Mi Madrid
Soy un apasionado desde bien joven por mi Madrid, defensor de sus virtudes: sus monumentos, sus calles, su gente, sus fiestas, sus barrios y distritos, desde Hortaleza hasta Villaverde; de Fuencarral a Vic¨¢lvaro... Quiero decir con esto que conozco mi Madrid, lo bueno y lo malo, lo nuevo y lo antiguo, lo rico y lo pobre. Por suerte, siempre he tenido trabajos que me permit¨ªan patear mi Madrid, siempre por lugares diferentes, nunca por la misma ruta, descubriendo rincones nuevos, viendo crecer esos ¨¢rboles j¨®venes que iban surgiendo en todas las callejuelas de mi Madrid, sufriendo las interminables obras en glorietas, avenidas, aceras, en definitiva, mi Madrid.
Tengo s¨®lo 30 a?os, mis recuerdos pueden ser escasos en comparaci¨®n con los de otros madrile?os de nacimiento o de adopci¨®n; madrile?os todos, con m¨¢s vida a sus espaldas, pero con todos quiero compartir mi pesar sobre, a mi entender, la din¨¢mica hist¨¦rica en la que gira mi Madrid.
No s¨¦ el porqu¨¦, no s¨¦ si ser¨¢ por la masificaci¨®n; por jornadas de trabajo excesivas y abusivas, en las que sin saber muy bien la raz¨®n te exigen todo para ayer, en la que la persona como tal carece de valor, s¨®lo somos uno m¨¢s; si ser¨¢ por el incesante tr¨¢fico, en el cual decir hora punta es recurrir a la nostalgia, cuando en la actualidad disfrutamos de un apasionante d¨ªa punta; por el continuo vaiv¨¦n de violencia; por libertades mal entendidas; por una mala educaci¨®n creciente; por desviaciones pol¨ªticas mal entendidas y generalmente radicalizadas y por una falta de respeto total a nuestro entorno.
Yo no soy qui¨¦n para dar lecciones a nadie. Tambi¨¦n he hecho cosas no muy l¨®gicas, pero no se me pasan por la cabeza algunas de las cosas que en la actualidad suceden en Madrid.
Tengo la suerte de estar casado desde hace cuatro a?os con una persona maravillosa. Nuestro ¨²nico objetivo es ser felices juntos de una forma sencilla, viviendo y dejando vivir. Parece simple y lo es. El problema es que, hoy por hoy, la gente quiere m¨¢s de lo que realmente necesita, hipotecando tiempo libre y salud, dejando de lado familia, pareja, amistades y, en definitiva, todo lo que es contacto con las personas. Cosas tan b¨¢sicas como ceder el asiento en el transporte p¨²blico, facilitar maniobras o dejar salir antes de entrar, son detalles que har¨ªan el d¨ªa a d¨ªa mucho m¨¢s ameno y que son muy sencillos de llevar a cabo.
Vamos a ser padres en breve de una, seguro, preciosa ni?a, y, aunque siempre he querido y siempre querr¨¦ a mi Madrid, no es ¨¦ste el Madrid que queremos para nuestra hija. A partir de este verano nos vamos a vivir a una peque?a poblaci¨®n, buscando una vida mejor, m¨¢s sana, m¨¢s sencilla y, esperamos, m¨¢s feliz. Pero, es inevitable, siempre echar¨¦ de menos mi Madrid.
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