El ruido impide la vida
- No hay derecho. 'Les telefoneo con la convicci¨®n de que mi petici¨®n caer¨¢ en saco roto, como es habitual con estos dirigentes municipales y comunitarios que tenemos', dice un lector, 'pero no hay derecho a que haya calles donde el ruido impide sencillamente la vida, sin que a los que las transitan con camiones o, sobre todo, motocicletas, les suceda nunca nada'.
- Un edificio sobre otro. 'En la calle de Dulcinea esquina con la de Hernani tenemos un edificio pr¨¢cticamente metido encima del otro', informa Jos¨¦ Silva.
- El nombre correcto de un puente. 'Les llamo en relaci¨®n al que ustedes llaman puente de Eduardo Dato, en Madrid, cuyo nombre verdadero es puente de Enrique de la Mata Gorostizaga y que as¨ª debe ser llamado en sus informaciones', pide un lector.
- Operaci¨®n Asfalto, vayan al Puente de Vallecas. 'Mensaje para los de la Operaci¨®n Asfalto', de un vecino de Vallecas: 'No olviden este verano las calles de Miguel Palacios, Puerto de Taranc¨®n y Sicilia, en el distrito de Puente de Vallecas, junto a la autov¨ªa de circunvalaci¨®n M-30'.
- No se enteran. 'Me llamo Luisa, tengo 74 a?os y me gusta mucho el deporte', cuenta una se?ora. 'Me parece que Madrid ocupa el ¨²ltimo lugar del mundo en atenci¨®n de las autoridades al deporte', afirma, 'pese a que aqu¨ª quieran montar los Juegos Ol¨ªmpicos. Parece que s¨®lo existiera el f¨²tbol, porque nos ponen dos partidos cada domingo de invierno, pero no se enteran de los campeonatos de tenis que aqu¨ª se juegan; de los dem¨¢s deportes, nada de nada', critica.
- Verg¨¹enza en el Real. 'Es vergonzoso lo del Teatro Real', se queja un amante de la m¨²sica, 'porque nunca hay entradas pese a que te tienen al tel¨¦fono durante tres cuartos de hora, como me he pasado hoy, sin ning¨²n resultado, por cierto'.
- Agua perdida a espuertas. 'Llamo con relaci¨®n a la publicidad del Canal de Isabel II, que ha lanzado una campa?a para ahorrar agua, que es un bien escaso', comenta una lectora. 'Pero debo decir que el agua que yo gasto cuando me lavo los dientes supone bien poco al lado de la fuga constante de agua en la Castellana, donde se riega no s¨®lo el c¨¦sped, sino toda la calle; sin hablar de los barrenderos, que usan el agua con mucha alegr¨ªa... Cuando una observa una fuga, asiste impotente: tardan mucho en cortar el agua y no intentan prever estos desastres', protesta.
- Una cuesti¨®n de salud p¨²blica. 'Quiero denunciar el hedor t¨®xico e insoportable que padecemos en el sureste de Madrid procedente de una incineradora', se queja un vecino. 'Ni Ayuntamiento ni Comunidad hacen nada ante este problema, pas¨¢ndose la pelota uno a otro, mostrando su desinter¨¦s por este asunto; y ello pese a que es una cuesti¨®n de salud p¨²blica', subraya.
- Villalba, s¨®lo toros. 'Me llamo Jos¨¦ Manuel y soy vecino de Villalba, cuyo Ayuntamiento destina este a?o 50 millones de pesetas a festejos taurinos', cuenta un residente en esta localidad madrile?a. '?sa es la cantidad de la que hasta su socio de gobierno, Izquierda Unida, se ha quejado. Mientras en pueblos vecinos, como Galapagar o El Escorial, hay un festival de jazz o un mont¨®n de actos culturales, resulta lamentable el nivel al que llega el gasto en Villalba para cosas de los toros; luego dicen que Villalba es la capital de la sierra: en eso es en lo que se va el dinero de todos', recuerda este lector.
- Tres polic¨ªas para tres millones de madrile?os. 'En la noche del viernes al s¨¢bado pasados, en un ¨¢tico del barrio de Salamanca, se celebr¨® una fiesta que dur¨® hasta altas horas de la ma?ana', dice un lector. 'Como el ruido era ensordecedor, llamamos a la Polic¨ªa Municipal, donde tardaron hasta 20 minutos en coger nuestra llamada; menos mal', a?ade, 'que se trataba de un caso de contaminaci¨®n ac¨²stica, porque si llega a ser otro tipo de contaminaci¨®n, no s¨¦ qu¨¦ hubiera pasado. En fin', prosigue, 'el caso es que, cuando le hice ver que tardaban, una agente me dijo que estaban tres personas para atender a tres millones de madrile?os; con estas cifras de asistencia, deben de ser supermanes; el caso es que hicimos la pertinente denuncia, porque en mi casa trabajamos los s¨¢bados y necesitamos dormir'.
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