El fiscal mantiene que ETA mat¨® a Lluch porque era 'un hombre de paz'
El fiscal de la Audiencia Nacional asegur¨® ayer en el juicio por el asesinato de Ernest Lluch que el ex ministro socialista 'era una persona abierta que amaba Euskadi y a los vascos, un dem¨®crata, un hombre de paz, por eso estos reaccionarios, estos canallas le quitaron la vida'. Acto seguido, citando a Bertold Bretch, asegur¨®: 'Los vencidos de hoy son los vencedores de ma?ana'.
El fiscal, que reclam¨® la imposici¨®n de condenas de 54 a?os de prisi¨®n para cada uno de los tres terroristas del comando Barcelona de ETA, I?aki Krutxaga, Lierni Armendariz y Fernando Garc¨ªa Jodra, solicit¨® al tribunal que aplique 'con todo rigor la ley aprobada por todos'.
La abogada defensora Ainhoa Baglietto solicit¨® la absoluci¨®n, aunque sus clientes no reconocen la legitimidad al tribunal. Aleg¨® que a su entender el procedimiento era nulo porque se super¨® el tiempo de detenci¨®n antes de pasar a disposici¨®n judicial y destac¨® que sus defendidos hab¨ªan sido objeto de malos tratos.
'No le dio tiempo a matarme'
Previamente declararon los dos polic¨ªas urbanos de Barcelona que detuvieron a Krutxaga y Armendariz el 11 de enero de 2001 en el centro de la ciudad. Ambos relataron que, cuando iban de patrulla por el Paralelo, se dieron cuenta de que el Renault 19 que les preced¨ªa llevaba la matr¨ªcula torcida. Al parar en el sem¨¢foro, advirtieron que el coche llevaba la puerta del copiloto abierta y con la cerradura con signos de haber sido forzada. Al advertir al conductor, que era Krutxaga, ¨¦ste no encontraba la manilla, por lo que dedujeron que el coche pod¨ªa ser robado.
Poco despu¨¦s le dieron el alto y preguntaron al conductor si estaba perdido o si hab¨ªa bebido. Despu¨¦s le pidieron la documentaci¨®n y la del coche. Krutxaga hizo como que la buscaba en la guantera, pero poco despu¨¦s se llev¨® una mano a la cintura, por lo que el agente le enca?on¨®. Encontr¨® un arma, una PK, del calibre 9 mil¨ªmetros parabellum. Su compa?era, mientras tanto, enca?onaba a Lierni Armendariz, que tambi¨¦n iba armada y en ese momento estaba escuchando con un esc¨¢ner la emisora de la polic¨ªa.
Krutxaga dijo que era polic¨ªa, pero el agente se dio cuenta de que el arma no se correspond¨ªa con las que utilizan los cuerpos de seguridad del Estado. La terrorista dijo entonces que eran guardias civiles, pero el agente dijo que los que pertenecen a un cuerpo no suelen decir que son de otro, por lo que les mantuvieron enca?onados.
Krutxaga reconoci¨® entonces que era miembro del comando Barcelona de ETA. El agente le pregunt¨® por qu¨¦ no le hab¨ªa matado como hab¨ªa hecho d¨ªas antes con su compa?ero Juan Miguel Gervilla, asesinado el 20 de diciembre de 2000. El etarra respondi¨® que no le hab¨ªa dado tiempo, porque le hab¨ªa cogido desprevenido.
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