Viene la telecompra
El incremento del tr¨¢fico comercial ha sido notable, pero, hasta ahora ha respetado ciertos esquemas: los productos llegan en veh¨ªculo hasta los comercios, donde los carga el cliente. Pero el futuro augura un nuevo m¨¦todo: la telecompra, con m¨²ltiples destinos para la carga. Hasta hoy los ayuntamientos han podido prever d¨®nde se produc¨ªa la actividad comercial y reservar espacio para carga y descarga. El problema cambia si se multiplica el n¨²mero de furgonetas de reparto que llevan paquetes a cada domicilio. Una soluci¨®n es suprimir el aparcamiento en superficie, pero hoy por hoy es inviable. Barcelona (como tantas otras ciudades europeas) no dispone de plazas suficientes.
La soluci¨®n, opina Pere Navarro, comisionado del alcalde de Barcelona para la movilidad, es el pacto social para el uso del espacio p¨²blico, pero prestando atenci¨®n a lo que se produce (el aumento de la actividad comercial) y a lo que se avecina (la dispersi¨®n por toda la ciudad de los puntos de entrega de mercanc¨ªas). En su opini¨®n, se ha hecho una buena labor en la planificaci¨®n del transporte p¨²blico. Pero la evoluci¨®n de parque m¨®vil indica que hay que prestar m¨¢s atenci¨®n a la carga y descarga. Y repite los datos de los ¨²ltimos cinco a?os: crecimiento de veh¨ªculos comerciales, el 5% anual; aumento de coches particulares, el 0,6%. Esto implica que el uso del coche como forma de transporte no est¨¢ creciendo y que s¨ª lo est¨¢ haciendo, y fuera de control, el movimiento comercial. Con un agravante: se puede actuar para limitar el tr¨¢fico particular, pero no se puede restringir la actividad comercial sin que se resienta la econom¨ªa en su conjunto.
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