguna cu?a. Pero es que ya es inaguantable. Me refiero a las ma?anas del se?or Julio C¨¦sar Iglesias. El anterior, y en mi opini¨®n lamentable director de este programa, ya estuvo a punto de 'echarme' y, aunque falt¨® poco, aguant¨¦. Ahora bien, con ¨¦ste ya es imposible.

Ya de buena ma?ana nos coloca a sus, eso s¨ª, plurales tertulianos, unos de centro fachas, los otros de centro liberales, casi una hora, en la que los oyentes le resuelven el programa, siempre con temas muy importantes para la vida de la gente como, por ejemplo, recuerdos del colegio o algo por el estilo. F¨²tbol, mucho f¨²tbol y toros, muchos toros. Y tambi¨¦n la copla espa?ola y m¨¢s f¨²tbol y, adem¨¢s, Eurovisi¨®n ?toma ya!

Y para terminar, la hora cumbre. La ¨²ltima hora cada d¨ªa la dedica a la prensa rosa, al cuchicheo.

Como se puede ver, es una f¨®rmula imaginativa y revolucionaria ?uy!, perd¨®n, retiro lo de revolucionaria.

En fin, que ha vuelto la radio en blanco y negro, la radio nacional de Espa?a, cada d¨ªa mucho m¨¢s nacional.-