Radiograf¨ªa de 20 a?os de Parlamento
La C¨¢mara auton¨®mica ha pasado de una funci¨®n casi puramente legislativa al control e impulso del Gobierno
El Parlamento de Andaluc¨ªa no ha escapado a la evoluci¨®n natural del paso del tiempo y en 20 a?os las pr¨¢cticas de la C¨¢mara auton¨®mica han ido variando hasta alcanzar la madurez pol¨ªtica, fruto tambi¨¦n del aprendizaje democr¨¢tico. Cuando se cumplen dos d¨¦cadas desde la constituci¨®n de la asamblea legislativa andaluza en los Reales Alc¨¢zares de Sevilla, un estudio interno de estos 20 a?os revela c¨®mo la actividad parlamentaria ha pasado de ser sustancialmente legislativa a de control e impulso al Gobierno. La transformaci¨®n, dice el trabajo, no s¨®lo se debe a que la promulgaci¨®n de leyes -pasados los primeros momentos de configuraci¨®n institucional del autogobierno de la I y II legislaturas- ha ido decayendo de forma natural, sino a la convicci¨®n de que la actividad parlamentaria no puede quedar circunscrita a la funci¨®n legislativa y que las c¨¢maras deben contribuir en la orientaci¨®n pol¨ªtica de la sociedad, trasladando a los gobiernos la percepci¨®n que de los asuntos p¨²blicos tienen los grupos parlamentarios. Tambi¨¦n se considera ahora de especial importancia el control del ejecutivo y la transparencia de la informaci¨®n, que distingue a los sistemas democr¨¢ticos de los dictatoriales.
En la IV legislatura, la de la 'pinza', de las 7 leyes aprobadas, s¨®lo una era del Gobierno
Adem¨¢s de legislar, el Parlamento incide en la orientaci¨®n pol¨ªtica de la sociedad
Como muestra cabe destacar el aumento espectacular de las preguntas orales en pleno (funci¨®n de control), de 237 contestadas en la I legislatura a 1.259 en la V legislatura; las proposiciones no de ley (impulso), de 51 aprobadas a 539; o las comparecencias y solicitudes de informaci¨®n, de 421 sustanciadas a 3.753.
El crecimiento de las iniciativas de control, informaci¨®n e impulso del Parlamento andaluz y su protagonismo actual, sin embargo, no ha supuesto la reducci¨®n dr¨¢stica de la aprobaci¨®n de leyes -si bien la C¨¢mara auton¨®mica ha pasado por momentos de escasa productividad en este terreno- ya que, por ejemplo, en la I legislatura (1982-1986) y V legislatura (1996-2000) ha salido adelante el mismo n¨²mero de textos legislativos: un total de 45.
En un an¨¢lisis cronol¨®gico, el estudio destaca c¨®mo en la I legislatura, con gobiernos de mayor¨ªa absoluta presididos por los socialistas Rafael Escuredo y Jos¨¦ Rodr¨ªguez de la Borbolla, se caracteriza por un conjunto de leyes de contenido institucional (del Himno y Escudo, Ordenaci¨®n Territorial, Electoral, del Gobierno y Administraci¨®n, del Defensor del Pueblo) y la puesta en marcha de la actividad econ¨®mica p¨²blica. Adem¨¢s, se incide en los bloques sobre los que la comunidad detenta un amplio espacio competencial: cultura, educaci¨®n, sanidad y medio ambiente.
La II legislatura es una continuaci¨®n de la etapa anterior -ampliando las instituciones auton¨®micas (C¨¢mara de Cuentas, Consejo Andaluz de Municipios, Ley de Relaciones con las Diputaciones y los instrumentos de intervenci¨®n econ¨®mica (IFA, Ley de Estad¨ªstica)-, con un cierto decaimiento al bajar el n¨²mero de leyes aprobadas a 30, 'reducci¨®n f¨¢cilmente comprensible por cuanto se encontraban ya reglados los aspectos fundamentales de la organizaci¨®n jur¨ªdico-administrativa de la comunidad', matiza el estudio. No obstante, las iniciativas de control e impulso empiezan su carrera ascendente, aunque todav¨ªa no tengan un papel protagonista. En esta legislatura se produce una cierta colaboraci¨®n por encima de lo que suele ser normal entre Gobierno y Parlamento en la tarea legislativa, con cinco leyes que tienen su origen en una proposici¨®n de ley (a instancia de un grupo parlamentario y no del Ejecutivo).
En la III legislatura -ya con Manuel Chaves al frente del Gobierno, tambi¨¦n de mayor¨ªa absoluta- el n¨²mero de leyes aprobadas cae a 24, cifra materialmente menor si se tiene en cuenta que algunas de ellas son modificaciones de las anteriores o tienen un mero car¨¢cter instrumental. Se hace el Consejo Consultivo, en el plano institucional, y se promulgan las leyes de Patrimonio Hist¨®rico, Coordinaci¨®n del Sistema Universitario, Protecci¨®n Ambiental u Ordenaci¨®n del Territorio, adem¨¢s de crear las universidades de Almer¨ªa, Huelva y Ja¨¦n.
Hay que destacar que el Parlamento modific¨® en esta etapa la Ley de Gobierno para otorgar al presidente del Ejecutivo la facultad de disolver anticipadamente la C¨¢mara, potestad no prevista en el Estatuto de Autonom¨ªa que hab¨ªa ocasionado no pocos contratiempos al coincidir los periodos reglados electorales (cada cuatro a?os) con los meses de verano. El sistema pol¨ªtico andaluz se equipar¨® de esta forma al del poder central, lo que permiti¨® posteriormente a Chaves convocar elecciones anticipadas a mitad de la siguiente legislatura, conocida como la de la pinza, al no lograr aprobar por segunda vez consecutiva los presupuestos generales de la comunidad.
La IV legislatura es singular no s¨®lo por su escasa duraci¨®n (1994-1996), tambi¨¦n por la existencia de un Gobierno en minor¨ªa (populares e IU sumaban mayor¨ªa) al que le resultaba muy dif¨ªcil llevar a la pr¨¢ctica su programa electoral. De hecho, de los siete textos legislativos aprobados, ¨²nicamente uno proviene de un proyecto de ley del Ejecutivo. Desde el punto de vista estrictamente parlamentario, se reforma el Reglamento de la C¨¢mara, con el apoyo de todos los grupos, que var¨ªa sustancialmente la mec¨¢nica de funcionamiento.
El rasgo caracter¨ªstico de la V legislatura, en la que el PSOE forma un Gobierno de coalici¨®n con los andalucistas, es la recuperaci¨®n del pulso legislativo (45 leyes, tras el descenso escalonado a 30, 24 y 7 de los periodos anteriores) y tambi¨¦n el incremento de las iniciativas de impulso e informaci¨®n. Seg¨²n el estudio, la causa de la revitalizaci¨®n legislativa 'hay que buscarla sin duda en el esfuerzo del Gobierno por culminar un programa cuya concreci¨®n qued¨® frustrada' por la brevedad del pasado mandato y su posici¨®n minoritaria.
Un primer bloque de leyes tienen como objetivo volver a modificar algunas reformas aprobadas durante la pinza con la oposici¨®n PSOE. Es el grupo socialista, a trav¨¦s de proposiciones de ley, el que se encarga promover, por ejemplo, que el director general de la RTVA y los presidentes de las juntas rectoras de los parques naturales vuelvan a ser nombrados por el Gobierno en lugar de por el Parlamento. Tambi¨¦n se reforma la Ley de Publicidad Institucional.
La ley m¨¢s importante de la V legislatura, tanto por su intenso debate pol¨ªtico como por su trascendencia para el desarrollo econ¨®mico de Andaluc¨ªa, es sin lugar a dudas la de Cajas de Ahorro. En el paquete econ¨®mico destacan igualmente la Ley del Consejo Econ¨®mico y Social y la Ley de Cooperativas; en el social, las leyes de Drogas, Atenci¨®n al Menor, Discapacidad o Solidaridad en la Educaci¨®n; en el sectorial, leyes del Deporte, Turismo, Espect¨¢culos P¨²blicos; y en el medioambiental, la Ley de Incendios Forestales o la de Do?ana.
En la legislatura actual, la VI, renovado el pacto de coalici¨®n, han sido aprobadas por el momento 17 leyes, cuatro originadas en proposiciones de ley y 13 promovidas por el Gobierno. A mitad del periodo, las iniciativas de control han superado el volumen completo de la etapa anterior, y las de impulso en informaci¨®n crecen a un ritmo muy acelerado, lo que confirma el cambio progresivo del parlamentarismo andaluz.
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